A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
PolíticaBiografía

Boves, José Tomás (1783-1814).

Militar español nacido en Oviedo el 18 de septiembre de 1782 y muerto el 5 de diciembre de 1814 en Venezuela, en el transcurso de la batalla de Urica. Jefe realista, uno de los más importantes que lucharon contra los patriotas americanos en las guerras de Independencia, logró atraerse a los llaneros venezolanos y creó un ejército indisciplinado de negros, mulatos y castas, llamado por los republicanos “La legión del Infierno”, con el que ayudó a terminar con la Segunda República de Venezuela (1813-1814) y obligó a retirarse al propio Bolívar. Murió en combate en Urica.

Fue hijo de Manuel Rodríguez de Bobes y de Manuela de la Iglesia. El nombre de José Tomás Boves, sin el "Rodríguez" y con uve, fue el que adoptó en Venezuela. Quedó huérfano de padre a los cuatro años y fue su madre quien le sacó adelante, junto a sus dos hermanas, como sirvienta de familias acomodadas. En enero de 1794 ingresó en el Real Instituto Asturiano. Estudio Náutica durante cuatro años; se graduó de piloto de segunda clase de la Marina Mercante. Después, a partir de 1798, navegó por el Mediterráneo y en uno de los buques-correo de Ultramar. Hacia 1803 obtuvo el título de Piloto Primero. Como tal entró a servir en un buque de la compañía Plá y Portal, que tenía en Venezuela los corresponsales Lorenzo y Joaquín García Jove, también asturianos. Boves debió de realizar contrabando, pues fue apresado por tal delito y encerrado en el castillo de Puerto Cabello. Gracias a los García Jove, que intercedieron por él, se le conmutó la pena por la de confinamiento en la villa de Calabozo, una población del Llano. Allí se dedicó al comercio de mercería y, después de cumplida la condena, al negocio de ganado. Recorrió entonces los lugares más apartados de los llanos, adquiriendo un enorme conocimiento y destreza del medio y de sus gentes. Hacia 1808-10 pretendió casarse con Isabel, hija del acaudalado comerciante vasco Guillermo Zarrasqueta, que vivía en San Sebastián de los Reyes, pero no lo logró por su humilde condición.

Al surgir el movimiento independentista de 1810, seguía en Calabozo y se puso de parte de los patriotas americanos. Durante la primera Republica de Venezuela, Boves continuó con su negocio de comercio, hasta que surgió la reacción española de Domingo Monteverde. Los patriotas le consideraron entonces sospechoso y lo arrestaron en San Carlos. Durante su encarcelamiento recibió malos tratos, que le originaron un odio profundo hacia ellos. Una vez en libertad, volvió a Calabozo y abrazó la causa realista. Cuando Antoñanzas, uno de los oficiales de Monteverde, tomó Calabozo a mediados de mayo de 1812, halló a Boves en la cárcel y le puso el libertad. Desde entonces militó como soldado en las filas realistas. Fue oficial de Urbanos e inició sus acciones al frente de una partida que apresó a los patriotas Navarte y Alzuru. Se integró luego en el ejército de Monteverde como uno de los oficiales de Antoñanzas. En 1813 fue nombrado Comandante General de Calabozo. Hizo un enorme escarmiento en la población de Espino, situada al sureste de Calabozo, que se había alzado por la causa republicana. La ejecución de muchos prisioneros empezó a tejer su fama de cruel y fue un detonante de la guerra a muerte entre españoles y americanos.

A mediados de 1813 participó en la campaña del Oriente de Venezuela, bajo las órdenes de Monteverde y del mariscal de campo Juan Manuel Cajigal. Al tenerse que retirar este último a Barcelona, presionado por Mariño, otorgó a Boves facultades para que obrara discrecionalmente (agosto de 1813). Boves empezó ya a actuar de forma autónoma, despreciando a las mismas autoridades españolas por su incapacidad para dominar a los republicanos. Su enorme conocimiento del llano y de sus gentes le dio un gran ascendiente sobre sus hombres, con los que compartía el odio hacia las clases acomodadas venezolanas, que los despreciaban. De aquí que ejecutara inmisericordemente a los blancos mantuanos. Sus llaneros de a caballo fueron temidos, sobre todo los pardos, mestizos y negros. Comía y dormía con ellos y fueron sus incondicionales, como dijo su segundo, Francisco Tomás Morales: “comía con ellos, dormía entre ellos, y ellos eran toda su diversión y entretenimiento, sabiendo que sólo así podía tenerlos a su devoción y contar con sus brazos para los combates...

