A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
Ingeniería y tecnologíaBiografía

Tartiere Lenegre, José (1848-1927).

Ingeniero industrial español nacido en Bilbao el 21 de noviembre de 1848 y fallecido en Lugones el 18 de abril de 1927.

Procedente de una familia de emigrantes franceses, Tartiere creció en un ambiente y en una época de desarrollo industrial. Esto le hizo dedicarse de lleno a la industria y a la búsqueda de fórmulas para conseguir la modernización económica.

Muy joven se trasladó a Asturias donde intentó descubrir alguna fórmula para conseguir dinamita en una región donde este explosivo conseguiría muchos adeptos debido a la gran proliferación de yacimientos de carbón. Sin embargo, un hecho que no podía pasar por alto le alejo de sus pretensiones: en España la licencia de la comercialización de la dinamita era propiedad del grupo Nobel hasta 1877. No obstante, en Asturias había inversores dispuestos a arriesgar su capital, y así Antonio Thiry fundó La Manjoya, que se dedicaba a la preparación de la dinamita, ácido nítrico y sulfúrico entre otros materiales químicos. Tartiere fundó para ello la sociedad anónima Santa Bárbara en 1880, aunque comenzó su actividad tres años más tarde. Al principio se dedicó a producir pólvora para diversas armas, entre las que se encontraban las de caza, y la munición de las armas utilizadas por los españoles en la última Guerra de Cuba, en la cual el propio Tartiere luchó con los españoles.

Un año después de regresar de la contienda, entró a formar parte de la Unión Española de Explosivos en un gesto de unificación de todas las empresas del sector para intentar evitar la competencia entre ellas. Quince años después de constituirse la Santa Bárbara, junto con Policarpo Herrero y Hemógenes González Oliveros emprendieron un proyecto industrial que se llamó Sociedad Industrial Asturiana Santa Bárbara. En sus estatutos se establecía como objetivo social la adquisición y explotación de ferrocarriles y minas, el establecimiento o compra de fábricas y talleres, así como hacerse con obligaciones o acciones de bancos y sociedades, y llevar a cabo asociaciones con otras empresas.

En los años posteriores, Tartiere participó en diversas sociedades y se ocupó, además, del abastecimiento de agua, electricidad y de producción de gas. Para poder cumplir con estos servicios creó en 1898 la Sociedad Popular Ovetense.

Su diversificación de actividades empresariales llevó a Tartiere a la creación de un banco en 1899, junto con sus colaboradores habituales que ya habían formado parte en muchas de las actividades realizadas por el empresario. Los comienzos del banco fueron muy duros, ya que pasaron por momentos difíciles, teniendo que hacer frente a huelgas y guerras como la de México, que le afectó ya que era desde allá donde recibían numerosos giros.

Continuando con la explotación de aguas, en 1912 Tartiere fue el encargado de realizar las obras para el aprovechamiento de aguas de los lagos de Somiedo para la obtención de energía eléctrica, junto con otras sociedades como la Sociedad Popular Ovetense y la Compañía Popular de Gas y Electricidad de Gijón, con las que formó en 1920 la sociedad anónima Hidroeléctrica del Cantábrico-Saltos de Agua de Somiedo. Un año después, Alfonso XIII le concedió el título de conde de Santa Bárbara de Lugones. También se acercó al mundo de la prensa y en 1923 fundó el periódico La Voz de Asturias. Incluso Francia se hizo eco de la importancia de los logros de Tartiere: tres años antes de su muerte, el gobierno francés le concedió la Legión de Honor. Tras su muerte, en 1927, el gobierno asturiano decidió erigir un monumento en su honor que se descubrió seis años después del óbito.

RUF

Autor

  • 0105 RUF