Enrile y Alcedo, Pascual (1772-1836).
Militar español, nacido en Cádiz el 13 de abril de 1772 y fallecido en Madrid el 6 de enero de 1836. Poseía, entre otros muchos títulos, las grandes cruces de Isabel la Católica(1816), San Hermenegildo y San Fernando.
Hijo de Jerónimo Enrile y María de la Concepción Alcedo, marqueses de Casa Enrile, hizo sus primeros estudios en el colegio Clementino de Roma. Sentó plaza de guardia marina en El Ferrol, el 10 de junio de 1788, comenzando inmediatamente sus navegaciones y luchas por Europa y América. En 1802 hizo un viaje de estudios por Europa, y formó parte en 1803 de la comisión francesa que iba a medir el meridiano de París e Ibiza.
Capitán de fragata en 1808, se negó a reconocer al Intruso (JOSE I BONAPARTE, Rey de Nápoles y de España), por lo que fue preso en Montjuich, de donde se escapó, haciendo toda la Guerra de la Independencia. En 1814 fue enviado en comisión al ejército austríaco y ascendió a brigadier el 24 de febrero de ese mismo año.
Fue designado jefe de la escuadra de cuarenta y dos transportes protegidos por dieciocho buques de guerra que debía conducir a América el Ejército Expedicionario de Tierra Firme. Era el primer contingente armado que España enviaba contra los rebeldes de sus colonias, ya que antes siempre había necesita todos sus efectivos en la campaña europea. Estaba formado por 10.006 hombres y 291 jefes y oficiales bajo las órdenes del general Pablo Morillo. La flota zarpó de Cádiz el 17 de febrero de 1815 con un objetivo secreto descrito en un sobre lacrado que debía abrirse en alta mar. Cuando Morillo lo hizo supo que iba destinado a Tierra Firme y temió motines o deserciones, ya que la tropa iba convencida de que se dirigían al Río de la Plata y no a Venezuela y Colombia, de cuyos climas insalubres todos recelaban. El general ordenó por ello que todas las embarcaciones desfilaran por la popa del buque almirante San Pedro de Alcántara, dando los vivas de rigor.
La flota llegó a Margarita el 15 de abril de 1815 e inició un despliegue por la costa venezolana, pasando luego a Cartagena para emprender la pacificación de Colombia. Enrique acompañó a Morillo en todas las acciones de esta reconquista como su jefe del Estado Mayor y tuvo una actuación decisiva en muchas de sus acciones, tal como la misma toma de Cartagena de Indias, que se logró el 6 de diciembre tras 106 días de asedio. Entró con Morillo en Santa Fe de Bogotá (6 de mayo de 1816) y participó en la gran represión contra los patriotas. En noviembre de dicho año Morillo decidió emprender la gran campaña venezolana y abandonó Bogotá, momento en que Enrile consideró apropiado para regresar a España.
Enrile se hizo famoso por las sentencias de muerte que firmaba, entre ellas la de Francisco José Caldas, a la que puso la apostilla de "España no necesita de sabios", frase desgraciada porque el propio Enrile no era precisamente un inculto.
En 1817 salió en persecución de Mina el Mozo pero no logró alcanzarlo y regresó a la península, llegando a Cádiz el 7 de mayo de 1817. Quedó de cuartel en Pamplona y en abril de 1820 renunció por enfermedad al ascenso de jefe de Estado Mayor.
Durante todo el Trienio perteneció a la junta Consultiva de Guerra, y a la Comisión de Generales en 1823. Acompañó en 1823 al rey a Sevilla, donde permaneció hasta 1825 al ser rehabilitado en su cargo. En 1826 fue nombrado segundo cabo de Filipinas.
Llegó a Manila el 8 de octubre de 1828. Tras desempeñar varios cargos de relieve, en 1830 fue nombrado capitán general de Filipinas, como sucesor de Mariano Ricafort. Pascual de Enrile se posesionó de su cargo en diciembre del mismo año e inició un buen mandato hasta marzo de 1833, caracterizado por la mejora de las comunicaciones y del comercio y la exploración de recursos económicos. Realizó numerosos viajes por la isla de Luzón para estudiar sus caminos en compañía de su pariente el ingeniero José María Peñaranda, de lo que vino a resultar el establecimiento del servicio de Correos. Cuidó también las comunicaciones entre las islas y estableció el libre comercio de la Capitanía con la región comprendida entre el Cabo de Buena Esperanza por el oeste y las islas Sandwich por el este. En cuanto a la búsqueda de nuevos recursos dio como resultado el hallazgo de caucho en Caraga, provincia de Davao. Se ocupó además de las misiones y envió a la Biblioteca Nacional de España una gran colección de gramáticas y vocabularios de las lenguas indígenas.
Llegó a Cádiz el 23 de julio de 1833, y aún fue prócer del Reino y vocal de la Junta de Gobernación de Ultramar.
Bibliografía
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A. Gil Novales / M.L.S.
