Egenau Moore, Juan (1927-1987).
Escultor chileno, nacido en Santiago el 24 de febrero de 1927 y fallecido en la misma ciudad el 22 de abril de 1987, cultivó diversas técnicas escultóricas y fue uno de los representantes de la disciplina más destacados de su país, tanto por su labor artística como docente.
Nacido en el seno de una familia acomodada, Egenau estudió biología en la escuela secundaria e ingresó en la Universidad Católica en 1947 para estudiar arquitectura, pero su vocación artística le hizo abandonar estos estudios tras completar sólo un curso. En la Escuela de Bellas Artes de Santiago se formó en pintura, dibujo, mural y grabado, obteniendo la graduación en 1952, y a continuación pasó a estudiar escultura en la Escuela de Artes Aplicadas de la capital chilena, centro del que fue nombrado profesor ayudante en 1956. En 1959 recibió una beca de la Universidad de Chile para perfeccionarse en joyería y orfebrería en la Escuela Porta Romana de Florencia (Italia); entre 1962 y 1967 se especializó en esmalte sobre metal y joyería en la Escuela chilena de Artes Aplicadas. En 1966 viajó a Estados Unidos, donde asistió a la IV Conferencia Internacional de Fundición Artística y al año siguiente recibió una beca Fullbright para realizar un curso sobre esta técnica en la Escuela de Diseño de Rhode Island.
Licenciado en arte con una mención en escultura, desde 1978 hasta su muerte, producida a consecuencia de un cáncer, fue catedrático de la disciplina en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Chile, centro que posee una sala de exposiciones que lleva su nombre. Egenau realizó exhibiciones de su obra tanto en Chile, donde algunas de ellas forman parte de la colección del Museo Nacional de Bellas Artes, como en otros países, y es especialmente reconocido en toda América.
Aunque en sus inicios cultivó la pintura y el grabado, Egenau alcanzó notoriedad como escultor, faceta a la que llegó después de pasar por el esmalte y la orfebrería. La influencia ejercida sobre él por la escultora Marta Colvin, junto con la formación recibida en la técnica de la fundición durante su estancia en Estados Unidos, fueron determinantes en este sentido, de modo que su interés pasó a centrarse a partir de entonces en la representación de las formas y los volúmenes, dentro de un lenguaje conceptual que penetra en su esencia. Sus obras escultóricas suelen ser figuras humanas en las que, al menos en una primera etapa, destaca la simplicidad, pero que paulatinamente se fragmentan en la búsqueda de una expresión propia de la forma, llena de fuerza expresiva y belleza plástica, que es en definitiva una reflexión sobre el hombre. En una alusión a la fragilidad de lo humano, reviste los torsos y cabezas de corazas, goznes y cerraduras, elementos distintivos de su obra. Egenau trabajó con metales como el aluminio, el bronce, el cobre y el hierro, y en sus últimos años (1984-1986), regresó al trabajo figurativo y de orfebre con la elaboración de una serie de esculturas, Dimentimiento, que representan caballos.
Juan Egenau recibió numerosos premios y galardones a lo largo de su carrera, entre otros, el Primer Premio de Escultura del Salón Oficial de Santiago (1963), el Primer Premio de la III Bienal de Escultura (1967), el Gran Premio de Escultura de la Universidad de Chile en el Certamen Nacional Chileno de Artes Plásticas (1976) y el Gran Premio Bienal Internacional de Arte de Valparaíso (1979).
