Vicente Rodríguez, Paulino (1900-1990).
Pintor español, nacido en Oviedo el 27 de noviembre de 1900 y muerto el 15 de agosto de 1990. Abandonó los estudios de bachillerato para dedicarse al dibujo, materia en la que se inició junto a un dominico, en el Círculo Católico, que le enseñó a pintar del natural. Pintó su primer cuadro en 1913, que fue seguido por La puerta de los frailes, que se expuso en una colectiva junto a las obras de otros pintores asturianos, y que le mereció la felicitación personal de Alfonso XIII; éste y otros éxitos juveniles le empujaron a la pintura de forma profesional, así que, en 1919, se trasladó a Madrid y se matriculó en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. Durante esta etapa trabó conocimiento con personalidades de la intelectualidad del momento, como Moreno Villa, a Lorca, a Buñuel, a Achucarro y tantos otros que vivían como él en la Residencia de Estudiantes, donde tuvo oportunidad de vivir un ambiente que, junto con las tertulias, completó su formación.
En 1929 fue becado por la Diputación de Asturias para viajar a Italia a ampliar estudios; allí conoció la pintura de los clásicos y el naciente expresionismo. Cuando regresó, dos años después, ya se le consideraba un pintor importante, lo que le permitió vivir con desahogo, primero como retratista, más tarde como docente y, a partir del 40, como muralista. Durante la etapa que siguió después viajó numerosas veces al extranjero y continuó trabajando en apuntes, cuadros, dibujos, retratos y óleos. Las obras que pintó durante esta época le hicieron especialmente conocido en España; entre éstas se encuentran los retratos de Salvador de Madariaga, Pablo Casals, Jorge Guillén, Luis Buñuel, Carlos Prieto y del escultor británico Henry Moore, además de una serie dedicada a los exiliados que lleva por título Españoles fuera de España, inaugurada en 1970.
Paulino Vicente ha sido uno de los pintores más representativos de la tierra asturiana, del sentir de sus gentes, del paisaje astur, sus tradiciones y sus tipos; su andadura artística se inició en un momento en que las costumbres y el carácter regional conservaban toda su integridad, tal y como se muestra en las obras Mi abuelo Paulo y La ciega. Condiscípulo de Dalí y Mallo, no sólo se ha limitado a expresar el sentimiento del paisaje asturiano, sino también el alma de sus coterráneos; así, por ejemplo, el tema del minero ha sido una de las constantes de su producción, que ha reflejado en pinturas, litografías y aguafuertes. También ha pintado rincones de España e Italia, pero siempre afincado en el sentir popular. Sus dibujos sobre estos temas se publicaron en diversos periódicos y revistas, como ABC, Blanco y Negro y la Esfera, lo que muestra el reconocimiento popular de que era objeto el pintor.
El artista, que fue galardonado a lo largo de su trayectoria artística con numerosas distinciones, estaba en posesión de la Manzana de Oro que concede el Centro Asturiano de Madrid (1978), de la Medalla de Plata al Mérito de las Bellas Artes (1981) y de la Medalla de Plata al Mérito en el trabajo; asimismo fue candidato al Premio Príncipe de Asturias además, en 1979 fue designado "Hijo Predilecto" por el ayuntamiento de Oviedo y se dio su nombre a una calle.
Exposiciones
(1980) Galería Rojo y Negro, Madrid. (1988) "La imagen de Oviedo en la pintura de Paulino Vicente", Teatro Campoamor, Oviedo.
