Cámara, Helder (1909-1999).
Religioso católico brasileño y arzobispo de Olinda y Recife, nacido en Fortaleza, ciudad del estado de Ceará, en el noreste de Brasil, el 7 de febrero de 1909, y fallecido el 27 de agosto de 1999 su humilde casa de Refice. Conocido internacionalmente como "el profeta del evangelio de la liberación", entre otros calificativos que recibió a lo largo de su vida, fue numerosas veces nominado al Premio Nobel de la Paz por su destacada labor en pro de los débiles y marginados.
Helder era el penúltimo de una familia de trece hermanos, de los cuales nueve murieron por infecciones y desnutrición. El nombre del sacerdote brasileño, que según sus palabras, no aparece en el santoral, lo eligió su padre Joao Cámara, periodista y crítico teatral, que buscando en el diccionario seleccionó para su hijo el nombre de una ciudad portuaria holandesa, para que le trajese suerte.
Ingresó en el seminario con catorce años y el 15 de agosto de 1931 fue ordenado sacerdote, desarrollando una intensa actividad pastoral, que desde un principio orientó en pro de los más desfavorecidos. El 3 de marzo de 1952 fue consagrado obispo auxiliar de Río de Janeiro con título de obispo de Salde, y desde ese puesto participó, ese año, en la fundación de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil, que presidió durante más de una década.
En Río de Janeiro, Dom Helder como popularmente se le conocía, descubrió la miseria de los habitantes de las "favelas", los suburbios brasileños a los que en una ocasión acompañó en una visita a un monseñor, que con el tiempo sería el Papa Pablo VI.
En 1955 fue promovido a arzobispo titular de la misma diócesis de Salde y como tal participó en el Concilio Vaticano II (1962-1965) en la redacción del decreto sobre apostolado de los seglares, solicitó la restauración del diaconado y fue el animador de la Comisión de Investigación de la Iglesia de los Pobres.
El 12 de marzo de 1964, Pablo VI lo designó arzobispo de Olinda y Recife, una de las archidiócesis más pobres, en el Estado de Pernambuco, noreste de Brasil. Ya desde su llegada al arzobispado de Olinda y Recife, Helder Cámara asumió una actitud que, a pesar de los conflictos suscitados, nunca abandonó. Ante las numerosas personas que salieron a recibirlo al aeropuerto, el nuevo arzobispo dijo: "que nadie se extrañe de verme tratar con gentes tachadas de comprometedoras y peligrosas, de izquierda y de derecha, encumbradas o de oposición, antirreformistas o reformistas, antirrevolucionarias o revolucionarias".
Conocido internacionalmente como "el profeta del evangelio de la liberación", el "abogado de la iglesia de los pobres" o "peregrino de la paz", Helder Cámara destacó por su oposición a la dictadura militar, que el 31 de marzo de 1964, pocos días después de su nombramiento como arzobispo, derrocó al gobierno constitucional del presidente Goulart. Precisamente, desde esa fecha, el arzobispo persistió en su condena pública a la represión, tortura y violación de los derechos humanos e insistió en sus prédicas en favor de una justa redistribución de la riqueza, lo que le ocasionó no pocos problemas, además de acusaciones oficiales de "subversivo" y "comunista". Su casa fue ametrallada y él fue víctima de varios atentados.
Helder Cámara participó en la creación de la Conferencia Episcopal Latinoamericana (CELAN) y en su diócesis contribuyó a la formación de decenas de comunidades de base. Precisamente, el 12 de octubre de 1969, coincidiendo con el centenario del nacimiento de Mahatma Gandhi, puso en marcha en Brasil y en otros países del continente el movimiento Presión Moral Liberadora, que con el lema "Acción, Justicia y Paz" aspiraba a conseguir la transformación de las estructuras sociales y económicas de América Latina a través de la lucha moral, nunca mediante la violencia, lo que suscitó no pocas reacciones contrarias por parte de algunos obispos brasileños.
Sin embargo y a pesar de las dificultades, el controvertido Helder Cámara no dejó de representar con gran carisma la postura de una iglesia comprometida con los pobres, tarea que continuó a partir del 7 de febrero de 1984, aunque ya como jubilado. En esa fecha presentó su renuncia al Papa Juan Pablo II en cumplimiento de la norma del Concilio Vaticano II que instituyó el retiro de los prelados tras cumplir los 75 años. Fue sustituido en su puesto por José Cardoso Sobrinho.
Propuesto en cuatro ocasiones para el Premio Nobel de la Paz, su trayectoria humana ha sido reconocida en numerosas ocasiones. El 11 de febrero de 1974 recibió en Oslo el Premio del Pueblo para la Paz, instituido para él como protesta del pueblo noruego tras la adjudicación del Nobel de la Paz a Kissinger y a Lé Duc Tho. Asimismo, está en posesión del premio Martin Luther King de la paz, concedido en 1970, y el de la Fundación Niwano, instituido por los budistas japoneses, y otorgado en 1983 en Tokio por su destacada labor en pro de los débiles y marginados.
Doctor honoris causa por diversas universidades y miembro de numerosas organizaciones internacionales de derechos humanos, escribió varios libros, entre los que destacan: Las conversaciones de un obispo, El desierto es fértil, La revolución en la paz, Evangelio de Dom Helder y Mil razones para vivir, entre otros. Cámara era, además, el autor de la parte literaria de la Sinfonía de los dos mundos, obra que realizó con el músico suizo Pierre Kaelin y que resume el pensamiento del obispo brasileño en torno a los derechos humanos.
En agosto de 1999 fue internado en el Hospital Real Portugués a consecuencia de una infección en la vías urinarias. Tras ser dado de alta, el 27 de agosto de 1999 falleció de una insuficiencia respiratoria mientras descansaba en su casa de Refice. Helder Cámara fue enterrado en la catedral de la ciudad de Olinda, junto a los restos del obispo José Lamartine, que durante muchos años fue su auxiliar, como había solicitado.
