A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
EsculturaBiografía

Núñez del Prado, Marina (1910-1995).

Escultora boliviana nacida en La Paz el 17 de octubre de 1910 y muerta en Lima (Perú) el 9 de septiembre de 1995. Su obra está caracterizada por el uso de voluminosas formas redondeadas elaboradas con materiales impactantes como el granito negro, el alabastro, el basalto y el ónice blanco, además de maderas propias de su tierra natal. Ejemplo de perseverancia, dedicación al trabajo y pasión por el arte, es una de las escultoras más aclamadas de Hispanoamérica.

Interesada desde muy joven por las bellas artes, realizó estudios de artes plásticas en su ciudad natal. Pronto descubrió su pasión por la escultura, a partir de la admiración que sintió por la obra de Miguel Ángel. Ingresó en la Academia de Bellas Artes de La Paz, en la que obtuvo el graduado en 1930, aunque continuó ligada a ésta como profesora de escultura y anatomía artística, disciplinas por las que consiguió la cátedra en dicha institución, convirtiéndose en la primera mujer en lograrlo. A su labor docente unió su trabajo como escultora; su primera exposición fue realizada el mismo año de su graduación, y a partir de entonces realizó innumerables exposiciones de su obra en su ciudad natal, todas ellas centradas en la preocupación por defender los derechos de los pueblos indígenas americanos, dentro de la corriente del indigenismo, compartida con artistas como Cecilio Guzmán de Rojas, con quien colaboró en sus primeras producciones.

En 1938 abandonó la cátedra para viajar por diferentes países no sólo del sur de América, como Perú, Argentina y Uruguay, sino de otras latitudes, como Estados Unidos, Europa y Egipto. La experiencia vital y los conocimientos artísticos que cosechó durante este período le animaron a organizar exposiciones de su trabajo gracias a una beca que recibió de los Estados Unidos.

En 1946 ganó una Medalla de Oro por la exposición que, con el título de "Mineros en rebelión" e inspirada en aquellos que trabajaban en la región boliviana de Potosí, realizó en Nueva York. En 1948 decidió regresar a su país y asentarse de nuevo en La Paz, donde continuó trabajando en su obra. En 1960 se fecha una sus obras más admiradas, Venus blanca, una estilizada escultura femenina realizada en ónice blanco, material con el que también realizó Madre e hijo, inspiradas ambas en los indios nativos de su tierra natal. En 1972 se trasladó a Perú, donde vivió con el escritor peruano Jorge Falcón, con quien se casó.

En las obras antes mencionadas, y en otras también muy admiradas, como Cóndor (que se conserva en el Museo Nacional de Arte de La Paz), India o Con la vida en los hombros, se observa cómo sus creaciones han desembocado en la abstracción más absoluta, especialmente palpable en la serie de "Figuras altiplánicas", donde representa a mujeres llevadas por el viento al caminar. Su modo de esculpir es producto de una vocación absoluta por el arte con mayúsculas, de una interiorización trascendente con la que plasma la esencia de sus modelos a través de volúmenes redondeados con los que deforma un rostro, un torso o el cuerpo entero, con una gran fuerza dramática. Destaca particularmente el modo con que juega con la luz, a través de contrastes entre zonas de luminosidad y zonas sombrías, sin restar importancia al volumen en el resultado final de la obra, con espacios abiertos y cerrados en los que se producen efectos lumínicos muy originales gracias al contraste entre dichos espacios, como si de partes positivas y negativas de la propia obra se trataran, con una concesión importante a los espacios "huecos", tanto más importantes cuando se tratan de materiales de gran dureza, lo que no le impide trabajar en ellos con una meticulosidad pasmosa. Aunque son esculturas definitivamente abstractas, en ellas también está presente el figurativismo y lo orgánico, con un resultado sobrio pero, a la vez, elegante y de gran plasticidad, que produce una especial sensación de serenidad.

La fama conseguida con su obra le hizo conocer a grandes artistas del momento, como Pablo PIcasso y Constantin Brancusi, además de otros nombres propios de la cultura de su tiempo, como la poetisa argentina Alfonsina Storni y la narradora uruguaya Juana de Ibarbourou, además de ser íntima amiga del poeta boliviano Franz Tamayo.

Su obra ha merecido infinidad de premios y reconocimientos internacionales, entre los que destacan la Medalla de Oro a la Mejor Exposición del Año en La Paz, en 1930; el Primer Premio de Escultura del salón anual de la Asociación Nacional de Mujeres Artistas de Nueva York, en 1946; el Primer Premio de Escultura de la I Bienal Hispanoamericana de Arte de Madrid, en 1951; la medalla de la Orden de San Carlos de Colombia, en 1961; la Medalla de Mérito del Ministerio de Cultura de Bolivia; el título de doctor "honoris causa" por la Universidad Mayor de San Andrés en 1972; la Gran Cruz de la Orden de El Sol del Perú y la Medalla Cívica de la Ciudad de Lima, en 1986; y el Premio Extraordinario de Cultura de La Paz, en 1993.

En cuanto a las ocasiones en las que su obra ha sido expuesta al público, ya sea en exposiciones individuales o colectivas, se cuentan por centenares (más de 160 individuales), entre eventos de toda índole y bienales artísticas, tanto en su país como en Perú, Argentina, Uruguay, Brasil, México, Cuba, Venezuela, Colombia, Ecuador, Chile y Estados Unidos, así como en el Viejo Mundo, en España, Portugal, Italia, Francia, Alemania y Checoslovaquia, o en el continente asiático, en Japón y Corea. Entre ellas puede destacarse la realizada en el Museo de Arte Moderno de Sao Paulo entre 1951 y 1957, la realizada en el Petit Palais parisino en 1953, la de la Bienal Hispanoamericana realizada en Madrid en 1951, la Bienal de Tokio de 1977 o la realizada en distintas ciudades españolas (Palma de Mallorca y Madrid) en 1992 con el título de "Voces de ultramar".

En 1984 se inauguró oficialmente la Fundación Casa-Museo Núñez del Prado, en honor de los padres de la artista.

Direcciones en Internet

http://www.bolivian.com/cmnp/index.html; Página de la Casa-Museo de Marina Núñez del Prado.

FDS

Autor

  • 0201 FDS