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Ingeniería y tecnologíaBiografía

Buigas, Carlos (1898-1979).

Ingeniero electricista español, nacido en Barcelona el día 18 de enero de 1898 y muerto en la misma ciudad el 27 de agosto de 1979. Su principal obra es el diseño y la realización del conjunto de fuentes luminosas que inauguraron la Exposición Internacional de Barcelona de 1929.

Su padre fue el arquitecto y administrador del castillo de Cerdanyola, por lo que en su niñez pasó largos periodos en dicha ciudad. En 1905 marchó con su familia a Montevideo, donde cursó sus estudios primarios y parte de la enseñanza secundaria. EN 1910 regresó a Barcelona donde completó sus estudios secundarios. En 1916 ingresó en la escuela de Ingenieros Industriales y mientras cursaba sus estudios pasó a formar parte de la oficina técnica de la Exposición de Barcelona. Un año después su tía, Concepción Buigas, le invitó a pasar unos días en la torre de la Avenida de Cataluña de Cerdanyola y allí llevó Carlos Buigas una intensa vida social en los improvisados bailes de los salones y posteriormente en el casino fundado por don José María Roviralta, que le granjeó entre los conocidos fama de extravertido y simpático y conocedor de multitud de muchachas del lugar. Ya en este año inventó un dispositivo óptico para iluminar las penumbras del entresuelo en que el propio Carlos Buigas vivía en Barcelona, que consistía en un espejo parabólico que canalizaba los rayos solares por los patios de las casas y aportaba un sistema automático que aseguraba el constante enfoque con respecto al sol del dicho espejo parabólico o de otro electromagnético que entraría en funcionamiento cuando el cielo se nublase.

Hasta 1920 Carlos Buigas se mantuvo trabajando entre Barcelona y Cerdanyola, pero ese año, tras el fallecimiento de su hermano Cayetano, en Sant Cugat, se hospedó temporalmente en casa de su tío Luis Sans y más tarde alquiló una casa en el bosque en las laderas de la sierra de Can Ferola, cerca de Sant Cugat, donde trabajó sin descanso para afrontar el sostenimiento de su propio hogar y los gastos de sus frecuentes viajes a Barcelona. En 1922, tras la muerte de su padre, alquiló una casa de veraneo en Cerdanyola en la que se hospedó en los meses de verano y otoño en adelante durante años. En 1925 un desengaño amoroso inclinó a Buigas a sentirse obligado por sus tareas de hijo y en adelante dedicarse plenamente a su labor creadora.

En 1925 Buigas obtuvo el título de ingeniero y al año siguiente se le confirió la jefatura del Servicio de Fuentes Luminosas e Iluminaciones Espectaculares de la Exposición de Barcelona, a pesar de contar con poca experiencia práctica, apenas tres fuentes luminosas en Montjuic. Por la labor que realizó ganó fama mundial. Las primeras instalaciones, realizadas en el palacio de Pedralbes (1926) fueron seguidas por la inauguración de los juegos de agua y luz de la Exposición Internacional de Barcelona en Montjuic en 1929. El espectáculo constaba de más de 80 fuentes luminosas independientes, perfectas desde el punto de vista técnico y espléndidas como expresión artística y proporcionó a Buigas el prestigio suficiente para que le fueran encargadas más de 560 fuentes luminosas e iluminaciones decorativas en las exposiciones internacionales de París (1937), Lieja (1939), Lisboa (1940), Roma (1953) y Bruselas (1958) y en otros lugares como la Cuevas del Drac (Mallorca, 1950), la Plaza del Mar de Alicante (1960), Montjuic (1954-62), etc.

Pero el trabajo de Carlos Buigas no se limitó a la iluminación y la construcción de fuentes luminosas decorativas. Además realizó una ingente labor como inventor que en algunos casos nos muestran un Buigas adelantado a su época. Estos son algunos de sus inventos: un hidroavión torpedero (1914), que 25 años después fue construido por otra persona; un dispositivo mecánico para extraer de la playa arena para la construcción (1914); minirreceptores para la localización del personal en las fábricas (1922); un sumergible unipersonal, propulsado por un motor neumático y provisto de dos torpedos, que en la Segunda Guerra Mundial emplearon italianos y japoneses (1932); un torpedo teledirigido que se orientaba por ultrasonidos emitidos por él (1931-33); un sistema de cambio de marchas automático para automóviles; un dispositivo para detectar objetos a través de la niebla; Un dispositivo para farolas de alumbrado público consistente en globos fluorescentes en sí mismos; tres dispositivos antideslumbrantes para los faros de los coches (1939), etc.

JMMT

Autor

  • Juan Miguel Moraleda Tejero