Amorós Cervigón, José (1911-1997)
Matador de toros español, nacido en Salamanca el 19 de marzo de 1911, y muerto en Madrid el 15 de julio de 1997. En el planeta de los toros, es conocido por su sobrenombre hipocorístico de "Pepe Amorós".
Nacido en el seno de una familia torera (su hermano Eladio le había precedido en la toma de la alternativa), se estrenó como becerrista en las modestas plazas de su provincia; pero no vistió por vez primera un traje de luces hasta que toreó en Arcos de Jalón (Zaragoza) en 1927. Con deseos de ganarse pronto el favor de la primera afición del mundo, aquel mismo año se acercó a Madrid para lidiar en el pequeño coso de Tetuán de las Victorias.
En 1930, en el transcurso de las corridas que solemnizaban los festejos de la Semana Grande de San Sebastián (Guipúzcoa), tomó la alternativa de manos del diestro madrileño Antonio Márquez Serrano, en presencia del también madrileño Marcial Lalanda del Pino y del valenciano Vicente Barrera y Cambra. Durante esa temporada de 1930 sólo pudo lidiar siete corridas, porque una grave e inoportuna dislocación del tobillo le alejó momentáneamente del ejercicio activo del toreo.
La confirmación de este doctorado taurino tuvo lugar el día 30 de abril de 1931, en las arenas del ruedo madrileño, donde el genial espada gitano Joaquín Rodríguez Ortega ("Cagancho") le cedió los trastos con los que había de dar lidia y muerte a estoque al toro Canoso, perteneciente a la vacada de don José Manuel Puente. Fue testigo de este feliz evento el coletudo valenciano Vicente Barrera y Cambra, quien pudo contemplar cómo José Amorós Cervigón cortaba un apéndice auricular a su primer enemigo, después de haber lanceado espléndidamente con el capote, banderilleado con riesgo, eficacia y soltura, enjaretado una bonita faena de muleta y recetado una soberbia estocada. En el transcurso de esa temporada de 1931, toreó un total de veintiséis corridas.
En 1932 firmó sólo doce contratos, por lo que se vio impelido a marchar a Venezuela a finales de aquella temporada. Anduvo toreando por las arenas hermanas de varios países hispanoamericanos, y, ya de retorno a la Península Ibérica, sufrió en 1935 una tremenda cornada en el coso zaragozano (que le interesó la arteria femoral), y una no menos grave herida en la plaza bilbaína (que le afectó peligrosamente el cuello). Sin embargo, lo que no pudieron estos dañosos percances lo logró la devastadora Guerra Civil, que truncó su todavía incipiente andadura taurina.
Reapareció -junto a Marcial Lalanda del Pino, Vicente Barrera y Cambra, Domingo López Ortega ("Domingo Ortega"), Luis Gómez Calleja ("El Estudiante") y José Mejías Jiménez ("Pepe Bienvenida")- en la tristemente recordada "Corrida de la Victoria", que, verificada en las arenas venteñas el 24 de mayo de 1939, venía a solemnizar, desde el cruel desprecio de los vencedores, la recién concluida contienda cainita. Pero José Amorós no tuvo la misma fortuna que sus compañeros de cartel, y hubo de marchar a Portugal para lidiar en los ruedos lusos entre las temporadas de 1939 y 1942. Vuelto definitivamente a su país, se cortó la coleta en la plaza de toros de su ciudad natal, un 21 de septiembre de 1943.
Pero ello no supuso su abandono de la práctica activa del toreo, ya que trocó el oro de matador por la plata de los subalternos. A las órdenes de diestros tan relevantes como el sevillano Rafael Vega de los Reyes ("Gitanillo de Triana") y el mejicano Raúl Acha Sanz ("Rovira"), volvió a pisar los principales cosos españoles en calidad de banderillero. Su retirada definitiva tuvo lugar en 1952.
Posteriormente, fue nombrado Asesor Presidencial en el palco de la plaza Monumental de Las Ventas, cargo que desempeñó hasta la Feria de San Isidro de 1997, en la que, ya con ochenta y seis años de edad, ejerció su función en tres festejos.
