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PinturaBiografía

Van Eyck, Jan o Juan de Brujas (1390-1441).

Jan Van Eyck.

Pintor flamenco, conocido popularmente como Juan de Brujas, cuya primera noticia se tiene en 1390. Se cree que nació en Maaseik, ciudad próxima a Alemania, hermano de Hubert van Eyck, de los primeros años de su vida apenas se tiene noticias. Entre 1422 y 1424 se encuentra en La Haya, en la corte del conde Juan de Baviera. En 1425, al morir el conde, deja La Haya para entrar al servicio de Felipe III de Borgoña, no sólo como pintor sino como diplomático, nombrándole camarero y pintor de su corte. Empiezan así un periodo de viajes que tiene como objetivo misiones diplomáticas encargadas por el duque. En 1427 y 1428 se encontraba en Tournai, donde conoce al Maestro de la Flémalle y a Rogier Van der Weyden. En 1428 parte para Portugal enviado por el duque de Borgoña para solicitar la mano de la hija del rey Juan I. Al regreso de Portugal permanece en España durante los años de 1430 y 1431. A su regreso se estableció en Brujas donde permaneció hasta su muerte.

Su obra se inicia junto a su hermano Hubert, pero la temprana muerte de éste hace que rápidamente se haga independiente. Algunos autores le atribuyen algunas miniaturas del Libros de las Horas de Turín, ancladas en la tradición del gótico tardío de los Países Bajos. Al margen de estas miniaturas, el resto de sus obras se separan plenamente de esta tradición y en ellas se establecen los principios de la nueva pintura flamenca.

Sus características serán las escenas de interior minuciosamente descritas, con un impecable conocimiento de la perspectiva y de la luz, tratamiento de las figuras mediante el estudio de los ropajes y el retrato y unos paisajes de extremado naturalismo, cuya línea se lleva hasta el horizonte.

De su primeras obras no hay duda en atribuirle la Virgen de la Iglesia, conservada en Berlín y realizada en 1425, donde se realiza un esmerado estudio de la luz que entra por las vitrinas en un interior eclesiástico. Los estigmas de San Francisco o la Adoración del Cordero Místico de la iglesia de Saint-Bavon de Gante, obra que inició con su hermano Hubert y que continuó tras su muerte. Está compuesta por doce tablas, donde se desarrolla una compleja iconografía. Con esta obra se puede decir que se habían asentado los principios de la pintura flamenca.

Adoración del cordero místico, de Van Eyck. Políptico de San Bavón de Gante.

De su extensa producción podemos destacar obras tan importantes como Los esposos Arnolfini, de 1432, conservado en la National Gallery de Londres, La Virgen del Canciller Rolin, del Louvre, La Virgen del canónigo Van der Paele, de 1436, conservada en el Museo Municipal de Brujas, la Virgen de Luca, el Tríptico de Dresde, de 1437 y Santa Bárbara y la Virgen de la fuente del museo de Amberes.

Virgen del canciller Rolin (1436). Louvre. París.

En todas estas obras Van Eyck tiende al naturalismo y al realismo mediante la recreación de la naturaleza que le rodea. Consigue que sus figuras sean solemnes y monumentales y que en cada una de ellas se elabore un retrato definido. El espacio viene representado por el tratamiento de la luz, que da un valor atmosférico y unificador a la composición recreándose en la valoración de los objetos, el paisaje y los interiores.

Extraordinaria es su producción de retratos, de los que destaca El hombre del turbante (1443) de National Gallery de Londres. Los rostros son tratados con una gran inmediatez, siendo descriptivos más que interpretativos.

Hombre del turbante rojo. Jan Van Eyck.

Tradicionalmente, desde Vasary, se le ha considerado el inventor de la pintura al óleo. Van Eyck lo que hace es perfeccionar una técnica ya conocida con la inclusión de veladuras en sus obras.

Políptico de la Adoración del Cordero Místico.

La adoración del Cordero (Óleo sobre panel, 1432). Catedral de Saint-Bavon (Gante).

Fue considerada en su época una obra de excepcional valor, tanto por sus grandes dimensiones como por el numero de tablas en el que se representaba un único tema iconográfico. Es de aceptación común que la obra fue iniciada por Hubert Van Eyck y que al morir éste en 1426 fue continuada por su hermano Jan, que realiza la mayor parte del retablo y la termina en 1432. En la actualidad se conserva en la Capilla llamada de Joos Vyd de la catedral de San Bavon de Gante.

El retablo está formado por doce tablas, ocho de las cuales corresponden a las puertas que cierran el retablo y que están pintadas por ambas caras, con lo que el numero de escenas es de veinte. Parece que la predela se perdía en el siglo XVI y sólo hay alguna referencia a su contenido.

