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DeportesBiografía

Keino, Kipchoge (1940-VVVV).

Atleta keniata nacido el 17 de enero de 1940 en la aldea de Kapchemoiymo, situada en las tierras altas de su país. Segundo corredor en la historia en ganar los 1.500 y la prueba de obstáculos, sus dos medallas de oro y dos de plata le colocan en un sitial de honor entre los grandes corredores de fondo olímpicos.

En su infancia, sus expectativas de vida no fueron de las mejores; fue el único de los cinco hijos que su madre dio a luz que llegó a la adolescencia. Sin embargo, Keino demostró su dureza desde el primer momento, y no sólo sobrevivió, sino que fue haciéndose cada vez más fuerte. Su madre murió cuando tenía cuatro años. A los 12 fue a la escuela por primera vez, y allí comenzó a correr.

En su adolescencia, Keino se enroló en la policía de Kenia. Compitió dentro del equipo de atletismo policial, y a los 18 años era ya su campeón de la milla y de las 3 millas. Siguió perfeccionándose, y compitió en los Juegos de la Commonwealth Británica, donde recorrió la milla en 4´07. Poco después llegó a los Juegos Olímpicos de 1964. En una excelente actuación en los 5.000 metros, quedó a medio segundo por detrás del medallista de bronce, el estadounidense Bill Dellinger. Sin embargo, no consiguió clasificarse para la final de los 1.500.

El 30 de agosto de 1965, Keino rompió en Londres la barrera de los cuatro minutos en la milla, con 3´54´´2, el mejor tiempo de la historia sobre suelo británico. El plusmarquista mundial de la milla era hasta ese momento el estadounidense Jim Ryun. Antes de decidir quién de los dos sería campeón en los Juegos de Ciudad de México de 1968, Keino tenía que atender primero otras pruebas olímpicas: los 5.000 y los 10.000. Mientras disputaba los 10.000, Keino repentinamente se inclinó, aquejado por unos dolores. Tropezó hacia adelante y, a continuación, hacia el costado, cayendo en el campo interior. Mientras los camilleros iban en su busca, se recuperó y salió en persecución de los demás. Aunque su caída le había descalificado, consiguió terminar la prueba. Los médicos diagnosticaron que sufría una grave infección de la vesícula biliar. Pero Keino se negó a abandonar, a pesar de las graves advertencias de los médicos, que le prohibieron correr. En los 5.000 se mantuvo al ritmo del tunecino Mohamed Gammoudi, quedando dos décimas por detrás de él y consiguiendo la medalla de plata.

Los expertos consideraron favorito a Keino en su enfrentamiento contra Ryun en los 1.500, a pesar de la dolencia de su vesícula biliar. Su razonamiento era que, al haberse entrenado en las altiplanicies de Kenia, estaba mejor preparado que el estadounidense para los más de 2.000 metros de altura de Ciudad de México. La estrategia de Keino fue muy sencilla: planificó salir a toda velocidad al comienzo y correr lo más rápido y duro que le fuera posible. En los primeros 400 metros, su compatriota keniano Ben Jipcho impuso un tremendo ritmo de 56 segundos. Keino aguantó y, cuando vio la posibilidad, tomó la delantera. A los 800 metros marcó un tiempo de 1´55´´3. A pesar de sobrevenirle unos fuertes dolores de estómago, se negó a disminuir el paso hasta estar seguro de la victoria. Cuando cruzó la línea de meta, aventajaba a Ryun por más de 20 metros. Este margen fue el más grande en la historia olímpica. Su récord de 3´34´´9 se mantuvo como tal durante cuatro ediciones de los Juegos Olímpicos.

Keino despertó el escepticismo de los especialistas cuando en 1972 anunció que correría los 3.000 obstáculos además de los 1.500. Su única experiencia en obstáculos habían sido cuatro mediocres carreras. Su estilo de salto era, por decirlo de manera elegante, malo o, como él mismo lo expresara, "salto como un caballo". Con todo, consiguió mantener un ritmo uniforme, superando a Jipcho, ganando otro oro y estableciendo un nuevo récord olímpico con 8´23´´6. Al parecer, esta prueba exigió demasiado del valiente Keino, porque en la final de los 1.500 no pudo superar al finlandés Pekka Vasala, que corrió los últimos 800 metros en 1´49´´ y derrotó al exhausto keniano.

Corredor valeroso y esforzado, definió él mismo su modo de competir: "es que no corro sólo con las piernas, corro también con el corazón".

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  • Enciclonet