Gattinara, Mercurio Arborio, Marqués de (1465-1530).
Político, jurista y cardenal italiano nacido en el castillo de Gattinara (Vercelli, Piamonte) el 10 de junio de 1465 y muerto en Innsbruck (Austria) el 5 de junio de 1530.
Síntesis biográfica
Tras ejercer durante algún tiempo como abogado en Turín y servir a Margarita de Austria, fue uno de los principales consejeros del emperador Carlos V, de quien fue gran canciller desde 1518 hasta su muerte. A él se debe el proyecto de “monarquía universal” que durante un tiempo fue directriz de la política imperial, y también los intentos de aislar a Francia.
Estudios y primeros servicios a los Habsburgo
Era uno de los siete hijos de Paolo y Felicita Ranzo, y recibió el nombre de Mercurino en recuerdo de su abuelo materno, Mercurino Ranzo, que había sido regente de la cancillería del duque de Saboya y había muerto el mismo año que él nació. En 1479 murió su padre, cuándo sólo tenía 14 años de edad, ocupándose su joven madre de su educación y de la de sus hermanos. Poco después contrajo matrimonio secreto con una pariente de su madre que vivía en su misma casa, Andreetta Avogadro, de quince años. Ello no gustó a su familia, y en 1480 fue enviado a vivir con un primo de su padre, el notario Pietro Arborio de Gattinara, y en 1482 con su tío materno Bartolomeo Ranzo, al que ayudó en su labor como prefecto de Cassine (Monferrato). Algunos años después, en 1489, contra el parecer de su familia comenzó a estudiar Leyes en la Universidad de Turín. Por entonces confirmó públicamente su matrimonio con Andreetta; fue precisamente la dote de su mujer la que le permitió pagar sus estudios y trasladarse a vivir a Turín junto a su tío paterno, el juez Giovanni Arborio. Se graduó en 1493.
A partir del año siguiente comenzó a trabajar como abogado, dando muestras de gran preparación. En 1501 pasó a trabajar como consejero de Margarita de Austria, hija del emperador Maximiliano I y mujer del duque de Saboya Filiberto II. Se mantuvo a su servicio cuando en 1504 Margarita enviudó por segunda vez; fue así como se aproximó al futuro emperador Carlos V, pues desde 1506 Margarita se hizo cargo de su educación. Algo después, en 1508, mientras que Margarita era nombrada gobernadora de Borgoña (en 1507 ya se había hecho cargo de los Países Bajos), él pasaba a ocupar la presidencia del parlamento de Dole, la capital del condado; también tuvo un importante papel diplomático en las negociaciones para la formación de la Liga de Cambrai. Asistió este año a la jura de Fernando de Aragón como regente de Castilla en representación de su hija Juana y su nieto Carlos.
En 1509 fue nombrado embajador imperial en la corte de Luis XII de Francia con el objeto de lograr la mediación del monarca francés entre Maximiliano I y Fernando de Aragón en sus negociaciones sobre la atribución del trono castellano al príncipe Carlos de Habsburgo (nieto de ambos). Gattinara tuvo éxito en su misión, el acuerdo se firmó en octubre en Blois y se ratificó en Castilla en septiembre del año siguiente en su presencia. En 1511 fijó su residencia en el castillo de Chevigni, pero su severidad como presidente del parlamento le granjeó enemistades; así, en 1516 se retiró temporalmente a la cartuja de Bruselas, donde escribió una pequeña obra titulada Monarquía universal, influida por Erasmo de Rótterdam, y dirigida al príncipe Carlos; en ella le exponía sus ideas sobre cuál debía ser su política europea: obtener la supremacía sometiendo a los demás reyes cristianos y así asegurar una paz duradera. En 1513 el emperador Maximiliano le había recompensando sus servicios con la concesión del título de conde y la posesión de varios castillos piamonteses (Arborio, Ghislarengo, Lenga, Greggio, Ricetto e San Colombano).
Gattinara, Gran Canciller de Carlos V
En 1518, Carlos, ya rey de España, le trajo de Flandes y le nombró gran canciller de todos sus reinos en sustitución del fallecido Jean Sauvage, convirtiéndose en uno de sus principales colaboradores. En 1519 trabajó para que su señor fuese elegido emperador, lo que logró (a falta de ser coronado como tal en Italia) mediante el desembolso de una gran suma de dinero. También dirigió los esfuerzos de Carlos por aislar a Francia, que en 1521 invadió Navarra y Calais (a los ingleses); así, negoció con Enrique VIII de Inglaterra y el papa Adriano VI, viajando incluso a Inglaterra con el emperador con ocasión del tratado de Windsor con el monarca inglés. Respecto al creciente problema protestante, propuso en la Dieta de Worms un acercamiento a los rebeldes invitando a Martín Lutero a exponer su doctrina. En 1522 presidió la comisión encargada de estudiar el enfrentamiento entre Hernán Cortés y Diego Velázquez de Cuéllar en las Indias, fallando a favor de Cortés. El 4 de abril de este año el duque milanés Francisco II María Sforza le otorgó el condado de Valenza y Sartinara.
Tras la batalla de Pavía de 1525, en la que el rey francés Francisco I fue hecho prisionero por los imperiales y encerrado en Madrid, se mostró partidario de una alianza con los estados italianos para hacer frente común contra los franceses, pero en 1526 se sobrepuso a su opinión la de Carlos de Lannoy, que prefería liberar al rey francés Francisco I y aliarse con él. El tiempo dio la razón a Gattinara, pues Francisco I recusó el Tratado de Madrid tan pronto se vio libre e inmediatamente inició una nueva guerra, formando la Liga de Cognac contra Carlos V. Para borrar los desastrosos efectos del Saco de Roma de mayo de 1527 ejerció una intensa labor diplomática, atrayéndose al bando imperial al marino genovés Andrea Doria, al dux veneciano Andrés Gritti y al duque milanés Francisco II; participó en la paz de Barcelona (junio de 1529) con el papa Clemente VII y en la paz de Cambrai (agosto de 1529) con Francia.
Poco después, habiendo viajado con el emperador a Bolonia para ser por fin coronado aprovechando la generalización de la paz, Gattinara fue nombrado cardenal de San Giovanni a Porta Latina por Clemente VII, sin necesidad de recibir órdenes sagradas ni ejercer ningún ministerio eclesiástico. También en Bolonia convenció a Carlos V para que cediese la isla de Malta a la Orden de San Juan (o del Hospital), expulsada de Rodas y Trípoli (Siria) por los turcos. Estaba en el momento álgido de su carrera y había visto cómo culminaba su política imperial con la coronación de Carlos V, pero precisamente por esta época éste dejó definitivamente de lado la “monarquía universal” de Gattinara para adoptar la de universitas christiana del ya fallecido obispo de Badajoz, Pedro Ruiz de Mota: una cristiandad unida voluntariamente sin necesidad de que ningún rey fuera despojado de su corona. El año siguiente falleció en Innsbruck mientras acompañaba al emperador en su viaje para presidir la dieta de Augsburgo. Tenía casi 65 años de edad. Sus restos, según su propio testamento, fueron enterrados en la iglesia parroquial de San Pedro en su pueblo natal, donde aún permanecen. Gattinara fue retratado por el pintor Tiziano Vecelli poco antes de morir.
Bibliografía
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Enlaces en Internet
http://www.smominfo.org/pdf/pub/La_visione_europea.pdf ; Página con amplia información biográfica sobre el canciller Gattinara y también sobre su idea imperial (en italiano).
