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MúsicaBiografía

Soto Loreto, Manuel, o "Manuel Torre" (1878-1933).

Cantaor español gitano nacido en Jerez de la Frontera (Cádiz) en 1878 y fallecido en Sevilla en 1933. Analfabeto durante toda su vida, fue sin embargo un gran sabio para todo lo relacionado con el arte flamenco y es considerado una de las grandes figuras del cante jondo. Lorca dijo de él que era el hombre "con mayor cultura en la sangre" de los que conocía. Muy influido por los maestros jerezanos que le precedieron, en especial por Enrique el Mellizo, cuentan que lloró la primera vez que escuchó cantar a este último.

"Yo dije que me echaría".

Sonido original. Manuel Torre.
(Cortesía de SONIFOLK. http://www.intervia.com/sonifolk/)

Desde muy joven vivió en Sevilla, ciudad en la que desarrolló profesionalmente su arte, sobre todo en los cafés-cantantes tan numerosos en aquella época. Conoció entonces a su futura esposa, Antonia Torres Vargas la Gamba, bailaora, con quien tuvo dos hijos.

Se dice de él que fue el cantaor con más duende de la historia; de hecho, la mayor parte de la teoría sobre el duende flamenco, citada hasta la saciedad por innumerables artistas, se fundamenta en sus dichos y en su sentir. A este respecto, Manuel Torre fue un cantaor desigual, capaz de los momentos más dignos de gloria y de los más dignos de olvido. Experimentó como ningún otro esa angustia típica de los artistas y creadores a los que intermitentemente abandona la inspiración. Hasta tal punto era frecuente en Manuel Torre este fenómeno, que muchas veces no salía a actuar, con el consiguiente enfado del público que más de una vez quiso llevarlo a la cárcel. Pepe el de la Matrona cuenta que una noche en que fue a verlo en Madrid había estado "para matarlo", y que luego, cuando ya apuntaba el nuevo día, le vino el duende al maestro y cantó en privado de forma memorable.

Fue cantaor versátil; abarcó casi todos los estilos y dejó en ellos huella de su genialidad. Pero fue excepcional en la saeta, a la que dotó de un sentimiento y dramatismo poco frecuentes, que hacían llorar a no pocos de los que las escuchaban. Se atribuye a Manuel Torre el origen de la costumbre por la cual los costaleros que portan un paso en procesión mecen el mismo sin avanzar en tanto que dura el cante; según parece, porque la expectación que provocaba este artista así lo propiciaba, y la gente estaba dispuesta a escucharle durante todo el tiempo que el quisiera cantar, incluso si había que detener la procesión. A pesar de que no puede decirse que fuera Torre el creador de la saeta, sí que es cierto, según los estudiosos, que la historia de este cante se divide en dos grandes mitades: antes y después de este personaje.

Además de saetero, fue también un gran seguiriyero (véase seguiriya), y contó con la admiración de otras grandes figuras del mundo flamenco, como el citado Pepe el de la Matrona, Tía Anica la Periñaca, Juan Talega, etc. El primer volumen de sus grabaciones completas vio la luz en 1996.

Autor

  • Ana Isabel Hernández González