Delgado, José Matías (1767-1832)
Religioso y jurista salvadoreño nacido el 24 de febrero de 1767 en San Salvador y muerto el 12 de noviembre de 1832 en la misma ciudad. Partidario del constitucionalismo español y luego de la independencia centroamericana contra la ocupación mexicana, presidió el Congreso independentista de 1823 y provocó luego un cisma por su pretensión de erigir diócesis en el Salvador. En 1832 fue diputado de la Asamblea Constituyente que creó las Provincias Unidas de Centroamérica. Delgado es reconocido en El Salvador como uno de los padres de la patria.
Nació en San Salvador el 24 de febrero de 1767 y fue hijo del panameño Pedro José Delgado, antiguo alcalde y alférez real. José Matías estudió la carrera eclesiástica en el seminario de Guatemala, donde se graduó en 1794, y luego Derecho en la universidad de la misma ciudad. Intentó opositar a cátedras, pero no tuvo éxito, así que se dedicó por completo a su apostolado. En 1797 fue nombrado vicario de San Salvador, cargo que ejerció ejemplarmente durante varios años.
Se considera que Delgado fue una figura central en el levantamiento contra España ocurrido el 5 de noviembre de 1811 (Barón Castro no está conforme con ello), en el que desde luego intervinieron sus hermanos. Buscó luego posturas conciliatorias con las autoridades españolas para evitar la secesión y acogió con entusiasmo la promulgación de las Cortes de Cádiz al profesar públicamente su adhesión a la Constitución de 1812, cuando fue elegido para presidir la diputación provincial. No fue a España, pero tampoco intervino en el movimiento insurrecto de El Salvador de 1814. Tras el restablecimiento del régimen constitucional español, a raíz de la revolución de Riego, fue elegido nuevamente para la Diputación (1820).
Delgado sufrió entonces un gran cambio político y empezó a manifestarse partidario de la independencia centroamericana. Participó en la reunión del 15 de septiembre de 1821, que decidió independizar Centroamérica de España, y formó parte de su nueva Junta de Gobierno. Fue uno de los que firmaron la declaración de independencia, tras lo cual fue nombrado intendente de San Salvador, donde tuvo que ir para obligar a renunciar a las autoridades españolas.
Se opuso luego a la propuesta de Gaínza de incorporar Centroamérica a México y se sublevó junto a Manuel José de Arce. Más tarde se enfrentó a Iturbide, cuando este envió a Filisola (1822) para obligar a los centroamericanos a formar parte del Imperio mexicano. Tras la caída de Agustín de Iturbide, Delgado tuvo la enorme satisfacción de presidir el Congreso que proclamó la independencia de Centroamérica el 1 de julio de 1823. Al año siguiente se dio la Constitución de las Provincias Unidas de Centroamérica, una república federal que aglutinaba los cinco estados de la América Central.
Durante el gobierno federal, Delgado se empeñó en lograr que San Salvador fuera declarado obispado para librarlo de la dependencia del arzobispo Cassaus de Guatemala. El gobierno creó dicha diócesis en 1824 y se la otorgó a Delgado, pero sobrevino un cisma por la oposición de Cassaus, que tuvo que resolver el papa León XII en 1826, desaprobando la nueva creación y restableciendo la situación anterior. El problema continuó sin embargo, pues al producirse la guerra civil de 1828, Delgado encabezó la revuelta salvadoreña contra el gobierno federal. Cassaus fue expulsado a Cuba y el nuevo mitrado nombró a Delgado vicario general del Salvador, lo que rechazó Cassaus desde el exilio. Posteriormente se dedicó a su trabajo apostólico, pero su enorme prestigio hizo que en 1832 fuera elegido diputado de la Asamblea Constituyente del estado federal centroamericano. Falleció el 12 de noviembre en la ciudad de San Salvador.
Bibliografía
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BARÓN CASTRO, Rodolfo. José Matías Delgado y el movimiento insurgente de 1811. (San Salvador: 1962).