Girona, Cerverí de (s. XIII).
Trovador español oriundo de Cervera de la Segarra, de la que tomó el nombre de "Cerverí" con el que ha pasado a la historia de la literatura. El apellido sobrenombre "de Girona" se debe a que le fueron concedidas tierras de dicha provincia por Jaime I. Su nombre verdadero era Guillém de Cervera y, ya en vida, se le conoció indistintamente por los dos nombres. Es el trovador del que más obras nos han llegado: ciento catorce piezas líricas y seis poemas largos, de los que cinco aparecen bajo el nombre de Cerverí y uno (los Proverbis ) bajo el de Guillém de Cervera. La noticia más antigua que conservamos de él data de 1259, fecha en la que dedica una pastorela para felicitar al todavía infante don Pedro por haber sido declarado sucesor de Jaime I. Poeta a sueldo, escribe obras ensalzando tanto a los reyes (Jaime I y Pedro III) como a los vizcondes de Cardona, bien que su carácter áulico no le lleve a la lisonja extrema, toda vez que también se permite criticarlos cuando la ocasión lo requiere, especialmente cuando se enfrentan a la corona. De este modo, la poesía dedicada a acontecimientos políticos, especialmente a los de los últimos años del reinado de Jaime I, será frecuente. Así, La faula del rosnyol celebra las paces entre el rey y su hijo, y otros poemas cantarán a la partida del Conquistador a las Cruzadas o a la prisión de Enrique de Castilla así como, casi simultáneamente (1276), a las muertes de Jaime I y de Ramón Folc de Cardona, el vizconde al que tanto debía y en cuya elegía se permite ser más personal que en la del propio rey, sujeta a moldes cortesanos en los que no podía faltar, por ejemplo, el elogio del sucesor. Junto a todo ello, no podía faltar en un trovador como Cerverí de Girona el canto a una dama cuya identidad se nos ha ocultado hasta hoy y a la que se refiere bajo el sobrenombre de "Sobrepretz".
Durante el viaje del todavía príncipe Pedro a Castilla en 1269, Cerverí figuró en el séquito y dedicó a Alfonso X de Castilla la Canço de Madona Santa María en la que el poeta juega a cantar a la "dama" a la que el rey poeta había dedicado sus Cantigas. También parece corresponder a este viaje su Cobla en sis lengatges, pieza de lucimiento que gustaría especialmente en una reunión de tales características. Los Proverbis , única obra que firmó con su nombre y que destinó a la educación de sus hijos, demuestra una erudición de gran importancia y ha sido citado como posible fuente de los Proverbios de Sem Tob de Carrión.
Su poesía nos ha llegado en un cancionero que, probablemente, fuera ordenado por el propio poeta y en el que se aprecia cómo el poeta culto y retórico que fue Cerverí supo aprovechar las formas populares, ni más ni menos que como había sucedido con la poesía gallego-portuguesa y, posteriormente, con la castellana. Su estilo tomará todas las dificultades de la poesía provenzal, en la que se inscribe su obra, llegando a casos (bien es verdad que los menos) de virtuosismo extremo, como en Lo vers de Tristayn, donde la rima comienza una sílaba antes de la tónica. No obstante todo ello, la variedad de registros y la constante presencia de elementos personales y emotivos pueden con esta faceta preciosista que señalamos. En total, se conocen 114 poemas bajo el nombre de este autor.
Bibliografía.
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RIQUER, Martín de Los trovadores (Barcelona: 1975).
