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HistoriaBiografía

Novia de Salcedo y Castaños, Pedro (1790-1865).

Político y escritor español nacido en Bilbao el 18 de enero de 1790 y muerto en Madrid el 1 de enero de 1865.

En 1817 fue alcalde de Bilbao. Al año siguiente representó a su villa natal en las Juntas Generales de Guernica. Fue diputado provincial entre 1820 y 1822, y regidor en 1820 (a partir del 5 de abril), en el primer ayuntamiento constitucional del Trienio Liberal. Al poco tiempo, varios vecinos pidieron al jefe político la desposesión del cargo de regidor a Novia de Salcedo, acusado de ser deudor a los fondos públicos, aunque (según Guiard) "bien se advierte que era otra la causa de su hostilidad". Fue, junto a Lama, el encargado por el ayuntamiento para organizar una suscripción pública para costear los uniformes y armamentos necesarios para una compañía de milicia local que se trataba de formar en la villa. En abril de 1822 formaba parte de la Diputación provincial y era comandante general del batallón de la milicia reglamentaria (acusada por los voluntarios locales de escaso celo constitucional, cuando no de realismo solapado). Tras un motín popular, el 25 de julio de 1822, fue desarmada dicha milicia reglamentaria. Tachado de absolutista, se vio obligado por entonces a abandonar la localidad (junto a Jusue y otros).

Tras la caída del régimen constitucional, tomó posesión del cargo de capitular en el ayuntamiento (24 de abril de 1823). Fue también nombrado comandante general de la milicia realista organizada en Bilbao en abril de 1823, conocida como "Guardia de Honor y Vigilancia". Una Real Orden de la Regencia, del 23 de julio de 1823, decretó que todos los que hubiesen servido en la milicia voluntaria local quedasen privados de cualquier empleo o cargo oficial, lo que afectó a Novia de Salcedo (que era regidor), al secretario municipal J. de Urquijo y al propio alcalde Jusue, que tuvieron que dimitir. Sin embargo, el concejo decidió exonerarles y representar a Su Majestad, explicando "los servicios y afecto de aquellos a la causa del Rey". Con motivo de un motín ultrarrealista, ocurrido el 15 de agosto de 1823, dimitió de su cargo de comandante de la Guardia de Honor, aunque el concejo no aceptó su renuncia.

Al conocer la "liberación" de Fernando VII, fue enviado el propio Novia de Salcedo a Madrid, a fin de que expresase su felicitación al rey. El reaccionarismo político de este sector de la sociedad bilbaína llegó al extremo de pedir en 1824 "el urgente restablecimiento del Tribunal de la Inquisición" para frenar a la "hidra revolucionaria", como expresaba el Ayuntamiento en una comunicación enviada al Rey y redactada por el propio Novia de Salcedo.

De 1825 a 1827 fue primer diputado general por el bando oñacino, junto con el marqués de Valdespina. Entre 1825 y 1826 representó al Señorío de Vizcaya en Madrid como diputado de Corte. Fue uno de los comisionados por el concejo para preparar el recibimiento a los reyes en su visita a Vizcaya, en 1828. Se destacó, asimismo, en el alzamiento carlista de octubre de 1833, formando parte como padre de provincia de la Diputación general carlista y encargándose personalmente de la dirección militar, como comandante de los batallones de la Guardia de Honor de Bilbao. El 7 de diciembre, por un decreto de Valdespina y Batiz, se confirió a Zumalacárregui la comandancia general de las tropas del Señorío, por hallarse indispuesto Novia de Salcedo y por tener Zabala que ocupar el destino de diputado general.

Es el autor de una conocida obra titulada Defensa histórica, legislativa y económica del Señorío de Vizcaya y provincias de Álava y Guipúzcoa, terminada de escribir en 1829, aunque no sería publicada hasta 1851, en 4 volúmenes (impresos en Bilbao por Delmas e hijo). Se trata de la última obra que cierra la polémica foral provocada por J.A. Llorente a fines del XVIII. Tras la guerra carlista, fue enviado a Madrid, junto a F. de Hormaeche, para evitar la reforma del régimen foral. Nuevamente diputado provincial entre 1841 y 1843, y general entre 1846 y 1848, y 1852 y 1854. Además de la Defensa histórica, dejó inéditas varias obras: un opúsculo sobre "La ley considerada en su esencia y diversos comentarios de tema religioso" que nunca se publicaron, por haberlo querido así su propio autor, y un voluminoso Diccionario etimológico del idioma Bascongado, que se publicaría años después con un prólogo de su biógrafo A. de Artiñano (Tolosa, 1887).

Bibliografía.

  • GUIARD LARRAURI, Teófilo. Historia de la noble villa de Bilbao. 4 vols. (Bilbao, 1905-1912; compendio e índices, Bilbao, 1974).

A. GIL NOVALES.

Autor

  • Gil Novales.