Hannon (s. III a.C.).
General cartaginés, hijo de Bomílcar, participó activamente en la Segunda Guerra Púnica que enfrentó a Roma con Cartago y fue uno de los mejores tenientes de Aníbal durante las campañas que éste llevó a cabo en Italia entre los años 218 a 203 a.C.
Tras reunir todas las fuerzas de que disponía, Hannon logró derrotar a los galos aliados de Roma que defendían el paso del Ródano y pasar con todo su ejército cartaginés a la península Itálica, donde formó parte activa y principal en la famosa batalla de Cannas, en el año 216, al mando de una de las alas del ejército de Aníbal, en la que el genial general cartaginés puso contra las cuerdas y humilló a la poderosa Roma. Posteriormente fue derrotado varias veces por las fuerzas romanas.
Ocupó en varias ocasiones la región de los Abruzos, con cuyo pueblo intentó entablar varias veces una alianza militar sin éxito alguno. En el año 208 se hizo cargo de las tropas cartaginesas en Hispania en sustitución de Asdrúbal, quien había pasado a la península Itálica para auxiliar a Aníbal, atrapado en el sur de la misma sin poder moverse. Tras el desembarco en el norte de África del general romano Publio Escipión, en el año 204, y la posterior derrota del general Asdrúbal, Hannon se hizo cargo del mando absoluto del ejército cartaginés en la región mientras esperaba la vuelta de Aníbal; allí apenas pudo conseguir alguna que otra victoria contra el genio militar desplegado por Escipión el Africano, sin poder evitar que la capital del Imperio fuera atacada por las legiones romanas. Finalmente, Hannon cedió el mando a Aníbal cuando éste regreso de su largo periplo para huir de las garras de Escipión, que le había perseguido por todo el Mediterráneo central. Después de caer en manos de los romanos, fue llevado a Roma como trofeo, donde parece ser que murió, en fecha incierta, a principios del siglo II.
Carlos Herráiz García.
