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HistoriaPolíticaBiografía

Torrijos, José María de (1791-1831).

General español, nacido en Madrid el 20 de marzo de 1791 y muerto en Málaga el 11 de diciembre de 1831, fusilado por orden de Fernando VII.

Vida

Hijo de Cristóbal Torrijos y Petronila de Uriarte, pasó su infancia en la Corte de Carlos IV, del que su padre era Ayudante de Cámara. Paje del rey a los diez años, eligió la carrera militar, así que a los trece años -ya con el grado de capitán- ingresó en la Academia de Alcalá de Henares, donde realizó los estudios de ingeniero hasta 1808. El día dos de mayo de ese año acudió al cuartel de Voluntarios del Estado en Madrid, donde se le encargó la misión de ir a parlamentar con Gobert; en el transcurso de la misma estalló el combate, y fue detenido y luego liberado por intervención de Borely, ayudante de campo de Murat.

Acudió a la defensa de Valencia junto al que sería luego verdugo suyo, el general González Moreno; pasó después a Murcia y, en 1809, a Cataluña. En 1810, con el grado de teniente coronel, cayó prisionero de Suchet en Tortosa y fue llevado a Francia; a pesar de todo, consiguió escaparse y volver a España, donde en 1811 fue nombrado instructor en la Isla de León del Regimiento de Tiradores de Doyle.

En mayo de 1812 fue enviado a Badajoz, donde se casó al año siguiente con Luisa Carlota Sáenz de Viniegra, y tomó parte en la batalla de Vitoria, en la que sedistinguió tan notablemente que fue propuesto por Wellington para brigadier. En 1814 no quiso ir a América con Morillo, de forma que permaneció en Madrid hasta que en 1815 fue nombrado gobernador militar de Murcia, Cartagena y Alicante. En 1816 se le concedió la Gran Cruz de San Fernando, y al año siguiente era ascendido a coronel del regimiento de Lorena, 46 Infantería de línea, donde permaneció hasta 1818.

Comenzó a conspirar siguiendo a Van Halen en pro de la vuelta a la Constitución, lo cual no le ocasionó más que disgustos y persecuciones que le hicieron verse reducido a prisión el 26 de diciembre de 1817, primero en el castillo de Santa Bárbara de Alicante y en enero de 1818 en la Inquisición de Murcia, lo cual no fue óbice para que desde su encierro siguiera trabajando a favor de la revolución. La llegada de ésta trajo su liberación, el 23 de febrero de 1820, así que en cuanto triunfó la Constitución se marchó a Madrid para hacerse cargo del regimiento de Infantería de Fernando VII.

Amarillas le quiso corromper, invitándole lisa y llanamente a la contrarrevolución, a lo que él se negó. Fue miembro de la Sociedad de Amantes del Orden Constitucional (Madrid, junio de 1820) y de la de la Fontana (6 de junio de 1820), una lista del Archivo General de Palacio le atribuye el nombre masónico de "Aristogitón", y ese mismo año de 1820 fue juez de hecho de imprenta. Fue uno de los fundadores de la Comunería en enero 1821. En 1822 defendió el sistema constitucional en Navarra y Cataluña, lo que le valió el ascenso a mariscal de campo, tras lo cual fue destinado a Navarra para ponerse al mando del ejército, con el que consiguió vencer a los realistas.

Al iniciarse la era absolutista de 1823, Torrijos fue de los llamados comuneros constitucionales, partidarios de un pacto con los masones. El 28 febrero de ese año, Fernando VII le nombró ministro de la Guerra, pero no pudo tomar posesión de su cargo. Siguió al Rey a Andalucía, de allí a Aragón, y luego a Alicante y Cartagena, y aunque no quiso adherirse a la capitulación de Ballesteros, no tuvo más remedio que ceder y negociar un convenio con los franceses cuando vio que la resistencia ya era inútil el 3 noviembre 1823. Finalmente, huyendo de las persecuciones absolutistas, embarcó el día 18 para Marsella.

Primero estuvo en Alençon (Orne), pero como viera que los franceses no cumplieran las condiciones de la capitulación, en abril de 1824 marchó a Inglaterra. Se estableció en Blackheath, cerca de Londres, donde permaneció alejado de la política y en buenas relaciones con Espoz y Mina hasta 1826.

La crisis portuguesa de este año le movilizó, poniéndose al frente de la Junta directiva del alzamiento de España o Junta de Londres el 1 de febrero de 1827. Era miembro de algunas sociedades secretas, como la "Asamblea de Constitucionales Europeos" o "Los Unidos contra el trono y el clero", mantuvo proyectos iberistas, colaboró con los independentistas de la América española y estrechó sus lazos con los radicales ingleses. En julio de 1829 perdió el subsidio que la pasaba el gobierno inglés, teniendo que dedicarse a traducir a los autores hispanoamericanos para ganarse la vida; entre otros libros aparecieron entonces las Memorias del general Guillermo Millwer, al servicio de la República del Perú (Londres, 1829, y Madrid, 1910) y las Memorias de Napoleón para servir a la historia de Francia, así como las de Gourgaud y Montholon. También escribió una Relación de la Guerra de la Independencia en Cataluña.

Intentó una primera expedición el 29 de julio de 1830 desde Londres, pero lo impidió la policía inglesa. Marchó entonces a Francia, y de allí a Gibraltar con el propósito de esperar un buen momento para entrar en España y derrocar el absolutismo. Convirtió el Peñón en su centro, clandestino, de actividades, formando con Manuel Flores Calderón la Comisión ejecutiva de Gibraltar. Logró llegar a La Línea en la madrugada del 28 al 29 de enero de 1831, pero tuvo que desistir. Torrijos era ya el único emigrado que inquietaba en la Corte y, aunque contenía sus ansias de actuar el recuerdo de otras expediciones fallidas, su natural impaciente le impelía a moverse.

Fue entonces víctima de "Viriato", pseudónimo bajo el que se ocultaba su corresponsal, que no era otro que el propio gobernador de Málaga Vicente González Moreno, quien le atrajo con falsas promesas: unos sesenta hombres tomaron rumbo hacia las costas malagueñas hacia las 9 de la noche del 30 de noviembre de 1831. Tras ser atacados el 2 de diciembre por guardacostas y después en tierra, se rindieron el día 4 al propio gobernador González Moreno. El Consejo de ministros ordenó la ejecución inmediata de los expedicionarios, sin formación de causa, y fueron fusilados.

Sin embargo, la memoria de Torrijos le sobrevivió. Al rehabilitarse en España el régimen constitucional, su esposa, que recibió en 1837 el título de Condesa de Torrijos y en 1838 el de Vizcondesa de Fuengirola, escribió la Vida de su esposo, aparecida en 1860.

Bibliografía

  • El Universal observador español, nº 217 (14 de diciembre de 1820).

  • CASTELLS OLIVÁN, Irene. "Torrijos y Málaga", en Jábega (Málaga: 1982).

  • CAMBRONERO, Luis. Torrijos (Málaga: 1931).

  • LLORENS CASTILLO, Vicente. Liberales y románticos [2ª ed.] (Madrid: 1968).

  • PÁEZ RÍOS, Elena. Iconografía hispana [cinco vols.] (Madrid: 1966).

  • SÁENZ DE VINIEGRA TORRIJOS, Luisa. Vida del general D. José María de Torrijos y Uriarte [dos tomos] (Madrid: 1860).

A. Gil Novales

Autor

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