A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
FilosofíaBiografía

Guarini de Verona, Guarino (1374-1460).

Filósofo y pedagogo italiano, nacido en Verona en 1374 y fallecido en Ferrara en 1460. Figura pionera del Humanismo que habría de extenderse por toda Europa Occidental durante los siglos XV y XVI, ha pasado también a la Historia con los apelativos de Guarino Veronés o Guarino Veronese. Fue padre de otro conspicuo humanista, el poeta, profesor y diplomático Battista Guarini (1435-1508).

Inclinado desde su temprana juventud a los estudios clásicos, se especializó en el conocimiento de las Letras de la Antigüedad y, con este bagaje, marchó a Constantinopla para ampliar sus saberes bajo el magisterio del sabio bizantino Manuel Crisolaras (1350-1415).

A su regreso a Italia, fue profesor de Letras clásicas en Florencia, donde adquirió un merecido prestigio intelectual que le permitió impartir clase en otras florecientes ciudades italianas del siglo XV, como Venecia -donde dejó un egregio discípulo, el pedagogo y polígrafo Vittorino da Feltre (1378-1446)- y Verona. Pero en ésta última ciudad -a la que se había transferido, en 1419, la escuela en la que enseñaba en Venecia- no se encontraba a gusto Guarino, a pesar de tratarse de su propia cuna; de ahí que decidiera marcharse a Ferrara para ponerse al servicio de la Corte de los Este, que habían conseguido transformar su ciudad en uno de los focos culturales más importantes de la Europa del momento.

Ya en Ferrara, Guarino Guarini de Verona fundó una escuela a la que pronto concurrieron alumnos de todo el continente, sin distinción de clases sociales ni diferencias económicas, ya que uno de los criterios básicos del humanista veronés era el de extender la cultura entre todos aquellos que tuviesen capacidad para su comprensión y estudio. Otro de los alumnos célebres de Guarino fue Eneas Silvio Piccolomini, quien, con el paso de los años, habría de ocupar el Trono de San Pedro el nombre de Pío II (1405-1464).

Sus ideales pedagógicos sirven para ilustrar, en gran medida, el espíritu del primer humanismo: formar literatos amables y honestos, atraídos por el bien y por la belleza, y capacitados para promover el bienestar público merced a los conocimientos que habían aprendido en las fuentes clásicas.

Impresionado por la labor pedagógica e intelectual que Guarino Guarini de Verona estaba realizando en Ferrara, el Emperador elevó su escuela al rango de estudio general, lo que equivalía a la posesión de derechos universitarios (de hecho, la posterior Universidad de Ferrara cifró sus orígenes en la escuela del Veronese). Los alumnos del ilustre humanista eran invitados a desentenderse del estudio de las artes liberales propias de la educación medieval, para aceptar a cambio una innovadora propuesta pedagógica organizada en tres grados: un curso elemental, que comprendía el aprendizaje de la recta pronunciación y escritura del latín; un curso medio, en el que se hacía hincapié en el perfecto dominio de la gramática; y curso final, centrado en la retórica, disciplina que podía mostrar, mejor que cualquier otro, la asimilación y el aprovechamiento, por parte del alumno, de los contenidos cifrados en los dos grados anteriores.

Otra de las innovaciones plenamente humanísticas de Guarino Veronés fue la de complementar esta formación, puramente literaria, con una serie de ejercicios y actividades físicas (danza, caza, gimnasia, natación, etc.) tendentes a la mejora de la salud y el aspecto corporal del alumnado. De sus amplios conocimientos sobre la Antigüedad clásica, el audaz pedagogo rescató el espíritu vertido en la máxima latina de mens sana in corpore sano, y situó, entre las prioridades de su programa de estudios, el contacto directo de los alumnos con la Naturaleza.

Guarino Guarini de Verona fue también autor de varias obras en las que recopiló buena parte de sus saberes. Además de un interesantísimo Epistolario, una gramática griega y otra latina, dejó algunos tratados como la Chrisolorina y los Pequeños comentarios, y numerosas traducciones de obras clásicas de autores griegos y romanos, entre los que figuran Plutarco (ca. 50-ca. 125) y Luciano de Samósata (ca. 120-180).

JRF

Autor

  • J. R. Fernández de Cano.