En el retablo cerrado, en su parte inferior se representa de derecha a izquierda a Joos Vyd, quien encarga el retablo, San Juan Bautista, San Juan Evangelista, y la esposa de Vyd. Los donantes aparecen representados con el mismo canon que los santos y son tratados como auténticos retratos.

En la parte superior, la escena central es La anunciación del arcángel Gabriel a María, con lo que se da paso al tema iconográfico de todo el retablo: la redención humana. En esta escena se encuentra resabios de la obra del maestro de la Flémalle.

El Políptico abierto muestra, en el nivel inferior y de izquierda a derecha, las escenas de La Procesión de los jueces íntegros, La Adoración del Cordero, la Procesión de los Eremitas y la procesión de los Peregrinos. En el nivel superior, la escena central representa al Pantocrator, con la Virgen a la derecha y San Juan Bautista a la izquierda, esquema compositivo dentro de la tradición bizantina. De estas tres tablas, la central es la de mayor altura. A ambos lados de las anteriores se sitúan ángeles cantores y ángeles músicos. Cerrando la composición está la representación de Adán y Eva expulsados del paraíso.

Se trata, pues, de una composición iconográfica unitaria centrada en el tema de la Redención del hombre. De su tablas, sin lugar a dudas, la más destacada es la central : La Adoración del Cordero místico, donde Van Eyck concibe un mundo nunca pintado, absolutamente realista pero ideado por él. Se disponen distintos grupos de personas, siguiendo el eje central de la composición marcado en primer plano por una fuente y en segundo por la mesa donde se sitúa el cordero místico. En medio de las figuras se recrea un paisaje naturalista, con la representación de la ciudad de Gante y Brujas al fondo.

Van Eyck consigue crear un espacio de mayor profundidad que el que era habitual en la pintura del gótico internacional, aunque no utiliza la perspectiva caballera, sino que lo consigue mediante la degradación de las zonas de luz. En esta obra todavía no llega a los logros de luz ambiental que conseguirá más adelante. Las figuras son tratadas de forma individualizada, de tal forma que cada uno de sus rostros es un retrato, cuidándose sobremanera el ropaje y la representación de todos los detalles. La inclusión del paisaje permite que la escena religiosa quede situada en un espacio real, en un ambiente verosímil y cargado de luz atmosférica. Lo sobrenatural es representado con el naturalismo de lo humano.

Los esposos Arnolfini.

Los esposos Arnolfini. Jan Van Eyck, 1434.

Se trata del retrato de un comerciante italiano, Giovanni Arnolfini, establecido en Brujas desde 1420 y su esposa. En esta obra se reúnen el genero del retrato , de la escena de ambiente y el estudio de costumbres, además de la alegoría al carácter sacramental del matrimonio y la maternidad. En ella se encuentran presentes todas las características de lo que será la pintura flamenca: el estudio detallado del ambiente mediante la acumulación de sutiles observaciones aisladas, tanto de objetos como de ropajes, y su representación mediante un detallismo minucioso que se lleva hasta el estudio del rostro. Esta acumulación minuciosa lleva a la creación de un espacio pictórico veraz, en el que la luz penetra suavemente desde las ventanas y va ligando todos los espacios, creando una sensación atmosférica que consigue, a su vez, la de profundidad mediante la degradación.

En esta obra introduce un recurso efectista, como es situar un espejo cóncavo en el centro de la habitación, en el cual aparecen reflejadas las figura y algunos detalles de la habitación que no son recogidos en la composición principal, dando una sensación de mayor profundidad y dejando definido el espacio en el que se desenvuelven las figuras: una habitación, en la que además se incorporan otros personajes no representados pero reflejados en el espejo.

En este estudio, Van Eyck manifiesta el interés por ubicar a los personajes en el mundo real en que vivían, en un espacio perfectamente reconocible y sin que por ello pierdan su posición dominante en la pintura.

Obra

Galería multimédia

Bibliografía.

  • BALLESTEROS ARRANZ, E.: Van Eyck. San Sebastián de los Reyes, 1982.

  • FAGGIN, G.T.: La obra pictórica completa de los Van Eyck. Editorial Noger, 1973.

  • LASSAIGNE, J.: El siglo de Van Eyck. La pintura Flamenca. Barcelona, 1977.

  • LEMAYNE, J.: La pintura holandesa. Barcelona, 1976.

  • MALICUA, J.: El Arte flamenco. Barcelona, 1988.

  • PERRE, H. van de: Van Eyck, el cordero místico. Madrid, 1996.

E. Alegre Carvajal.

Autor

  • Esther Alegre Carvajal.