Morgan, Eduardo (1902-1988).
Poeta, periodista y político anglo-panameño, nacido en la región británica de Gales en julio de 1902 y fallecido en la ciudad de Panamá el 4 de febrero de 1988. Hombre de constantes inquietudes públicas que le llevaron a tomar parte activa en la vida política y cultural de su país adoptivo a lo largo de toda su vida, ha pasado a la historia como uno de los más destacados próceres panameños del siglo XX.
Nacido en el seno de una familia acomodada, fundada por don Juan David Morgan y doña María Álvarez, a los doce años de edad abandonó el territorio europeo en el que provisionalmente vivían sus progenitores y se trasladó con ellos a Panamá, para instalarse en la provincia de Chiriquí. El matrimonio Morgan-Álvarez y sus hijos ocuparon la espléndida hacienda La Montera, ubicada en Vijagual, donde el pequeño Eduardo Morgan tuvo acceso a una esmerada formación académica que, reforzada luego en la capital del país, le permitió adentrarse por ese sendero de los saberes humanísticos que había aparecido ante él como una vocación innata, y que después habría de compaginar con su constante dedicación a las tareas políticas. Esta educación contribuyó también a consolidar su completa adaptación al idioma y las formas de vida de su nuevo país, por lo que en 1925 renunció a su nacionalidad británica y pasó a ser, oficialmente, un panameño más.
Un año después, con apenas veinticuatro años de edad, irrumpió ruidosamente en los medios culturales del pequeño país centroamericano con la fundación del rotativo La Razón (1926), y a partir de este momento comenzó a desplegar una intensa labor periodística que, andando el tiempo, acabó por convertirlo en una de las figuras cimeras de la prensa panameña, a la que aportó la cabecera de otro diario (Renovación, fundado en 1935) y de una revista de periodicidad semanal (El León, de 1941).
Esta preeminencia en los medios de comunicación revistió a Eduardo Morgan de un firme poder político que, en la década de los años cuarenta, le llevó a ocupar algunos de los cargos más elevados del gobierno y la administración del país, como el de ministro de Educación (1944-1945), asesor legal del Gobierno de la República de Panamá (1946-1947) y magistrado suplente de la Corte Suprema de Justicia (1945-1949). Entre los frutos más granados de su legado político durante esta década, sobresale su responsabilidad en la redacción del proyecto básico para la ley que regula la elección de los miembros de la Asamblea Constitucional, encargada a su vez de redactar la Constitución de 1946.
Posteriormente, Eduardo Morgan siguió desempeñando destacadas funciones en la vida política y diplomática de su país adoptivo. Después de haber sido elegido en 1948 miembro de la comisión de cinco países designados por la Asamblea General de las Naciones Unidas para organizar el Estado de Israel y los Territorios Árabes, fue nombrado presidente de la National Bar Association of Panama (1953-1956). También fue presidente del Instituto de Relaciones Culturales Panamá-Israel (1962-2982), miembro para Panamá de la Corte Internacional de Arbitraje de la Corte de La Haya (1972-1986) y presidente honorario vitalicio del Instituto de Relaciones Culturales Panamá-Israel (1982-1988).
En su faceta de escritor, Eduardo Morgan fue autor de numerosas composiciones poéticas que merecieron los elogios de la crítica y los lectores de su tiempo. Gran parte de estos poemas fueron recopilados por el propio autor en un volumen publicado bajo el título genérico de Poesías.
JRF.
