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HistoriaBiografía

Capodistrias, Juan Antonio (1776-1831)

Político y diplomático griego nacido en Corfú en 1776 y muerto en Naplia el 9 de octubre de 1831.

Nacido en el seno de una familia ennoblecida de la Jonia, su padre había representado a las islas en una negociación entre Inglaterra, Turquía y Rusia, que condujo al tratado de marzo de 1800 que las organizó como una república, bajo el protectorado conjunto ruso-turco. El mismo llevaba el título de conde.

Estudió Medicina en Padua y Venecia. Firmemente convencido de que las islas jónicas podían ser el fermento para la reconstrucción de Grecia, de 1800 a 1807 fue miembro del consejo que controlaba la administración jónica. En 1803 las islas quedaron bajo el protectorado único de Rusia, y fue nombrado director general del poder ejecutivo, y en seguida ministro de Asuntos Extranjeros, Marina y Comercio. Cuando en Tilsit Alejandro I aceptó poner las islas bajo dependencia francesa, sufrió una decepción; pero creyendo que esta parte del acuerdo no podría llevarse a la práctica, continuó confiando en Rusia.
Rechazó servir a Francia, y en 1808 recibió una condecoración rusa y un puesto en el servicio exterior de Rusia. Llegó a San Petersburgo en enero 1809, y en abril fue promovido a consejero de Estado. Teniendo poco trabajo, pasaba las horas en la biblioteca del Hermitage.
En septiembre de 1811 fue enviado a la embajada rusa en Viena, donde escribió varias Memorias, que le valieron ser enviado por el zar a Bucarest, como director de la oficina política del Danubio. En 1812 y 1813 estuvo intensamente ocupado en la cuestión de las relaciones rusas con los pueblos cristianos de Oriente, y después de la batalla de Leipzig, octubre de 1813, Alejandro I lo llamó a su lado, y le encargó las negociaciones sobre el futuro de Suiza, tarea que le llevó al Congreso de Viena, donde logró que las Islas Jónicas no cayeran bajo la influencia austríaca. Se llegó a un compromiso: serían una república, bajo protectorado británico. Pero el tratado del 15 de noviembre de 1815 no dejó claras las cosas, y para su decepción los ingleses no se preocuparon del futuro de Grecia, sino que trataron a las Islas como una colonia más.
Fundó en Viena una Sociedad Filomusas, para la regeneración moral e intelectual del pueblo griego, pero las suspicacias de Metternich le obligaron a trasladarla a Munich. En 1816 fue nombrado, junto con Nesselrode, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia. Gran cruz de Carlos III, 1817.

En cuanto comenzó la revolución griega en 1821, los líderes de la independencia buscaron su cooperación, comenzando así una larga relación, que sólo terminó con su asesinato. En 1822, por diferencias con Nesselrode, y muy atacado por Metternich, presentó la dimisión, pero el zar no se la admitió al principio. Finalmente, tras una entrevista con Alejandro, en septiembre de 1822 abandonó San Petersburgo, viajó por Alemania y Suiza, y en diciembre se estableció en Ginebra. En adelante se sumió en las complejidades de la política griega, aunque todavía en 1826 quiso volver al servicio ruso.
En 1827 se le ofreció la presidencia de Grecia, y realizó una serie de viajes para tantear diplomáticamente el terreno. En noviembre de 1827 se encontraba todavía en Turín, no llegando a Grecia hasta 1828. En enero formó gobierno, que duró hasta mayo de 1829, aunque siguió cuando el príncipe Leopoldo de Sajonia-Coburgo fue propuesto para rey de Grecia, con el que entabló difíciles negociaciones. Se le acusaba de ambición, las potencias no se fiaban de él, y lo que es peor muchos griegos tampoco. La extrema discordia, que presidió el nacimiento de Grecia como estado independiente, hizo que muriese a manos de Constantino y Jorge Mavromichalis. De sus asesinos, el primero quedó muerto en el acto, el segundo se refugió en casa del residente francés, quien le entregó a las autoridades y fue ejecutado el 22 de octubre.
A pesar de una leyenda tenaz, se va imponiendo el criterio de que fue un gran patriota griego, además de un experto diplomático.

A. GIL NOVALES.

Autor

  • Gil Novales