Gorráez Arcante, Francisco, "El Cachorro de Querétaro" (s. XX).
Matador de toros mejicano, nacido a comienzos del siglo XX. En el planeta de los toros es conocido por el sobrenombre de "El Cachorro de Querétaro".
Tras los duros comienzos propios del aprendizaje novilleril, en la temporada de 1925 consiguió que su nombre comenzará a sonar con fuerza en los corrillos y cenáculos de la afición azteca. Anduvo prosperando hasta la campaña de 1928, en la que ya se pudo considerar como uno de los principales novilleros del momento; así que, en la temporada siguiente, decidió que había llegado el momento de pasar al escalafón superior. El día 17 de febrero de 1929, en las arenas de la plaza conocida como El Toreo (en Ciudad de México), hizo el paseíllo dispuesto a recibir la alternativa que había de otorgarle su padrino, el coletudo mejicano Luis Freg Castro; el cual, bajo la atenta mirada de su compatriota José Ortiz Puga y del coletudo valenciano Vicente Barrera y Cambra, que comparecieron en calidad de testigos, le cedió los trastos con los que había de dar lidia y muerte a estoque a un astado criado en las dehesas de Atenco.
Convencido de que un aspirante a gran figura del Arte de Cúchares tiene que haber triunfado en las principales plazas españolas, cruzó el Atlántico y revalidó su alternativa mejicana en el pequeño coso madrileño de Tetuán de las Victorias, el día 9 de junio de 1929, fecha en la que su compatriota Juan Espinosa Saucedo ("Armillita") le cedió la lidia y muerte de un burel perteneciente a la ganadería de Pérez Padilla, bajo la atenta mirada del diestro zaragozano Francisco Royo Turón ("Lagartito"), que hacía las veces de testigo. El día 21 de julio de aquel mismo año se vistió de luces para hacer el paseíllo en otra humilde plaza madrileña, la de Carabanchel Bajo, en donde intervino en la segunda y última corrida que toreó en suelo español.
Sin embargo, de regreso a su México natal gozó de varias oportunidades que le valieron el aprecio de la afición azteca, lo que le permitió seguir en activo durante muchos años, participando en festejos de no poco relieve. Así, v. gr., se halló presente el día 22 de noviembre de 1942 en una de las múltiples reinauguraciones de la histórica plaza de El Toreo, formando terna con los diestros mejicanos Jesús Solórzano Dávalos ("El Rey del Temple") y Luis Castro Sandoval ("El Soldado"), para enfrentarse con un encierro marcado con la señal de Piedras Negras. La tarde resultó trágica, ya que "El Soldado" sufrió una gravísima cornada que estuvo a punto de acabar con su vida.
Francisco Gorráez Arcante ("El Cachorro de Querétaro") se cortó la coleta en la capital mejicana el día 17 de febrero de 1946.
