León III, Flavio, Emperador de Bizancio (680-741).
Emperador de Bizancio, llamado el Isáurico, nacido alrededor de 680 y muerto en 741. Era natural de Isauria y pertenecía a una familia oscura. Mandaba las tropas de Oriente cuando Anastasio fue depuesto. No queriendo reconocer como su sucesor a Teodorico III, tomó las armas con pretexto de restablecer a Anastasio, marchó a Constantinopla, hizo abdicar a Teodorico y se proclamó en su lugar en 718. Sitiado poco después por los sarracenos defendió victoriosamente la capital. Sofocó igualmente una sublevación de Sergio, gobernador de Italia haciendo dar muerte a Basilio, que había sido proclamado rey. Otro tanto hizo con su antecesor y bienhechor Anastasio, que quiso hacer valer sus derechos al imperio. Mandó a los judíos, bajo pena de muerte, bautizarse. Los montanistas, que recibieron igual orden, se abrasaron en sus templos para no obedecerla. Promulgó en 726 un decreto aboliendo el culto de las imágenes que suscitó una oposición general en el imperio, por lo que fue excomulgado por el papa Gregorio II y viéndose obligado a ahogar en sangre continuas rebeliones hasta dentro de su misma capital. Desesperado por no reducir Italia a la obediencia, separó Grecia, Iliria y Macedonia de la autoridad espiritual de los papas, sometiéndolas a los patriarcas de Constantinopla, lo cual produjo el cisma de las dos iglesias. Rechazó una nueva invasión de los sarracenos en Siria. Dejó por sucesor a su hijo Constantino V Copronimo. Los últimos años de su reinado se señalaron por espantosos terremotos que cubrieron de ruinas Tracia.
