Nefertiti (ca. 1384-1343 a.C.).
(Nfr-ti-ty o Nfr(t)-ity o Nfr-nfrw-Itn) Esposa de Amenofis IV (Akhenatón) e hija de Ay, militar y escriba real y de Tiy II, aunque ésta se intitula sólo nodriza de Nefertiti. Se ha pensado que sería hija de una primera esposa de Ay y que, tras su muerte, su hija fue educada por la nueva esposa de Ay, la citada Tiy. Su nombre, que significa "La bella ha venido", hizo pensar que se trataría de la princesa Tadu-Khepa, hija del rey de Mitanni Tushratta, enviada a Egipto ante la petición de Amenofis III, pero que finalmente habría contraído matrimonio con el hijo de éste, Amenofis IV (Akhenatón). Hoy se sabe que con la expresión "La bella ha venido" se aludía a la diosa Hathor, y que por tanto era un nombre teóforo, aplicable a la esposa real con ocasión de las Fiestas Sed. De hecho, Nefertiti fue hija de una familia egipcia de la pequeña nobleza, originaria de Akhmim, cuyo padre, el ya precitado Ay, habría escalado puestos de importancia. Se ignora por qué Amenofis IV la tomó por esposa, cuando debía haberse unido con Satamón II, la princesa heredera. En cualquier caso, el rey compartió con ella no sólo la reforma religiosa -culto a Atón-, de la que fue adicta incondicional, sino también diversos actos oficiales e, incluso, según algunos, la corregencia. Nefertiti le dio a su esposo en Tebas tres hijas: Meritatón, que casaría con Smenkhkare; Meketatón, que murió prematuramente, y Ankhesenpaatón (llamada luego Ankhesenamón), casada con Tutankhamón. Asimismo tuvo otras tres hijas que nacieron en Akhetatón (Tell el-Amarna), de las cuales sólo se conoce el nombre: Nefer-nefrure-Atón, Nefer-neferu-Re y Setep-en-Re. Nefertiti tuvo una hermana, de nombre Mut-nedjemet, que se casaría luego con Horemheb y llegaría por lo tanto a ser también reina de Egipto. A partir del año décimo cuarto del reinado de Akhenatón, la reina Nefertiti, cuyo nombre había sido complementado desde tiempo atrás con el de Neferneferuatón -acerca de este nombre y su identificación o no con Nefertiti hay encontradas teorías-, permaneció alejada de su lado, viviendo en el palacio septentrional de Tell el-Amarna, llamado Het Iten (Castillo de Atón), consciente del peligro de la reforma de Atón, según unas teorías, o bien preocupada por todo lo contrario, al ver que su esposo se habría acercado al clero de Amón. Junto a ella permanecieron Tutankhamón y su esposa, Ankhesenamón, hija de Nefertiti. Algunos piensan que fue repudiada por el rey, aunque no existen pruebas para esta afirmación. Desaparecido Akhenatón, Nefertiti pudo gobernar -según algunas teorías- con el nombre de coronamiento de Ankh(et)kheperure, y permaneció en el poder tres años (graffiti de Pauah, en la tumba de Pany) vuelta a al ortodoxia de Amón (existe un relieve que la figura tocada con una corona amoniana). Se ignora cómo murió y dónde fue enterrada. Los hermosos bustos de la reina, hallados en Tell el-Amarna y hoy conservados en los Museos de Berlín (éste de caliza policromada, de 50 cm de alto, el más famoso) y de El Cairo (de cuarcita y sólo 33 cm de altura) respectivamente, constituyen dos de las obras maestras de la escultura de todos los tiempos.
