Monagas Oriach, José Ruperto (1831-1880).
Militar y político venezolano, hijo de José Tadeo Monagas y de Luisa Oriach, nacido en Aragua de Barcelona en 1831 y muerto en la misma localidad el 12 de junio de 1880.
En 1857, como representante de la ciudad de Maturín, firmó la Constitución de abril de ese año. En marzo del año siguiente fue nombrado comandante de Barcelona, puesto desde el que se mostró partidario del presidente Julián Castro, pese a lo cual el general Justo Briceño, representante del Gobierno, lo encarceló en el castillo de Puerto Cabello, al desconfiar de su lealtad hacia el régimen.
En julio de 1868, tras el triunfo de la Revolución Azul, inició su carrera militar al ser nombrado Jefe del Estado Mayor del Ejército. Desde este cargo, dirigió el ataque a Puerto Cabello, plaza que ocupó en agosto. Desde allí pasó a dirigir la Campaña de Occidente, donde logró triunfar sobre la denominada Liga de Occidente, tras la conquista de San Carlos y Barquisimeto.
El partido Azul, fusión de conservadores y liberales, se hallaba dividido entre la dirección de José Ruperto Monagas y de Domingo Monagas Marrero, hijo de José Gregorio Monagas. A la muerte de José Tadeo, en 1868, la división interna de los Azules se agudizó. José Ruperto asumió de nuevo la jefatura del Estado Mayor y suplió a su padre en la dirección de los Azules. En el Congreso celebrado en 1869 se discutió el liderazgo entre José Ruperto y su primo Domingo; el resultado de dicho Congreso dejó a José Ruperto como Primer Designado del país. Ante el abandono del programa de la Revolución Azul por el nuevo presidente, los Azules dejaron el gobierno y pasaron a la oposición.
Ante el recrudecimiento de la guerra civil, José Ruperto volvió a tomar las armas y se dirigió a Maracaibo, para hacer frente al general sublevado Venancio Pulgar; dejó como presidente de la República a Guillermo Tell Villegas.
En 1870 las elecciones a la presidencia se desarrollaron en medio de un clima de creciente caos y anarquía, ante el intento de algunos Estados de segregarse de la República; José Ruperto salió victorioso de las mismas, pero el Poder Legislativo se negó a proclamarlo Presidente alegando una cuestión meramente formal. En febrero de ese año, se produjo la invasión de Antonio Guzmán Blanco, apoyado por los liberales, por lo que José Ruperto volvió a ponerse al mando del ejército, pero no pudo evitar el triunfo de Guzmán, que el 27 de abril de ese año tomaba Caracas y obligaba a José Ruperto a firmar la rendición. Entonces, Guzmán se proclamó como nuevo presidente.
Tras estos sucesos, José Ruperto se retiró de la vida pública y regresó a sus posesiones de Aragua de Barcelona, donde falleció diez años más tarde.
