Merry del Val y Zulueta-Wilcox, Rafael (1865-1930).
Cardenal español de origen británico, nacido en Londres en 1865 y fallecido en en Roma en 1930. Fue secretario de Estado del papa Pío X (1903-1914), camarlengo de Pío XI (1857-1939) y secretario de la Congregación del Santo Oficio. Fue beatificado por Pío XII (1876-1958) en el año 1956.
Hijo de una agregado de la embajada española en Londres, recibió una espléndida formación académica en los mejores colegios británicos. Por la rama paterna, sus remotos orígenes hay que buscarlos en una familia irlandesa que emigró, primero, a Inglaterra, de donde pasó, en 1700 a España; por otra parte, su madre descendía de una notable rama de la nobleza vasca (la de los condes de Zulueta) y de la no menos linajuda estirpe escocesa de los Wilcox. Esta riqueza y variedad de antecedentes habría de alentarle a estudiar con ahínco las principales lenguas y tradiciones de la cultura europea.
A pesar de sus orígenes aristocráticos, se educó siempre en un clima de sobriedad y austeridad, dentro de una modestia personal que conservó a lo largo de toda su vida. Inclinado desde muy joven a la vida espiritual, siguió los pasos habituales en la carrera del sacerdocio y, tras dos años de fructíferos estudios en el prestigioso Upshaw College, fue llamado a Roma por el papa León XIII (1810-1903). Había sido el padre del joven Rafael quien, personalmente, le había presentado a Su Santidad, merced a la familiaridad que tenía con la Santa Sede por su condición de diplomático (de hecho, llegó a ser embajador de España en el Vaticano).
León XIII, consciente de la valía del joven Merry del Val, dispuso su inmediato ingreso en la Accademia dei Nobili Ecclesiasticci, donde el futuro beato completó su formación intelectual entre lo más selecto de la Curia romana. León XIII también le creó arzobispo titular de Nicea, y acabó por nombrarle Presidente de la susodicha Accademia. Su progresión ascendente quedó bien patente en 1892, cuando el citado pontífice le honró con el cargo de cameriere segreto, que requería su presencia inexcusable en el Vaticano. León XIII dejaba entrever, con esta decisión, su intención de que la carrera eclesiástica de Rafael Merry del Val quedase, a partir de entonces, plenamente vinculada a la Santa Sede.
Su progresión dentro del Vaticano fue tan espectacular que, el 9 noviembre de 1903, con tan sólo treinta y ocho años de edad, fue creado cardenal por el Papa Pío X, que acaba de ocupar la Silla Gestatoria. Rafael Merry del Val se convertía así en uno de los prelados más jóvenes de la historia de la Iglesia, al tiempo que asumía cargos de gran responsabilidad, como el de secretario de Estado (al que llegó también por decisión expresa del nuevo sucesor de Pedro). En los tres y siglos y medio que llevaba funcionando esa oficina dentro de la Curia romana, jamás había sido dirigida por un secretario de Estado tan joven como lo era Merry del Val cuando accedió a ese puesto, en sustitución del cardenal Mariano Rampolla del Tindaro.
Giussppe Melchiorre Sarto, antiguo patriarca de Venecia que acaba de ser elevado al Trono de San Pedro el 4 de agosto de 1903, dispensó todos estos favores a Merry del Val por la grata impresión que éste le había causado durante el cónclave celebrado tras la muerte de León XIII, del que el citado patriarca de Venecia habría de salir convertido en el nuevo Papa Pío X. Merry del Val, en su condición de hombre experimentado en la compleja administración vaticana, había ejercido como secretario de dicho cónclave, y así tuvo ocasión de confraternizar con quien estaba llamado a ocupar el Solio Pontificio (y, años después, a ser elevado a los altares).
Con la muerte de Pío X y la llegada al Papado de Benedicto XV (1854-1922), Rafael Merry de Val dejó de ser secretario de Estado y pasó, durante algunos años, a un discreto segundo plano. Pero su figura volvió a resurgir, agigantada, en la década de los años veinte, cuando el sucesor de Benedicto XV, que dirigió la Cristiandad con el nombre de Pío XI, le elevó al rango de camarlengo de la Santa Iglesia Romana. La importancia de esta dignidad queda patente en sus elevadas atribuciones: presidir la Cámara Apostólica y gobernar la Iglesia mientras el trono pontificio está vacante. Pío XII, el último de los cuatro pontífices a los que llegó a conocer Rafael Merry del Val durante su fecunda pertenencia a la Curia romana, le honró también con el cargo de Secretario de la Congregación del Santo Oficio.
A Pío XI le sucedió, en la Silla Gestatoria, Pío XII, quien, un cuarto de siglo después del fallecimiento de Rafael Merry del Val, llevo a término su proceso de beatificación.
Bibliografía
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GONZÁLEZ CHAVES, Alberto José. Rafael Merry del Val (Madrid: Ediciones San Pablo, 2005).
JRF
