Gómez Havelo, Pedro. Marqués del Labrador (1775-1852)
Abogado, poeta y político español nacido en Valencia de Alcántara (Cáceres) en 1775 y muerto en París en 1852.
Hijo de Pedro Gómez Patiño, regidor perpetuo de Valencia de Alcántara, y de Catalina Havelo (o Havela) Alvarado, estudió en Salamanca, graduándose en bachiller en Leyes el 22 de junio de 1782.
Como poeta, publicó en Salamanca en 1784 la comedia El amor hace milagros, y además escribió sus Poesías juveniles que dio a la estampa mucho después, en París en 1850.
El 8 de febrero de 1786 se licenció en Leyes (prestó los juramentos ante Juan Meléndez Valdés). El 17 de agosto de 1792 es nombrado oficial octavo de la primera Secretaría de Estado, y el 13 de noviembre de 1793, oidor supernumerario de la Audiencia de Sevilla, plaza que no era de su agrado y procuró no servir.
El 29 de agosto de 1798 es encargado de Negocios en Florencia, con la misión especial de consolar a Pío VI. A la muerte de éste es nombrado ministro plenipotenciario en Roma cerca de Pío VII. De Roma pasó a la corte de Etruria, y de allí por Milán, donde se entrevistó con Napoleón.
De regreso en España, acompañó a Fernando VII a Bayona, y después tuvo una nueva misión en Italia, sin que se sepa bien a qué autoridades obedecía: ¿a Fernando VII o a los imperiales? Parece ser que en Florencia se le conminó a reconocer a José Bonaparte; pero como se negase a hacerlo fue enviado a la fortaleza florentina, y después a Dijon, donde reside de octubre de 1808 a mayo de 1811. No se le trata nada mal: en esa fecha se le autoriza incluso un viaje a Nîmes. Francisco Javier Pérez elogia su conducta en Francia: ayudó a los prisioneros de Estado, con una cantidad cuádruple a la que recibían los tenientes generales, los cuales recibían mil reales mensuales; promovió las academias de Matemáticas y Táctica, y socorrió a cuantos se fugaban.
Después se presentó en Cádiz, donde ocupó la Secretaría de Gobernación de la Península, cargo del que dimitió en febrero de 1813 (según El Patriota, número 16, del 21 de julio de 1813, la dimisión se debió a un pique entre el embajador ruso y el conde de Fernán-Núñez en Londres). El Patriota, número 45, del 4 de diciembre de 1813, censura que se le hayan pagado 74.000 reales de la renta de Lotería, por los gastos que hizo en Florencia.
Participó en la redacción del decreto de 4 de mayo de 1814, por lo que se le nombró consejero de Estado, y el 26 de mayo de 1814 se le nombró representante de España en el Congreso de Viena -cuyas actas no firmó, según pretende por considerarlas contrarias a los intereses de España.
En 1815 es condecorado con la Gran Cruz de Carlos y nombrado embajador en Nápoles, en 1819-1820, en Roma, en 1829, de nuevo en Nápoles, en 1830, y otra vez en Roma, en 1831-1832. A la muerte de Fernando VII se inclinó por el carlismo (censurará más tarde al monarca por haber pactado con los franceses en 1823, con lo que deshonró la corona).
Además de las obras ya citadas publicó Correspondance ... avec M. Martínez de la Rosa, ministre des affaires étrangères à Madrid, au sujet d'un monstrueux abus de pouvoir de ce ministre (París, 1834), y sus Memorias con el título de Mélanges sur la vie privée y publique du Marquis de Labrador (París, 1849). No llegó a escribir la historia del Congreso de Viena, aunque tuvo la intención de hacerlo, pero se queja en sus Mélanges de que en un viaje a España en 1831 le fueron arrebatados los documentos.
Bibliografía
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AYMES, Jean-René: La déportation sous le Premier Empire. París, 1983.
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PÁEZ RÍOS, Elena: Iconografía hispana. Madrid, 1966. 5 vols.
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PALAU Y DULCET, Antonio: Manual del librero hispanoamericano. 2ª ed. Barcelona, 1948-1977.
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Patriota, n. 16, del 21 de julio de 1813 y n. 45, del 4 de diciembre de 1813.
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Redactor, ns. 603 y 619, 6 y 23 de febrero de 1813.
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VILLA-URRUTIA: España en el Congreso de Viena. 2ª ed. Madrid, 1928.
A. GIL NOVALES.
