Casarotto, Renato (1948-1986).
Escalador italiano, nacido en Vicenza, al N del país, en 1948 y fallecido el 6 de julio de 1986 en el glaciar de Filippi, en el monte K2 (8.611 m, Pakistán), que está considerado uno de los miembros principales de la "generación de los fuertes" del alpinismo italiano. Entre los numerosos retos que llevó a cabo destaca la apertura, en solitario, del filo NE de la gran pared del Pilar del Fitz Roy (3.375 m, Argentina) en 1979.
Renato Casarotto realizó algunas de las escaladas más notables de la historia del alpinismo en la región de la Patagonia. En la década de los sesenta, también abrió e inauguró diversas rutas por los Dolomitas, un ramal montañoso perteneciente al sector oriental de la cordillera de los Alpes (Alpes Tiroleses) y con una altitud máxima de 3.342 m sobre el nivel del mar en el monte Marmolada.
Alcanzó la cima del Cho-Oyu (8.201 m) y acompañó, en la que supuso su primera visita al K2, al mismísimo Reinhold Messner, que ascendió entre 1970 y 1986 a la cima de los catorce “ochomiles” -montañas de más de 8.000 m de altura- existentes en la Tierra.
Entre sus mejores armas se encontraban el tesón y la paciencia, sin embargo, Messner no dudó en calificarle como "el eslabón más débil de la cadena". Muchos de sus compañeros de cordada le recuerdan como un hombre metódico y tranquilo, como un héroe silencioso.
Holló en solitario el McKinley, el techo de América del Norte con sus 6.194 m de altitud, y pasó más de dos semanas solo para lograr abrir una ruta en la pared N del volcán Nevado Huascarán, el punto más alto de los Andes peruanos, con 6.768 m de altura.
Entre el 1 y el 15 de febrero de 1982 realizó el Tríptico del Frenêy: escaló en solitario la Ratti-Vitalli, descendió por la vertiente norte de la Aiguille Noire, escaló la Gervasutti-Boccalatte, continuó hasta la base del Pilar Central y remontó por la Bonington hasta alcanzar la arista cimera y, por ella, logró llegar hasta la cumbre del Mont Blanc.
Tras los Alpes y los Andes viajó a la cordillera del Karakorum, concretamente al Broad Peak.
Después del fracaso de su primer intento, volvió al K2, la "montaña de las montañas", en 1986 e intentó de nuevo alcanzar su cima por la difícil Magic Line. Pero, cuando se encontraba a tan sólo 300 m de su cumbre, se dio la vuelta y falleció al caer en una grieta del glaciar Filippi, con más de 40 m de profundidad.
Casarotto dejó escritas algunas de sus impresiones mientras se enfrentaba a este su último gran reto: "Me he vestido como un astronauta: polainas, dos pares de pantalones, rompevientos de 'goretex', chaleco de montaña, saco de duvet, dos gorros, guantes sin dedos, botas de escalar normales. En todo el día he logrado subir solamente 60 metros. Nieve que entraba bajo las ropas, viento espantoso: en verdad, alucinante".
Sus restos fueron hallados por dos expediciones entre los años 2002 y 2004, una kazaja y otra española, y fueron enterrados en el Memorial Gilkey.