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CineBiografía

Gable, Clark (1901-1960)

Clark Gable.

Actor estadounidense, cuyo nombre completo era William Clark Gable, nacido en Cádiz, (Ohio) el 1 de febrero de 1901, y muerto en Hollywood (California) el 16 de noviembre de 1960.

Vida.

Hijo único de un granjero y perforador de petróleo (su madre murió cuando tenía siete meses) abandonó los estudios en el segundo curso de Universidad para marchar, junto a un amigo, a Akrón, donde descubrió su vocación en las tablas al quedar extasiado tras una representación teatral. Trabajó para esta misma compañía como recadero, sin percibir retribución alguna, con la condición de que le dejasen ver la función cada noche. Esto le sirvió para conseguir algún pequeño papel, a veces con breves diálogos.

Con la ayuda del abuelo, viajó a Kansas City, donde se unió a una compañía teatral itinerante, la Jewell Players; pero, desgraciadamente, a su paso por Oregón, la compañía quebró. Una joven actriz se fijó en él, llevándole a otra compañía teatral dirigida por la también actriz Josephine Dillon, catorce años mayor que él y la que fue, a la postre, su primera esposa. Ésta le ayudó a perfeccionar su talento, le llevó a Hollywood y le facilitó sus primeros papeles en el cine, entre ellos La viuda alegre (1925), de Erich von Stroheim. No terminó de calar ni su matrimonio, ni su carrera delante de la cámara, por lo que se separó de ambas y volvió a la escena.

Tras una serie de pequeños papeles, debutó en Broadway el 7 de septiembre de 1928, con Machinal. Fue el primero de una cadena de éxitos como primer actor a finales de los años veinte. A principio de los treinta, y con el reclamo de los filmes sonoros, formó parte de una nueva generación de actores que cambió los oscuros escenarios de Nueva York por los soleados platós de rodaje en Hollywood. En 1931 hizo su primera aparición en una película sonora: fue un western de la Pathé titulado El desierto de nieve (1931), de Howard Higgin. Acto seguido, Lionel Barrymore aconsejó a la M.G.M. que le hiciera una prueba al joven actor.

Poco tiempo después, firmó un contrato con la prestigiosa compañía del león, donde permaneció hasta 1954, interpretando al partenaire perfecto de las grandes estrellas femeninas de la Metro, sobre todo Joan Crawford, con la que apareció en ocho ocasiones (quizá sean Amor en venta (1931), y Extraño cargamento (1940), sus mejores filmes juntos); Myrna Loy, con la que hizo siete películas, y Jean Harlow (Mares de China (1935), entre ellas); también se le pudo ver junto a Norma Shearer (Alma Libre, 1931), la divina Greta Garbo (Susan Lenox, 1931), Marion Davies (Caín y Mabel, 1936), Greer Garson (Aventura, 1945) o Gene Tierney (No me abandones,1953).

A pesar de su ascendente popularidad, Gable fue obligado a interpretar malos personajes en otras tantas malas películas. En cierta ocasión se negó a hacerlo. Como represalia, fue castigado por Louis B. Mayer, prestándole a la por entonces humilde Columbia para intervenir, junto a Claudette Colbert, en una comedia romántica menor. El filme, Sucedió una noche (1934), de Frank Capra, se convirtió, inesperadamente, en el primero en recoger los cinco Oscars principales en la misma edición (película, director -Capra-, actriz -Colbert-, guión adaptado -Robert Riskin- y el propio Gable, como mejor actor) y en una de esas cintas legendarias que el tiempo no ha conseguido envejecer ni un sólo de sus fotogramas.

Plena de secuencias antológicas (el auto-stop, la aparición de Gable sin camiseta en el dormitorio, las murallas de Jericó, etc) Sucedió una noche convirtió a Gable en una verdadera estrella, por lo que la Metro se apresuró a rescatarle para asignarle un papel en un filme mayor, el de Fletcher Christian en Rebelión a Bordo (1935), de Frank Lloyd. La película obtuvo un Oscar al mejor filme del año y Gable tuvo como compañero de reparto al inmenso Charles Laughton, en el papel del despótico capitán Bligh, en lo que sería el motín más famoso de la historia del cine, versionado en alguna ocasión más.

Con tales éxitos en su haber, Gable ganó un gran prestigio en la industria y la Metro empezó a seleccionarle pocos papeles cada año. En 1936, Gable participó en una producción mítica: San Francisco, de W.S. Van Dyke II, lujosa producción donde el dúo Gable y Spencer Tracy están más que memorables. La canción “San Francisco”, cantada por Jeanette MacDonald, y un terremoto perfectamente escenificado hicieron el resto.

En 1939, dos hechos marcaron la vida y la carrera de Gable. Su reinado en el trono de Hollywood se vio realzado por su historia de amor, y después matrimonio, con la actriz Carole Lombard (una de las mujeres más bellas que se ha puesto delante de las cámaras). El otro hecho, claro, fue la interpretación de Rhett Butler en Lo que el viento se llevó (dirigida por Victor Fleming, si bien varios directores, entre ellos George Cukor o Sam Wood, tuvieron algo que ver en el resultado final del filme).

Lo que hubiera podido ser simplemente una producción lujosa más, se convirtió en una obra excepcional. Drama histórico y crónica de la guerra de Secesión, estudio de caracteres, de una mujer pasional, retrato de un aventurero (Gable) sumergido en una América tumultuosa, demasiado quizá para él que es un hombre tranquilo, un hombre único (capaz de sacar a bailar a Scarlett O’Hara ante el estupor del respetable que no tolera que una mujer de luto sea la encargada de iniciar el baile), una reflexión sobre la pareja, el amor; Lo que el viento se llevo es un filme multiforme, modelo de producción, de empresa colectiva, un colosal, paradigma de la industria hollywoodiense. Y multitud de escenas para el recuerdo, como la primera aparición del actor bajando la gran escalinata de la mansión, escena por la que fue admirado por millones de mujeres; o ese silbido que lanza Gable, tras haber sido testigo directo del carácter de Scarlett, jarrón y pared incluidos.

