Vilalta, Maruxa (1932-VVVV).
Dramaturga, narradora, periodista y directora teatral mexicana de origen español, nacida en Barcelona el 23 de septiembre de 1932. Autora de una brillante producción teatral que ahonda en la historia reciente mexicana para extraer abundantes elementos de análisis y reflexión acerca del poder político y las estructuras que lo conforman, está considerada como una de las voces más destacadas del teatro hispanoamericano de la segunda mitad del siglo XX.
A los siete años de edad, recién concluida la Guerra Civil (1939), se trasladó con su familia a México, país en el que acabaría adoptando una nueva nacionalidad. Alentada desde su temprana juventud por una acusada vocación literaria, con tan sólo veinticinco años irrumpió en el panorama cultural mexicano con una novela titulada El castigo (1957), opera prima a la que siguieron otros excelentes ejercicios narrativos como las novelas Los desorientados (1958) y Dos colores para el paisaje (1961), y el volumen de relatos El otro día, la muerte (1974).
A pesar de sus buenas dotes para el cultivo de la prosa de ficción, Maruxa Vilalta es mucho más conocida y celebrada entre la crítica y los lectores por su fecunda actividad teatral, plasmada en numerosas piezas originales y en su fructífero trabajo como directora de escena y maestra de varias generaciones de actores. Por su parte, la propia escritora manifestó, en unas declaraciones fechadas el 24 de mayo de 1999, su debilidad por el Arte de Talía: "Al escribir siento que realizo un acto de libertad. El atractivo que en mí provoca el Teatro es irreversible e irresistible. El Teatro me enamora y me cautiva".
Miembro del Pen Club, de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, de la Sociedad General de Escritores de México, de la Asociación de Escritores de México y del Sistema Nacional de Creadores de Arte del FONCA, la importancia de su obra teatral y de sus labores de promoción y animación cultural dentro del país azteca le han granjeado numerosos honores y reconocimientos, entre los que cabe recordar aquí la obtención, en varias ocasiones, del "Premio de la Crítica" a la mejor obra teatral del año; el Diploma del Instituto Mexicano de Cultura; y su elección como Vicepresidenta del Colegio de Literatura. Editorialista del prestigioso rotativo Excelsior, su peso específico dentro de la vida social y cultural mexicana quedó bien patente el 15 de febrero de 1960, cuando, a iniciativa suya, se instituyó en México el "Día de la Mujer".
Entre sus piezas dramáticas más aplaudidas por la crítica y el público -la mayor parte de ellas, traducidas, publicadas y representadas en diferentes países-, cabe recordar las tituladas Un país feliz (1963), Soliloquio del tiempo (1964), Cuestión de narices (1966), Esta noche juntos, amándonos tanto (1974), Una mujer, dos hombres y un balazo (1981) y Una voz en el desierto (1990). Singularísima resulta, asimismo, la pieza titulada 1910 (2001), en la que Maruxa Vilalta retrocede en el tiempo para poner sobre las tablas los ideales de los primeros caudillos de la Revolución Mexicana, con una extraordinaria capacidad de síntesis para reducir a las dos horas que dura la representación la vicisitudes histórico-políticas de la época y las introspecciones psicológicas de los protagonistas. A los méritos literarios que encierra el texto, Maruxa Vilalta añade toda la sabiduría acumulada en su larga experiencia como directora de escena, plasmada aquí en once únicos actores que, vestidos todos con la misma indumentaria (pantalones de color caqui y camisas blancas), se van transformando, según lo requiere la acción, en los diferentes personajes que dan vida a la obra (héroes, caudillos, soldados, soldaderas, esposas, generales, campesinos, artilleros, estudiantes, ciudadanos y guerrilleros). En palabras de la propia dramaturga, “la Revolución Mexicana es una gran herramienta histórica que los mexicanos deberíamos saber aprovechar, porque en ella está escrito un camino de abnegación y solidaridad. Esta revolución la hicieron dos tipos de hombres: los intelectuales y los humildes, al juntarse esos dos sectores se logró una gran fuerza política que debe ser aprovechada por los mexicanos de la nueva era”.
J. H. Florencia Zaldívar, en un valioso análisis del teatro Maruxa Vilalta, sostiene que el poder en sus diferentes modalidades y manifestaciones es el tema dominante en la dramaturgia de la autora nacida en Barcelona. Tras haber cotejado seis piezas teatrales suyas, afirma que en su obra titulada Los desorientados, Vilalta ahonda en el poder de la tradición; en Un país feliz, el poder aparece reflejado desde la perspectiva de quienes secularmente lo vienen ostentando; en Nada como el piso 16, sube a las tablas del escenario el poder de la persuasión y de la seducción; en Esta noche juntos, amándonos tanto, Maruxa Vilalta analiza los componentes sádicos presentes en toda relación de poder; por último, en Historia de Él, son los recursos propios y la trayectoria política de un hombre poderoso los que dan sentido a la obra.
Bibliografía
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FLORENCIA ZALDÍVAR, J. H. Una crítica a las estructuras del poder en seis obras de Maruxa Vilalta (México: Universidad Nacional Autónoma de México [UNAM], 1993).
