Mursilis I, rey hitita (1620-1590 a.C.).
(Mur-shi-li-ish o MURSIL) Rey hitita, hijo de Khuzzijas. Debido a las agitaciones del final del reinado de Khattusilis I, éste adoptó como hijo a Mursilis I (en realidad, su nieto) y lo designó heredero al trono en su testamento político. Nada más subir al trono, Mursilis I hubo de hacer frente a una sublevación general del país, que pudo controlar. Pudo también contener a algunos estados asirios e incluso destruir la ciudad de Alepo, de donde llevó a Khattushas un rico botín. Poco después, y dando muestra de una gran audacia, efectuó una rápida incursión contra Babilonia, de la cual extrajo un gran botín, además de las estatuas de sus principales dioses, Marduk y Zarpanitu, que luego dejó en el país de Khanna, obligado muy probablemente por los hurritas. Con tal hecho de armas, Mursilis I ponía fin a la primera dinastía de Babilonia (cuyo último rey fue Samsu-Ditana). Tuvo también que hacer frente a los hurritas y a los gasgas, banda ésta de salteadores de gran movilidad. Mursilis I fue envenenado por su cuñado y copero real Khantilis I, que contó con la ayuda del traidor Zidantas.
