Fitz-James Stuart, Cayetana. Duquesa de Alba (1926-2014)
Duquesa de Alba
Aristócrata española nacida en el madrileño palacio de Liria el 28 de marzo de 1926 y fallecida en Sevilla el 20 de noviembre de 2014, que, a la muerte de su padre en 1953, se convirtió en la decimoctava duquesa de la Casa de Alba, uno de los mayores y más ricos linajes nobiliarios que durante varios siglos jugó un papel relevante en la historia de España.
Hija única del duque de Alba y de Berwick, Jacobo Fitz-James Stuart y Falcó, y de la marquesa de San Vicente del Barco, María del Rosario de Silva y Gurtabay, el 17 de abril de 1926 fue bautizada en la capilla del Palacio Real de Madrid y apadrinada por los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battenberg.
Muy unida a su progenitor desde el repentino fallecimiento de su madre, cuando Cayetana apenas había cumplido los seis años, pasó en el extranjero parte de su infancia y adolescencia y recibió una esmerada educación en colegios de París y Londres. Tras la proclamación de la República española en 1931, la familia tomó el camino del exilio y se instaló en la capital francesa. Padre e hija regresaron a España y se establecieron en Sevilla durante la Guerra Civil pero, al finalizar la contienda, Jacobo Fitz-James Stuart fue nombrado embajador de España en Londres y nuevamente abandonaron el país para instalarse en la capital británica.
Siguiendo la tradición aristocrática, Cayetana fue presentada en sociedad al cumplir los diecisiete años en el sevillano Palacio de las Dueñas y, en aquel acto público, su padre le cedió el ducado de Montoro. El 12 de octubre de 1947 contrajo matrimonio, también en la capital hispalense, con Luis Martínez de Irujo y Artacoz, hijo de los Duques de Sotomayor. A la muerte de su padre en 1953 se convirtió en la decimoctava duquesa de Alba y heredó, además, varias decenas de títulos nobiliarios por vía de sus progenitores.
Enviudó en 1972 y el 16 de marzo de 1978 volvió a casarse con el escritor y teólogo español Jesús Aguirre que, por aquellos años, ocupaba la dirección general de Música y que, hasta su muerte en mayo de 2001, se convirtió en gestor e historiador del patrimonio artístico de la Casa de Alba.
Grande de España por vía de varios linajes distintos, Cayetana de Alba posee casi medio centenar de títulos nobiliarios: duquesa de Alba, Berwick, Liria y Jérica, Híjar y Arjona; condesa-duquesa de Olivares; marquesa de El Carpio, Coria, Eliche, la Mota, San Leonardo, Sarria, Villanueva del Río, Tarazona, Villanueva del Fresno, Barcarrota, la Algaba, Osera, Moya, Almenara, Valdunquillo, Mirallo, Orani y Castañeda; condesa de Lemos y Lerín; condestable de Navarra, Monterrey, Osorno, Miranda del Castañar, Palma del Río, Aranda, Andrade, Ayala, Fuentes de Valdepero, Gelves, Villalba, San Estaban de Gormaz, Fuentidueña, Casarrubios del Monte, Galve, Santa Cruz de la Sierra y Ribadeo y vizcondesa de la Calzada.
Madre de seis hijos, nacidos de su primer matrimonio, la duquesa de Alba les ha cedido otros tantos títulos nobiliarios. Carlos es duque de Huéscar; Alfonso, duque de Aliaga; Jacobo, conde de Siruela; Fernando, marqués de San Vicente del Barco; Cayetano, conde de Salvatierra y Eugenia, duquesa de Montoro.
En diciembre de 1992 fue elegida por unanimidad miembro del Consejo de la Diputación Permanente de la Grandeza de España, asociación nobiliaria española que reúne a las casi cuatrocientas casas aristocráticas que poseen esta distinción.
Además del linaje nobiliario, la duquesa de Alba, ostenta un buen número de títulos honoríficos: fue miembro de mérito de la Real Academia Hispanoamericana de Artes, Ciencias y Letras de Cádiz y de la Hispanic Society of America de Nueva York; fue presidenta de honor de la Opera Filarmónica, alcaldesa honoraria de Liria (Madrid) y tuvo en su haber la Medalla de Oro de Madrid, la Gran Cruz de Beneficencia, la Gran Cruz de Isabel la Católica y la Gran Placa de Honor y Mérito de la Cruz Roja Española, institución de la que también fue presidenta honorífica.
Aficionada a la pintura, la música, especialmente el flamenco, y los caballos, Cayetana Fitz-James Stuart residia habitualmente en el palacio de Liria en Madrid, aunque pasaba largas temporadas en el sevillano palacio de las Dueñas. La duquesa mantuvo con la capital hispalense una vinculación especial desde su adolescencia y en 1968 recibió el título de 'hija adoptiva' de la ciudad. Dieciocho años después, el 28 de febrero de 2006, fue nombrada "hija predilecta" de Andalucía, un galardón que provocó sonoras protestas entre el colectivo de jornaleros. El patrimonio de la familia, rico en obras pictóricas, joyas y monumentos históricos se gestiona a través de la Fundación Casa de Alba.
El 5 de octubre de 2011, la Duquesa de Alba contrajo matrimonio con Alfonso Díez Carabantes, Duque consorte de Alba de Tormes, en el Palacio de Dueñas, en Sevilla, en una ceremonia a la que solo acudieron las personas mas allegadas de la pareja, pero con una enorme repercusión mediática. Unos meses antes de la boda, el 4 de julio, la Duquesa repartió su herencia personal entre sus seis hijos, ahora, titulares registrales de sus bienes. Carlos, como primogénito y futuro Duque de Alba, recibió además el legado artístico de la Fundación Casa de Alba y los palacios de Liria, Monterrey y Dueñas. A pesar del reparto, Cayetana sigue siendo gerente y administradora en usufructo del patrimonio de los Alba. Una semana después de su boda con Alfonso, se publicó el libro de memorias, Yo, Cayetana.
