Black, Joseph (1728-1779).
Químico inglés, nació en Burdeos en 1728 y murió en Edimburgo en 1779.
Hijo de un comerciante de vinos medio escocés y medio irlandés, realizó sus primeros estudios en Belfast, decantándose por la medicina en las universidades de Glasgow y Edimburgo. Su tesis doctoral, que apareció resumida en 1756, era un modelo de lógica y experimentación química en la que demostraba la existencia de un cierto aire fijado responsable del ciclo de transformaciones de la piedra caliza en cal viva y cal apagada, demostrando que el aire fijado (el actual dióxido de carbono) se producía en la repiración animal, en la fermentación y en la combustión del carbón vegetal. Las transformaciones que describió,
piedra caliza + calor ® cal viva + aire fijado
cal viva + agua ® cal apagada
cal apagada + aire fijado ® piedra caliza + agua.
en la formulación actual, estas transformaciones se describen como
CaCO3 + calor ® CaO + CO2
CaO + H2O ® Ca (OH)2
Ca(OH)2 + CO2 ® CaCO3 + H2O.
Este trabajo le permitió entrar como profesor de medicina en Glasgow en sustitución de Cullen, del que fue discípulo. En 1766 entró como profesor de química a trabajar en la Universidad de Edimburgo. Fue nombrado miembro de la Academia de Ciencias de París, donde Fourneroy le llamó el Néstor de la revolución química. Mientras estudiaba los álcalis se percató de que algunas sustancias alcalinas se hacen más cáusticas cuando pierden aire fijo, es decir, son dos veces alcalinas (bicarbonatos), y demostró el carácter ácido del gas carbónico. Su estudio de los gases fue la base sobre la que construyeron Priestley, Lavoisier y Cavendish la teoría de los gases.
En sus últimos años, su interés viró hacia las ciencias físicas, en particular sobre el calor, descubriendo la diferencia entre éste y la temperatura, pues demostró que masas iguales de diferentes sustancias, al recibir una cantidad de calor, no aumentan del mismo modo su temperatura, elaborando el concepto de calor específico. Estudió además la fusión del hielo, percatándose de que al añadir calor no se incrementa su temperatura mientras se funde, introduciendo el concepto de calor latente.
Sus obras manuscritas fueron recopiladas por Robinson en 1803 y publicadas bajo el nombre de Lectures on the elements of Chemistry.