Mirón (470-430 a.C.).
Escultor griego activo desde el año 470 a.C.. Su estilo escultórico se inscribe a comienzos del arte clásico, estilo severo, Arte Griego, y conserva algunos de los caracteres de la etapa arcaica anterior, a los que añade el sentido del movimiento, estudiado a través de las tensiones del cuerpo humano, y la intensa vitalidad que se desprende del esfuerzo contenido. Las fuentes literarias atribuyen a Mirón muchas obras en bronce, algunas de las cuales hoy nos son desconocidas, esculturas de atletas, de dioses y héroes (Apolo, Atenea, Erecteo, Heracles, Perseo), de animales (entre los que fue muy famosa una Vaca que era de tal realismo que se decía que sólo le faltaba mugir). En realidad, únicamente se han podido atribuir con certeza, a través de copias romanas, tres obras: el Discóbolo, Atenea y Marsias y el Anadaumenos. Este último ha sido reconstruido por medio de copias fragmentarias representando a un atleta, que recuerda al Discóbolo, que se ciñe la cinta en la cabeza.
Discóbolo
El Discóbolo representa a un atleta en el momento justo del lanzamiento del disco. El movimiento, complejamente armónico del atleta que gira preparando el disco para lanzarlo, congela todo el proceso en un instante; está todavía impregnado de los caracteres arcaicos propios del estilo severo: cierta frontalidad de los planos corporales concebidos con sentido geométrico y aspecto de bajorrelieve estrechamente encajonado. Pese a ello destaca el sentido vital que se aprecia en toda la estructura y en cada uno de sus elementos: cada miembro está tensado al máximo y subordinado al efecto del conjunto. Los dedos del pie se agarran al suelo, resaltan las venas y los nervios tensos del cuerpo comprimidos por la musculatura, sobria y esquemática. En contraste con lo anterior resalta un rostro, posiblemente un retrato, de formas precisas y rigurosas, que parece no tomar parte en el esfuerzo del cuerpo. Es conocida esta obra gracias a las copias romanas que del original se hicieron. La mejor copia en mármol es la llamada replica Lancelotti que se encuentra en el Museo de las Termas de Roma.
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- Discóbolo de Mirón.
Grupo de Atenea y Marsias
En esta obra Mirón representa a la diosa, ofendida por la deformación que en sus carrillos ha causado el tocar una flauta, que arroja contra el suelo el instrumento musical, en tanto que el fauno Marsias queda sorprendido por la reacción de Atenea. El artista vuelve a sintetizar en las actitudes de los personajes, la congelación del movimiento intenso en un instante, resaltando el contrapunto entre la vestida serenidad de ella y la enérgica desnudez del fauno.
Bibliografía
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