Marcelo I, Papa y Santo (¿-ca. 309).
Papa de origen romano según el Liber pontificalis. Sucedió a san Marcelino, tras una vacante de cuatro años debido a la situación caótica y aterradora, tanto interna como externa, en la que se encontraba la Iglesia. Marcelo fue destinado para ocupar la Cátedra de Pedro, el año 308; era en la última de las grandes persecuciones contra la Iglesia principiante. El nuevo papa abrió al culto iglesias que sustituyeron a las confiscadas y dictó normas de penitencia pública para los apóstatas. Estableció 25 títulos en la ciudad para atender al bautismo y penitencia pública y a la sepultura. La arbitrariedad del tirano Majencio, el usurpador, lo persiguió y condenó al destierro y, víctima de los malos tratos, murió hacia el 309. Su sucesor fue San Eusebio. Su fiesta se celebra el 16 de enero.
