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PolíticaDerechoBiografía

Serrano Suñer, Ramón (1901-2003).

Político y abogado español nacido en Cartagena (Murcia) el 12 de septiembre de 1901 y fallecido en Madrid el 1 de septiembre de 2003. Presidente de Falange y ministro de Interior y de Exteriores entre 1938 y 1942, alcanzó relevancia política durante los primeros años del franquismo. Hijo de un afamado ingeniero de caminos, cursó la carrera de Derecho en Madrid, obtuvo el premio Extraordinario de Licenciatura en junio de 1923 y, posteriormente, amplió sus estudios en Italia (Roma y Bolonia). En 1924 ingresó por oposición en el Cuerpo de Abogados del Estado para ocupar su plaza de jurista, primero en Castellón y después en Zaragoza. Precisamente en la capital aragonesa conoció a Franco, quien ocupaba la dirección de la Academia Militar, y a Zita Polo, cuñada del general y, a la postre, esposa de Serrano Suñer. La boda se celebró en Oviedo el 6 de febrero de 1932 con Franco y Primo de Riveraen calidad de testigos.

Durante la República inició su carrera política en las filas de la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA), el partido liderado por Gil Robles, donde llegó a desempeñar la Jefatura Nacional de las JAP (Juventudes de Acción Popular), el movimiento juvenil del partido. Obtuvo el acta de diputado de la CEDA por Zaragoza en la elecciones de 1933 y 1936. Amigo íntimo de José Antonio Primo de Rivera y con buenas relaciones también en la Comunión Tradicionalista y en el Grupo de Acción Española, colaboró activamente en la preparación de la insurrección militar que derrocó a la República.

La guerra civil le sorprendió en Madrid, donde fue encarcelado, aunque en octubre de 1936 consiguió un ingreso hospitalario por una presunta úlcera estomacal y se evadió del sanatorio. Refugiado en la Legación de Holanda, con salvoconducto falso llegó hasta Alicante, embarcó hacia Marsella y, después de atravesar Francia hasta Biarritz, en febrero de 1937 logró alcanzar Salamanca, capital provisional de la llamada zona nacional, mientras que sus hermanos José y Fernando eran ejecutados en la zona republicana. En pocos meses preparó la unificación de falangistas, requetés y jonsistas, que dio paso al llamado Movimiento Nacional, y se convirtió en el hombre fuerte del poder civil en España.

En plena guerra y en el primer Gobierno rebelde que formó Franco en enero de 1938, se le confió la cartera de Interior, ministerio que al unificarse con el de Orden Público tomó el nombre de Gobernación y que Serrano Suñer dirigió con notable capacidad de acción. Suyas fueron las iniciativas para promover la ley de la Administración Central y la ley de Prensa, responsable del establecimiento de una férrea censura en las décadas posteriores. También fue inspirador del Fuero de los Trabajadores, sobre el que se asentó la política social del régimen. Tal era su autoridad y poder que en los círculos políticos del país comenzó a ser conocido como el "cuñadísimo".

La derrota republicana en la guerra civil favoreció la proyección política de Serrano Suñer en el nuevo Estado. En agosto de 1939 fue elegido presidente de la Junta Política de Falange y colaboró activamente en la creación de un régimen autoritario de corte corporativo, en línea con la Europa fascista de la época. Como ministro de la Gobernación y jefe nacional de Prensa y Propaganda de Falange Española Tradicionalista y de las Jons, el desarrollo de la política interior española pasaba ineludiblemente por su mesa de trabajo.

Se convirtió en ministro de Asuntos Exteriores en octubre de 1940, cuando la Alemania nazi dominaba Europa con sus ejércitos en los primeros años de la Segunda Guerra Mundial. Declarado germanófilo, durante su mandato viajó con frecuencia a Alemania y a Italia, se entrevistó nueve veces con Hitler y también con Mussolini y fue testigo directo de las célebres reuniones de los jefes de Estado alemán e italiano con el general Franco en Hendaya y Bordighera. En agosto de 1942, y a raíz de los incidentes protagonizados por carlistas y falangistas en los llamados sucesos de Begoña, su cuñado y jefe del Estado ordenó su destitución como ministro de Asuntos Exteriores. Franco le consideró responsable intelectual del altercado aunque los historiadores coinciden en señalar que este razonamiento fue sólo una excusa del Generalísimo para apartar de su lado a una figura política que le hacía demasiada sombra.

Alejado de la responsabilidad pública, retomó el ejercicio de la abogacía y adoptó posiciones de acercamiento hacia la figura de don Juan de Borbón. En 1945, escribió una famosa carta a Franco llamándole la atención sobre la urgencia de realizar ciertas reformas en el sistema de Gobierno y proponiéndole la necesidad de incorporar en el Gabinete a personalidades importantes de la sociedad española como Ortega y Gasset, Marañón o Cambó. El general rechazó cualquier opción de cambio. Antes del fallecimiento de Franco, Serrano Suñer propuso la solución monárquica para la sustitución del régimen.

En la segunda mitad del siglo XX, hizo valer su condición de intelectual como académico, director del Instituto Hispánico y escritor y logró el Premio Mariano de Cavia por su actividad de articulista en prensa. También ejerció tareas empresariales en diversas compañías, como Radio Intercontinental, cadena que contribuyó a fundar y en la que ocupó la presidencia de honor hasta su muerte, y Fomento de Obras y Construcciones (FOCSA), sociedad que también presidió entre 1974 y 1979.

Presidente de la Fundación José y Fernando Suñer, fue elegido en octubre de 1987 miembro honoris causa de la Academia Mexicana de Derecho Internacional y el 21 de abril de 1988 la Universidad Politécnica de Madrid le concedió la medalla de oro de la institución.

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  • 0204 (a.ISC).