Sáenz Guerrero, Horacio (1921-1999).
Periodista español, nacido en Logroño el 21 de noviembre de 1921, y muerto en Denia (Alicante) el 30 de agosto de 1999. Fue premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 1988.
Comenzó estudios de Medicina en Barcelona, que pronto abandonó para dedicarse al periodismo, y así, en 1942 entró en el diario barcelonés La Vanguardia como meritorio sin sueldo; un año más tarde ya entró en plantilla, con su título de la Escuela de Periodismo recién estrenado. Al principio trabajó en diversas secciones del periódico; hizo crítica literaria, cinematográfica y teatral, los comentarios locales y provinciales, y los editoriales; desempeñó los cargos de redactor jefe de Nacional y subdirector adjunto hasta que, en 1961, alcanzó el puesto de subdirector. También en esta época trabajó como corresponsal en Estados Unidos y Oriente Medio. En 1952, cuando se creó la Escuela Oficial de Periodismo de Barcelona, fue secretario de la misma y, en 1969, director de La Vanguardia; durante su permanencia en el cargo -nada menos que doce años- colocó a este periódico entre los primeros de España.
También ha colaborado con diversos periódicos y revistas extranjeras, como Time Life, The New York Times y Destino; pero sus labores en el mundo periodístico alcazan también a la radio, y así, ha prestado sus servicios como comentarista de política internacional en Radio Nacional de España (RNE) y en el programa Protagonistas de la COPE.
Su trayectoria profesional le ha hecho merecedor de numerosos premios nacionales e internacionales, tales como el del Círculo Catalán de Madrid en 1978, que le fue concedido por el artículo "Cataluña, vehículo mundial de la cultura castellana", el Premio EFE al mejor informador de 1980, el Mariano de Cavia en 1986, por el artículo publicado en La Vanguardia con el título "Descubrimiento, palabra nefanda", el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, otorgado en 1988 por la fundación homónima y, ese mismo año, la Medalla de Oro de La Rioja. En 1990 se le concedió el primer premio de periodismo Amistad España-Israel Fundación Dovón 1990, por el artículo "Glosa de los latidos de un pueblo" y, al año siguiente, el premio González Ruano de Periodismo por "Una luz se ha apagado". Además, está en posesión de la Cruz de Sant Jordi, distinción que concede la Generalitat de Catalunya.