Cortada y Sala, Juan (1805-1868).
Novelista e historiador español, nacido en Barcelona, en el año 1805, y muerto en la localidad de Sant Gervais de Cassoles (Barcelona), en el año 1868.
Cursó estudios de Derecho en las universidades de Tarragona, Cervera y Zaragoza, obteniendo la licenciatura de Jurisprudencia, con tan sólo veinte años. Tres años más tarde, fue nombrado agente fiscal de la Audiencia de Barcelona, cargo al que renunció en el año 1840 para dedicarse exclusivamente a su gran pasión, la literatura, actividad que compaginó con colaboraciones periodísticas en el Diario de Barcelona y en El Telégrafo, en los que firmó siempre con dos seudónimos que popularizó enseguida: Aben Abulensa y Benjamín, respectivamente.
Su primer trabajo dentro del mundo de la literatura lo realizó en el año 1834, con una traducción al catalán de un famoso poema italiano, La novia fugitiva. El resto de su producción literaria e histórica fue escrita por el autor en castellano. Sin duda alguna, la aportación más importante de Joan Cortada en este campo fue la introducción del modelo romántico, muy en boga en su época, en la novela histórica, además de su predilección por situar la trama novelística en ambientes y situaciones totalmente catalanes. En el año 1841, Joan Cortada animó con especial énfasis el nuevo concurso poético organizado por la prestigiosa Academia de Bones Lletres de Catalunya, así como también sentó nuevas bases teóricas para resucitar los antiguos Juegos Florales.
Desde el año 1840, su cada vez mayor interés por los estudios históricos, cristalizó definitivamente, tras conseguir un puesto de maestro de dicha especialidad en un instituto de enseñanza media y en la propia Universidad de Barcelona. Joan Cortada se propuso como objetivo histórico la redacción de una historia de España que acabase con el planteamiento unilateral que se venía practicando hasta la fecha en las obras generales y de síntesis de dicha especialidad, en las que tan sólo se escribía sobre Castilla, relegando u omitiendo lo acontecido en la corona de Aragón. No obstante, Joan Cortada imprimió a sus obras históricas una clara sensibilidad netamente catalana y liberal.
También se dedicó a la actividad política, y fue elegido diputado por Tarragona por las filas liberales, en el año 1843. Muy aficionado a las antigüedades (especialmente de sellos), de las que llegó a reunir una notable colección, perteneció a un número amplio de instituciones, como las Sociedades Económicas de Amigos del País de Barcelona, Zaragoza y Palma de Mallorca, la Academia de Bones Lletres de Barcelona, la Real Academia Española, la Academia Numismática de Madrid y la Sociedad Arqueológica de Tarragona. De sus principales obras hay que destacar las siguientes: Historia de España (1841-42); Utilidades del estudio de la Historia (1848); Cataluña y los catalanes (1860); Proceso instruido contra Juan Sala y Serrallonga (1868).
CHG.
