Bateman Cayón, Jaime (1940-1983).
Líder colombiano, fundador del Movimiento 19 de Abril (M-19), también conocido con el apodo de El Flaco. Nació en Santa Marta el 23 de abril de 1940. Hijo natural de Clementina Cayón -militante del Movimiento Revolucionario Liberal (MRL) y defensora de los presos políticos-, fue criado por su padrastro, Jorge Olarte. Realizó sus estudios en el Liceo Celedón y en el Colegio Panamericano. Siendo niño, fue atropellado por un vehículo en su tierra natal y como consecuencia del accidente Jaime estuvo a punto de perder una pierna, motivo por el cual se aficionó a la natación.
Es considerado como el precursor de un socialismo diferente en Colombia. Inició su participación revolucionaria como miembro de la Juventud Comunista (Juco), luego participó en los paros cívicos organizados contra la dictadura del General Gustavo Rojas Pinilla (1957). Viajó a Santafé de Bogotá donde fue detenido (1963) por participar en protestas y por repartir propaganda subversiva. Ocupó diversos cargos administrativos en los grupos revolucionarios colombianos como el de secretario político del Secretariado Nacional de la Juventud Comunista, secretario de Manuel Marulanda Vélez (Tirofijo), de Jacobo Arenas y de Ciro Trujillo. Preparó y organizó las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (1966-1970).
El Movimiento 19 de abril, nació a raíz de las confusas elecciones de dicho día de 1970, en las que ganó el candidato conservador Misael Pastrana Borrero, enfrentado al general Gustavo Rojas Pinilla. Como líder y fundador del M-19, Bateman trabajó con la consigna "con las armas, con el pueblo, con María Eugenia Rojas, al poder". Protagonizó el robo de cinco mil armas del Cantón Norte y la toma de la Embajada Dominicana en Santafé de Bogotá. Representó a su país como delegado de la Organización en el Decimosexto congreso del Komsomol en Moscú. El 28 de abril de 1983, murió al estrellarse la avioneta en que viajaba rumbo a Panamá. Su cadáver estuvo desaparecido por espacio de nueve meses, sin que el gobierno nacional ni el M-19 encontrara los restos de la avioneta en que viajaba. Más tarde su madre fue llamada a Panamá para que reconociera los restos de su hijo.
