Bru, Roser (1923-2021).
Artista plástica chilena de origen español, nacida en Barcelona el 15 de febrero de 1923 y fallecida en Santigo de Chile el 26 de mayo de 2021. Destacó como pintora, dibujante y grabadora dentro de la tendencia de la Nueva Figuración chilena, en el marco del cual su obra ha obtenido el reconocimiento internacional y ha sido expuesta en algunos de los más prestigiosos museos del mundo.
Roser Bru recibió educación primaria en la prestigiosa Escuela Montessori y en el Instituto Escuela de la Generalitat de Barcelona. Como tantos otros niños tuvo que emigrar tras la entrada de las tropas franquistas en la capital catalana, en 1939, siendo Chile su lugar de destino definitivo después de un corto periodo de internamiento en Francia. Estudió artes plásticas en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Santiago, donde conoció de cerca la obra de Pablo Burchard, e interesada por el grabado, en 1957 pasó a estudiar esta técnica en el Taller 99 de Nemesio Antúnez. Ese mismo año llevó a cabo su primera exposición individual en la Galería Beaux-Arts de Santiago, centro en el que volvió a exponer dos años más tarde. Durante esta época regresó a España para conocer in situ la obra de artistas catalanes como Tàpies. En 1964 fue nombrada profesora de dibujo y pintura de la Escuela de Arte de la Universidad Católica, función que desempeñó hasta 1968, y de nuevo a partir de 1989 en calidad de profesora invitada. Algunas de sus creaciones forman parte de las colecciones permanentes del Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago, del Museo Metropolitano de Nueva York, del Museo de Arte Moderno de la misma ciudad, del Museo Saatliche de Berlín y del Ayuntamiento de Barcelona, entre otros.
Artista de un estilo muy personal, su obra se basó en la originalidad y sencillez de la composición, construida esencialmente alrededor de la técnica del dibujo. El propósito era elaborar un nuevo lenguaje para la recreación figurativa de viejos temas, personajes y motivos pictóricos en una singular recuperación de la memoria, concepto fundamental de su arte. Lo fundamental es que esta recuperación se hace desde un punto de vista nuevo, en cierto modo transgresor de aquello que intenta representar, empleando todos los recursos que considera necesarios, en su caso la combinación de varias técnicas: pintura, dibujo y grabado. La sencillez de sus obras queda plasmada en el ahorro de detalles para centrar toda la atención en la figura, mientras una particular sensación de intemporalidad, que el artista es capaz de crear acertadamente, lo invade todo.
Además de los centros ya citados, su obra se ha expuesto en: Galería Tus de México D.F. (1957); Sala de Exposiciones de la Universidad de Chile (1960 y 1968); Sala Gaspar de Barcelona (1961 y 1963); Galería Carmen Waugh de Santiago (1963, 1966 y 1969); Galería Pecanins de México D.F. (1965-1966 y 1981); Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro (1964); Galería Saltar I Parar (1971), Pecanis (1973 y 1975) y Adri (1976) de Barcelona; Museo de la Solidaridad de Santiago (1992), y Centro Cultural de España en la misma ciudad (1993). También ha llevado a cabo muestras y retrospectivas con los títulos El deterioro y la memoria (1974), Kafka y nosotros (1977), Memoria in memoriam (1979), Olvidos y memorias (1982), Roser Bru, una mirada desde afuera (1985), y Presencias-Ausencias (1989). Entre otros premios, obtuvo el Primer Premio de Dibujo y Grabado (1958) y de Pintura (1960) del Salón Oficial de Santiago, el Premio Osvaldo Goeldi en la II Bienal Iberoamericana de Grabado (1965), el Premio Club de la Estampa de Buenos Aires (1968), y el Gran Premio del Salón de la Gráfica de la Universidad Católica de Chile.
