Bugallón, José Torres (1873-1899).
Militar revolucionario filipino, nacido en Salasa (provincia de Pangasinán, Luzón) el 28 de agosto de 1873 y fallecido en Malolos en febrero de 1899, como resultado de las heridas recibidas en la batalla de La Loma, lo que le convirtió en un héroe de la guerra de independencia contra Estados Unidos.
Proveniente de una prominente familia de la región de Pangasinán, José Bugallón pasó parte de su infancia y juventud en la ciudad de San Isidro (provincia de Nueva Écija), donde se formó bajo la tutela de don Rufino Villaruz, antes de trasladarse en 1886 a Manila para cursar el bachillerato en el prestigioso Colegio San Juan de Letrán de la capital. Una vez obtenida la graduación en Artes (1889) ingresó en el Seminario de San Carlos, pero al poco tiempo decidió abandonar la carrera sacerdotal para iniciar la de armas, su auténtica vocación. Con tal fin ganó una plaza de pensionado que le permitió viajar a España e ingresar en la Academia Militar de Toledo (1892), centro en el que se graduó como oficial en 1896.
A su regreso a las Filipinas fue destinado como segundo teniente de un regimiento de infantería del ejército colonial español, unidad con la que sirvió durante la guerra contra los revolucionarios del Katipunan; entre otras acciones bélicas, Bugallón participó en la batalla de Talisay (mayo de 1897) y la defensa de Manila (julio de 1898), por lo que fue condecorado con la Cruz Roja del Mérito Militar y la Cruz de María Cristina. Finiquitado el dominio español sobre las islas, regresó a la condición de civil aunque no por mucho tiempo: ante la inminencia de la guerra contra los Estados Unidos, el gobierno independentista de Emilio Aguinaldo reclamó sus servicios, uniéndose de inmediato a las filas del recién creado ejército filipino. Durante esta nueva contienda Bugallón sirvió como ayudante de campo del general Antonio Luna, quien debido a su formación castrense y experiencia le encomendó la tarea fundamental de reclutar e instruir a los nuevos reclutas.
José Bugallón alcanzó la celebridad durante la batalla de La Loma (5 de febrero de 1899), en la que dirigió al parecer con maestría a las fuerzas filipinas encargadas de defender dicha posición ante el asalto de las tropas estadounidenses, muy superiores en número y armamento. Herido en las piernas en el transcurso del combate, el general Luna ordenó de inmediato su evacuación, acudiendo él mismo a su socorro y afirmando según cuentan las crónicas que “Bugallón [...] es tan valioso como quinientos soldados". Por su valor en la batalla fue ascendido además al grado de teniente coronel y condecorado, aunque finalmente no pudo salvarse debido a la gravedad de las heridas recibidas.
En recuerdo de este héroe de la independencia filipina las autoridades del país decidieron en 1921 rebautizar su localidad natal, Salasa, con el nombre de Bugallón.
