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LiteraturaPeriodismoBiografía

Nelken, Carmen Eva, "Magda Donato" (1900-1966).

Escritora, traductora, periodista y actriz española, nacida en Madrid en 1900 y muerta en México en 1966. Firmó gran parte de sus obras literarias con el pseudónimo de "Magda Donato".

De origen alemán, había nacido en uno de los foros más castizos de España, la madrileña plaza de Santa Cruz, en el seno de una familia cuyo apellido se haría pronto célebre gracias a su hermana mayor, la escritora, periodista y diputada Margarita Nelken. Imbuida del mismo espíritu liberal y combativo que animó desde siempre la vida de su hermana, y sin duda influida por la vocación artística e intelectual de ésta, la joven Carmen Eva comenzó a darse a conocer como periodista polémica y brillante en las páginas del diario El Imparcial, donde publicó su primer artículo ("Divagaciones sobre la moda") el día 6 de enero de 1917. Ya por aquel entonces había entablado relaciones, dentro del círculo de pintores y escritores en que se movía Margarita, con el famoso ilustrador Salvador Bartolozzi, con quien compartió su vida y buena parte de su actividad artística.

En efecto, Salvador Bartolozzi introdujo a Carmen Eva Nelken en el mundo del periodismo y del teatro infantil, materias que comenzó a cultivar la joven autora en la sección para niños de Los Lunes del Imparcial, en la que publicaba un cuento que aparecía acompañado por las ilustraciones de su pareja. Antes, Carmen Eva Nelken había colaborado en varios medios de comunicación de reconocido prestigio, como el diario ya mencionado o la revista La Estampa. En ellos, al tiempo que se hacía notar por sus enjundiosas entrevistas a personajes célebres de la actualidad, ganó pronto fama de autora sensacionalista, merced a los temas candentes cuyo tratamiento no solía rehuir. Y aunque no intervino en la vida política del país de forma tan directa y activa como lo hiciera su hermana Margarita, lo cierto es que Carmen Eva Nelken se alineó siempre al lado de las clases menos favorecidas y de los grupos sociales más marginados: defendió con ahínco los derechos de la mujer, se manifestó varias veces en favor del divorcio y del voto femenino, y escribió una impresionante serie de reportajes periodísticos (publicados en La Estampa) sobre la vida de la mujer en las cárceles españolas del momento, para lo que recurrió al valeroso método de vivir durante un año en la Cárcel Modelo de Madrid, haciéndose pasar por una reclusa cualquiera.

Entretanto, llevaba adelante una exitosa carrera de actriz dramática, apoyada por esa extraordinaria belleza suya que había cautivado a sus contemporáneos. También fue Salvador Bartolozzi quien la introdujo en el mundo de la escena, primero como adaptadora de obras ajenas y, posteriormente, como activa colaboradora de grupos teatrales vanguardistas, como El Teatro de la Escuela Nueva (1921) y El Caracol (1928-1929), fundados por el escritor y director teatral madrileño Cipriano Rivas Cherif.

Al término de la Guerra Civil se vio obligada a exiliarse de España. En 1939 se instaló en Francia junto con su inseparable compañero, pero ambos tuvieron que abandonar el país vecino en 1941, a raíz de la invasión alemana. Se dirigieron entonces a México, en donde Salvador Bartolozzi se hizo cargo del Teatro Infantil perteneciente al Teatro de Bellas Artes de la capital, y llegó a dirigir alguna película cinematográfica (Aventuras de Cucuruchito y Pinocho, que se estrenó en Madrid en 1945); estas circunstancias laborales de su pareja hicieron posible que Carmen Eva Nelken (ya artísticamente convertida en "Magda Donato") relanzara su carrera de actriz dramática.

En efecto, en tierras aztecas volvió a ser aclamada por sus interpretaciones -tanto en los estudios de cine como en la escena teatral y en los platós televisivos-, y llegó incluso a ser reconocida, en 1960, como la mejor actriz del momento. Instituyó entonces el premio "Magda Donato", destinado al descubrimiento y fomento de jóvenes artistas, y continuó participando activamente en la vida cultural de México, rodeada de una enorme popularidad, hasta que, en 1966, la muerte acabó con su exilio dorado.

Su vasta cultura, apoyada en un perfecto dominio de los idiomas que conocía (inglés, francés y alemán), dejó impresa una estela de importantes traducciones y versiones debidas al cuidado de su pluma: Los caballeros de Bois-Doré, de George Sand; Melo, de Henri Beinstien (1934); Rosario al sol, de Francis Jammes (Madrid: Espasa-Calpe [col. "Austral"], 1958); y Las sillas, de Eugène Ionesco (México, 1960). Además, adaptó a los gustos teatrales del espectador español varias obras extranjeras, como Aquella noche, de Lajos Zilahy (1936) o Cuentos escogidos, de Jean Lafontaine (1941), y escribió ella misma algunas piezas dramáticas, como ¡Maldita sea mi cara! (redactada en 1929, en colaboración con el dramaturgo madrileño Alfonso Paso), y Pipo, Pipa y el lobo Tragalotodo (que compuso en 1936, junto con Salvador Bartolozzi). A esta producción literaria hay que añadir sus cuentos infantiles (como La protegida de las flores, y otros muchos relatos que publicó -como ya se ha indicado más arriba- en Los Lunes del Imparcial), y sus dos novelas breves (La carabina, de 1929, y Las otras dos, de 1934), aparecidas en la célebre colección "La Novela de Hoy", que dirigía Artemio Precioso.

Bibliografía

  • BRAVO-VILLASANTE, Carmen. Historia de la Literatura Infantil. (Madrid: Doncel, 1972). Pag. 221.

  • BRAVO-VILLASANTE, C., & GARCÍA PADRINO, J. Homenaje a Salvador Bartolozzi (Madrid: Porrúa Turanzas, 1984).

  • ENA BORDONADA, Ángela (ed.). Novelas breves de escritoras españolas (1900-1936). (Madrid: Ed. Castalia & Instituto de la Mujer, 1989).

  • ESPINA, Antonio. Salvador Bartolozzi. Monografía de su obra. (México: Unión Editorial, 1951).

  • RODRIGO, Antonina. Mujeres de España. (Las silenciadas). (Barcelona: Plaza y Janés, 1979). Pag. 161.

Autor

  • J.R. Fernández de Cano