Witt, Cornelis de (1623-1672).
Político holandés nacido en Dordrecht en 1623 y fallecido en La Haya el 20 de agosto de 1672.
Hijo de Jakob de Witt, burgomaestre de Dordrecht durante los inicios del siglo XVII, fue, junto a su hermano menor Jan de Witt (1625-1672), el más fervoroso defensor de la supremacía del parlamento neerlandés (Estados generales) sobre el poder del linaje regio dirigente, la familia Orange, a quienes intentó impedir el acceso al rango de estatúder, máximo mandatario de la República holandesa. En 1648 Cornelis ya fue elegido por sus conciudadanos concejal de Dordrecht, ciudad de la que llegó a ser burgomaestre en 1667, apoyado por su hermano Jan, que contaba con una extrema popularidad entre los políticos holandeses.
Desde el máximo puesto municipal, Cornelis se convirtió, recíprocamente, en el principal apoyo de su hermano para sanear la fiscalidad, fomentar la industria y el comercio, y se mostró totalmente contrario a la participación de la República en los numerosos conflictos bélicos de la época. No obstante, en las guerras contra Inglaterra (1652-54 y 1665-67), Cornelis, quien también era un experto navegante, participó en los enfrentamientos marítimos con el grado de capitán de las fuerzas navales holandesas. Después de ser elegido burgomaestre, su enfrentamiento contra los Orange le llevó a firmar pactos con Francia, secular enemigo holandés, acuerdos que, con una hábil maniobra, la maquinaria de la propaganda orangista manejó hasta convertir a los dos hermanos de Witt en traidores a los ojos populares, precisamente el estamento que les había otorgado su máximo apoyo siempre.
Al aprovechar la invasión francesa de 1672, en abril del citado año Cornelis de Witt fue encarcelado en La Haya por orden del estatúder Guillermo III de Orange, acusado de conspiración contra la República. Su hermano Jan fue a visitarle en la cárcel el 20 de agosto de 1672, fecha funesta para ambos puesto que la multitud popular, incitada hábilmente por los Orange y con la aquiescencia de las autoridades, irrumpieron en la prisión y asesinaron a golpes a los dos hermanos de Witt, lo que puso fin a casi un siglo de luchas entre la familia de Dordrecht y los Orange.