Una de sus primeras acciones como jefe autónomo fue Cachipo (11 de septiembre de 1813) contra el comandante Freitas y los Monagas. Marchó luego a Calabozo, que había sido liberado por Simón Bolívar. Lo reconquistó para los españoles tras vencer a Carlos Padrón y ejecutar a los prisioneros. El general Vicente Campo Elías le derrotó, pero Boves se refugió en Guayabal, donde rehízo su fuerza y volvió al combate, venciendo en San Marcos al coronel republicano Pedro Aldao, a quien le cortó la cabeza. La envió a San Fernando de Apure. A mediados de diciembre estaba en San Juan de los Morros con 6.000 hombres, en su mayoría de a caballo. Ante la amenaza que suponía para Aragua, Bolívar envió contra él a Campo Elías, pero esta vez fue vencido por el asturiano en la batalla de La Puerta (3 de febrero de 1814). A finales de febrero de 1814 Boves y Morales atacaron a Bolívar, que se había atrincherado en San Mateo. El primero tuvo que desistir del ataque al saber que se acercaban las tropas del general Mariño, quien finalmente le venció en la batalla de Bocachica. Perseguido por las tropas de Bolívar, se dirigió a Valencia, que sitiaba Cajigal. Los españoles tuvieron que levantar el cerco y Boves regresó al llano, donde reorganizó sus fuerzas y volvió a la ofensiva. El 15 de junio de 1814 derrotó en La Puerta a las fuerzas de los ejércitos unidos de Bolívar y Mariño, que tuvieron que replegarse muy maltrechos. Una parte de las tropas de Boves marchó contra Caracas, mientras que el resto, dirigido por él mismo, se dirigió a Valencia para sitiarla. Caracas cayó en manos españolas el 7 de julio y Valencia el 10 del mismo mes. Boves fusiló a los patriotas y se autonombró Comandante General del ejército realista, desconociendo que tal título le correspondía a Cajigal por ser Capitán General de Venezuela.

Boves actuó en Caracas con toda arbitrariedad. Nombró gobernador político al Marqués de Casa León y gobernador militar al coronel Juan Nepomuceno Quero. Luego emprendió la campaña del Oriente, región en la cual se habían refugiado los últimos efectivos patriotas. Tomó Cumaná, la saqueó y la dejó reducida a ruinas. Luego derrotó en el sitio de los Magüeyes (el 9 de noviembre de 1814) al coronel patriota José Francisco Bermúdez y nuevamente en la batalla de Urica (5 de diciembre de 1814). No pudo saborear esta última victoria, pues murió durante el combate a causa de un lanzazo. Boves fue enterrado en la iglesia de Urica. Le sucedió Morales, pero la época de los llaneros había llegado a su fin. Pronto llegarían tropas regulares españolas mandadas por el general Juan Pablo Morillo.

La figura de Boves es muy controvertida; se le atribuyen atrocidades con los prisioneros y cualidades excepcionales de estrategia militar. Desde luego fue, con Bolívar, uno de los artífices de la “guerra a muerte”. Tenía una capacidad increíble de recuperarse en los llanos, donde reclutaba fácilmente hombres. Bolívar aprendió de Boves la táctica de grandes masas de caballería envolvente y de gran movilidad.

Bibliografía

  • ARMAS CHITTY, José Antonio de: Boves a través de sus biógrafos, Caracas: América Libre, 1976.

  • BERMÚDEZ DE CASTRO, Luis: Boves o el león de los Llanos, Madrid: Espasa-Calpe, 1934.

  • CARRERA DAMAS, Germán: Boves. Aspectos socioeconómicos de la guerra de Independencia, Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1972.

  • PÉREZ TENREIRO, Tomás: José Tomas Boves, primera lanza del Rey, Caracas: Ministerio de Defensa, 1969.

  • VALDIVIESO MONTAÑO, Acisclo: José Tomas Boves, caudillo hispano, Caracas: Editorial González González, 1955.

MLS

Autor

  • 0011 MLS