En 1942, la vida de Gable sufrió un gran revés: Carole Lombard, su esposa, murió en un accidente de aviación en enero de ese año. Decidió entonces dar la espalda a su carrera cinematográfica y se alistó en la Army Air Corps. Terminado el conflicto bélico, tras dos años de condecorado servicio en combate, Gable volvió al cine en 1945, con su imagen, de héroe masculino por excelencia, reforzada. Pero su carrera en la Metro a partir de aquí rara vez no sobrepasó la rutina, producciones sin ningún tipo de aliciente, excepto por su presencia en ellos.

No paró en ningún momento de participar en al menos una película al año, pero no consiguió recuperar el status del que disfrutó en los años treinta. Sólo Más Allá del Misouri (1951), de William A. Wellman, se salió de la normalidad. Gable interpreta, aquí relajadamente, a ese trampero dividido entre su familia y sus amigos.

Pero cuando la Metro decidió hacer un remake de Tierra de pasión (1932), de Victor Fleming, la compañía eligió a Ava Gardner para reemplazar a Jean Harlow y a Grace Kelly por Mary Astor y, por supuesto, se eligió a Clark Gable. El filme se tituló Mogambo (1953), y lo dirigió John Ford.

En 1954, su contrato con la Metro expiró y no fue renovado, lo que le liberó de productos no deseados. Eligió lo que quiso y deseó. Tuvo buen ojo e intervino en tres buenas películas, todas dirigidas por su amigo Raoul Walsh, que le devolvieron parte del prestigio perdido: Los implacables (1955), Un rey para cuatro reinas (1956) y La esclava libre (1957). Hasta que, en 1961, John Huston le dio la oportunidad de participar en Vidas rebeldes, concebida, casi, como el último suspiro ofrecido por unos actores moribundos en su última aparición sobre el escenario: fue el último filme completo de Marilyn Monroe, uno de los últimos de Montgomery Clift y, por supuesto, el último de Clark Gable.
Rey indiscutible de Hollywood, Clark Gable fue una de las diez estrellas más taquilleras de Hollywood entre 1932 y 1943 y entre 1947 y 1949, lográndolo de nuevo en 1955. Cierto es que la elegante imagen de Rhett Butler en Lo que el viento se llevó ha permanecido indeleblemente asociada al nombre de Clark Gable, pero antes, bastante antes, Gable (con la ayuda del publicista de la Metro Howard Strickland) ya había patentado un característico personaje en la pantalla, como el viril y pícaro descarado, cuya brusca fachada difícilmente consiguió ocultar su natural encanto y amabilidad.

Un rey que, a principio de los años treinta, recurrió a la cirugía estética para intentar que sus enormes orejas se acercasen todo lo posible contra el cráneo. Pero sus orejas formaban parte de su personalidad, eran parte del mito. Esas orejas que, en Mogambo, hicieron exclamar a Ava Gardner al ver un pequeño elefante: “¡Vaya! ¿Pero a quién me recuerdan esas grandes orejotas?” Gable se limitó a sonreír, pícaro, orgulloso, como buen rey.

Filmografía.

Cortometrajes:

1925: The pacemakers.
1931: Christmas party (Jackie Cooper’s Christmas).
1942: March of dimes film.
1943: Hollywood in uniform.
1944: Aerial gunner; Be careful; Wings up; Combat America.

Largometrajes:

1924: La frivolidad de una dama; White Man.
1925: La viuda alegre; North Star; Días de colegial; Declasee.
1926: The Johnstown Flood.
1931: El desierto de la nieve; Amor en venta; Susan Lennox; De pura sangre; Danzad, locos, danzad; Enfermeras de noche; La pecadora; Alma libre; El dedo acusador; Los seis misteriosos; Salvada; Titanes del cielo.
1932: Casada por azar; Polly la chica del circo; Tierra de pasión; Extraño intervalo.
1933: Alma de bailarina; Tú eres mío; Vuelo nocturno; La hermana blanca.
1934: Sucedió una noche; Encadenada; Cuando el diablo asoma; El enemigo público nº 1; Hombres de blanco.
1935: El escándalo del día; La llamada de la selva; Mares de China; Rebelión a bordo.
1936: San Francisco; Cain y Mabel; Love on the Run; Entre esposa y secretaria.
1937: Parnell; Saratoga.
1938: Piloto de pruebas; Sucedió en China.
1939: Lo que el viento se llevó; Idiot’s Delight.
1940: Fruto dorado; Camarada X; Strange cargo.
1941: Quiero a este hombre; They met in Bombay.
1942: Somewhere I’ll Find You.
1945: Aventura.
1947: Los vendedores.
1948: Sublime decisión; La rival.
1949: ¡Hagan juego!
1950: Key to the City; Indianápolis.
1951: Más allá del Missouri; Callaway Went Thataway.
1952: Estrella del destino.
1953: Mogambo; No me abandones.
1954: Brumas de traición.
1955: Cita en Hong Kong; Los implacables.
1956: Un rey para cuatro reinas.
1957: La esclava libre.
1958: Torpedo; Enséñame a querer.
1959: No soy para ti.
1960: Capri.
1961: Vidas rebeldes.

Producciones con secuencias de sus filmes o grabaciones de época:

1988: Going Hollywood: The War Years.

Bibliografía.

  • EAMES, John Douglas: The MGM story. Nueva York. (Crown. 1976).

Autor

  • J.C. Paredes