Menno Simons (1496-1561).
Reformador holandés nacido en Witmarsum (Frisia) en 1496 y muerto en Wüstenfeld (Alemania) el 31 de enero de 1561. Aunque se ordenó sacerdote católico en 1524, en pocos años se desmarcó de la Iglesia a causa de sus posiciones heterodoxas; adoptó el bautismo de adultos propio de los anabaptistas e ingresó en uno de sus grupos al rebautizarse hacia 1536. Encabezó los sectores no violentos del anabaptismo, a los que aportó algunos principios doctrinales y morales. Predicó inicialmente en Holanda, pero a partir de 1542 fue perseguido por el emperador y acabó por trasladarse Alemania, donde murió. Sus seguidores adoptaron el nombre de Iglesia Mennonita.
Nació en el seno de una familia campesina de Frisia. A edad temprana ingresó en una escuela monástica, quizá en el monasterio franciscano de Bolsward, con el objeto de hacerse sacerdote. Se ordenó en Utrecht en marzo de 1524, y le fue asignada la parroquia de Pingjum (cerca de su pueblo natal). Por entonces se cuestionó la presencia real de Jesucristo en el pan y el vino durante la Eucaristía; para solucionar esta duda recurrió a la lectura de la Biblia y de los escritos de Lutero. Como otros reformadores, pronto reconoció la Sagrada Escritura como principal autoridad de la vida de fe y de Iglesia. En 1531 fue nombrado párroco de la iglesia de Witmarsum, donde había nacido, pero era ya un predicador evangélico.
Examinó el sacramento del Bautismo y la pertenencia a la Iglesia Católica: de sus lecturas del Nuevo Testamento concluyó que la Iglesia era, efectivamente, Cuerpo de Cristo, pero a ella sólo pertenecían efectivamente las personas de fe y conocimiento de Jesucristo plenos. Únicamente éstos podían ser bautizados, como signo de su compromiso con Dios y de la condición de testigos suyos ante el mundo; a los niños les bastaba la gracia divina hasta que alcanzasen edad suficiente para aceptar o rechazar el bautismo. Ésta era una tesis similar a la de los anabaptistas, con los que Menno tuvo contacto desde 1532. En abril de 1535, un grupo revolucionario anabaptista, que ocupaba Olde Klooster (cerca de Bolsward), fue masacrado por las milicias públicas. Un hermano de Menno, Peter Simons, fue una de las víctimas de la masacre, lo que le movió a condenar los excesos revolucionarios.
Tras aclarar quién pertenecía verdaderamente a la Iglesia, definió con mayor precisión su doctrina eclesial: escritura y sacramentos, obediencia ética, amor al prójimo, testimonio de la fe y aceptación del sufrimiento. Aprovechó la derrota de los anabaptistas de Münster en julio del mismo año para atraer a los sectores más violentos. No obstante, sus predicaciones pusieron en peligro su vida y debió esconderse en enero de 1536. Todo ese año permaneció retirado, dedicado a escribir La resurrección espiritual, El nuevo nacimiento y Meditación del Salmo 33. Poco antes de acabar 1536, o bien a principios de 1537, se rebautizó, desde entonces encabezaría el grupo de anabaptistas pacíficos que había fundado Konrad Grebel (discípulo de Zwingle) y dirigido Obbe Philips desde 1534; también fue en este periodo cuando contrajo matrimonio con Gertrude. En 1539 escribió Fundamentbuch (Libro de fundamentos), la más sistemática de sus obras doctrinales.
Aunque en 1542 el emperador Carlos V puso precio a su cabeza (100 ducados), Menno continuó trabajando entre 1543 y 1544 por la propagación del anabaptismo en Frisia Oriental. En enero de 1544 se entrevistó con el reformador polaco Johannes Lasco (1499-1560). A continuación, hasta 1546, predicó en Renania, donde contó temporalmente con la protección del antiguo arzobispo de Colonia, Hermann, ahora protestante. Luego se estableció en el norte de Alemania, en Holstein, donde predicó hasta su muerte. En sus numerosos viajes llegó hasta las lejanas Danzig (hoy Gdansk, Polonia) y Königsberg (hoy Kaliningrado, Rusia). Menno huyó siempre que lo consideró necesario, sin oponerse nunca frontalmente a las autoridades civiles. Durante estos años creó su propia imprenta para difundir escritos de propaganda contra otros movimientos protestantes; Menno encabezaba sus textos con una cita bíblica: "Nadie puede poner otro cimiento que el ya puesto, Jesucristo" (1 Cor 3, 11).
Aunque Menno no fundó explícitamente la después denominada Iglesia Mennonita, ésta surgió del grupo de anabaptistas noreuropeos que dirigió y a los que dio carácter pacífico al expulsar a los más violentos. Igualmente, sus escritos sentaron las bases de la Iglesia Mennonita: un cristianismo evangélico, bautismo hacia los quince años, negación del divorcio (salvo algunos casos) y de toda organización estatal.
Menno no pudo evitar que, ya en 1555, sus partidarios se escindieran en dos grupos: los toscos o waterländer (habitantes de Waterland, en el norte de Holanda), y los finos o groningos (o danzigianos, que vivían fuera de Holanda y se subdividirían a su vez en el siglo siguiente).
Bibliografía
-
A Bibliography of Menno Simons, ca. 1496-1561. (1962).
-
BRANDSMA, J.A. Menno Simons Van Witmarsum. (1960).
-
KRAHN, C. "Menno Simons", en Mennonite Encyclopedia, vol. 3. (1957).
-
POUPARD, P. Diccionario de las religiones. (Barcelona, Herder, 1987).
-
The Complete Writings of Menno Simons. Edición de J.C. Wenger. (1956).
