Peralta Pineda, Rafael (1933-VVVV)
Caballero rejoneador español, nacido en Puebla del Río (Sevilla) el 4 de junio de 1933. Es hermano de uno de los más grandes toreros ecuestres de todos los tiempos, el también sevillano Ángel Peralta y Pineda.
Animado por la vida campera que conoció desde siempre en su entorno familiar, y motivado por el ejemplo de su hermano mayor, Rafael Peralta se aficionó al noble Arte del Rejoneo y debutó a caballo el día 30 de mayo de 1959, nada menos que en las arenas de la exigente plaza Monumental de Las Ventas (Madrid). Hizo aquella tarde una memorable faena ecuestre a un toro perteneciente a la ganadería de don Juan Sánchez Cobaleda, en presencia de tres toreros de a pie: el madrileño Julio Aparicio Martínez, el sevillano Manuel Vázquez Garcés ("Manolo Vázquez") y el venezolano Francisco Girón Díaz ("Curro Girón").
A partir de entonces (y, en no pocas ocasiones, formando pareja con su hermano), Rafael Peralta emprendió una larga carrera taurina jalonada de grandes triunfos. Frente a la depurada sobriedad de que hacía gala Ángel, Rafael practicó un rejoneo más alegre y variado, muy efectista ante los ojos de los aficionados menos exigentes (aunque bien es verdad que también merecedor de la aprobación de los más puristas). Tanto llegó a conmover con su vistosa doma, que en algunas temporadas rebasó con creces el número de cien festejos toreados (así, v. gr., en la de 1971, año en que hizo ciento diecisiete paseíllos). Siguiendo el ejemplo fraterno, continuó en activo hasta una edad muy avanzada para el ejercicio de la lidia, llegando a cumplir treinta ajuste en la campaña de 1994.
Hombre de grandes inquietudes artísticas, Rafael Peralta sobresalió también en el cante flamenco y en el cultivo de la literatura, especialmente en el género poético. Además, en la década de los años noventa ha ido compaginando todas estas actividades artísticas con su dedicación a la información taurina, plasmada en su labor como comentarista de corridas televisadas. Pero, al margen de todo esto, el gran mérito de este caballero sevillano reside en haber conseguido entre toda la afición ser distinguido con el título de gran figura del toreo, a pesar de la enorme dificultad que -por comparación inevitables- le supuso el ser hermano de uno de los mayores genio del toreo ecuestre de todos los tiempos.
El 20 de enero de 2002 recibió la Cruz de Oro de la Orden Civil de la Solidaridad Social que concede el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.