Mira Mena, Magdalena (1859-1931).
Pintora y escultora chilena nacida en Santiago en 1859 y fallecida en 1931; representa una de las figuras femeninas más importantes del panorama pictórico latinoamericano del siglo XIX y fue, junto a su hermana Aurora, precursora de la incorporación de la mujer al mundo artístico en el sur del continente americano.
Gregorio Mira, destacado pintor aficionado que estudió con Monvoisin, inculcó en sus hijas su pasión por las artes y, especialmente, por las manifestaciones pictóricas. Magdalena, la mayor de ellas, ingresó en la Academia de Bellas Artes de la capital donde fue alumna, entre otros maestros, del pintor Juan Mochi y el escultor José Miguel Blanco. En la segunda mitad del siglo XIX, la presencia de las mujeres en las academias de arte era poco habitual y las hermanas Mira tuvieron que romper con muchos de los prejuicios de la época.
En sus primeros lienzos al óleo, retratos y representaciones de la figura humana, Magdalena Mira ya dio sólidas muestras de su talento pictórico y su capacidad para crear atmósferas cálidas con extraordinaria soltura y plasticidad en sus pinceladas. Sobre una técnica de representación objetiva y naturalista, la artista consigue además traspasar los rasgos físicos de sus modelos y dotarlos de un perfil psicológico fácilmente perceptible. La perfección formal es una de las obsesiones de la autora y la sabia combinación de este ejercicio técnico con el lirismo que aporta el aura sentimental de sus obras, uno de sus mayores logros. Destacan ejemplos como Don Gregorio Mira o Retrato de Dama y, especialmente, Retrato ante el caballete, óleo que representa a su padre mientras contempla piezas de la propia Magdalena y que se convierte en el primer caso conocido de obra de autorreferencia en la historia de la pintura chilena.
La evolución artística de Mira avanzó hacia el abandono progresivo del academicismo y la búsqueda de modos de expresión propios que nacen del uso de pinceladas sueltas y vigorosas y crean composiciones muy vanguardistas para la época, como Una desconocida (1897). La pintora vivió durante tres años en Roma y allí encontró nuevos temas de inspiración en marinas y paisajes europeos. Recibió varias distinciones por sus trabajos y alguna de sus obras se ubica en el Museo Nacional de Bellas Artes y en la Pinacoteca de la Universidad de Concepción.
