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LiteraturaBiografía

Borragán, María Teresa (s. XX).

Escritora española del siglo XX, de la que apenas se recuerdan otros datos que los referidos a las obras teatrales que, en la actualidad, pueden atribuirse con certeza a su autoría. A pesar de este injusto olvido, fue una figura distinguida en el teatro español femenino del primer tercio del siglo XX, en el que llegó a ser directora y empresaria del Teatro Martín de Madrid durante la temporada de 1923-1924.

Su primera pieza dramática, titulada Ilusión, fue llevada a las tablas el día 9 de septiembre de 1917, en el Teatro Principal de Palencia, de donde pasó, a partir del 9 de octubre, al Circo de Vitoria. Se trata de una comedia escrita en prosa y compuesta de tres actos, dedicada por la autora a don Jacinto Benavente, que presenta las tribulaciones de una mujer joven sujeta a las presiones de un espacio reducido y peligrosamente cerrado -un pequeño pueblo castellano-, del que logra escapar gracias al amor de un personaje que representa la apertura de miras y la independencia personal frente a las coacciones de la opinión pública colectiva. La gran modernidad de esta pieza radica en que, sirviéndose de una estructura dramática tan tópica como envejecida -el melodrama con final feliz- y de un lenguaje verdaderamente arcaico y ampuloso -rayano, en muchas ocasiones, en la cursilería-, presenta, en cambio, un radical enfoque de la oposición que se puede ofrecer a los convencionalismos sociales desde la independencia, la valentía y la seguridad en las propias convicciones de cada uno. Dentro de esta crítica a las mentalidades y los poderes establecidos, María Teresa Borragán no desperdicia la ocasión de arremeter también contra los políticos corruptos, lo que basta para explicar que su obra fuera bien recibida por el público en general, y que mereciera los honores de la imprenta durante el mismo año de su estreno (Madrid: Sociedad de Autores Españoles, 1917).

Un año después de haber estrenado Ilusión, la dramaturga presentó A la luz de la luna, una comedia compuesta de cuatro actos que fue estrenada en el mencionado Teatro Principal de Palencia el día 31 de enero de 1918. Su acción, ubicada en grandes salones y lujosos hoteles de Madrid y Nueva York, presenta, dentro de la llamada "alta comedia burguesa", a otra mujer que es víctima de la educación opresiva y las costumbres tradicionales de una sociedad dominada por los hombres. A pesar de la sensiblería en que, a ratos, incurre el texto de María Teresa Borragán, es justo destacar su intento de proclamar desde un escenario la necesidad de igualar las condiciones de vida entre hombres y mujeres. Esta obra también fue llevada a la imprenta (Madrid: Sociedad de Autores Españoles, 1918), lo que da pie a pensar que la dramaturga gozó de un prestigio más extenso que el que podría deducirse a raíz de las escasas noticias que han quedado acerca de su vida y de su obra.

En 1924, en el Teatro Martín de Madrid y a cargo de la compañía de Miguel Muñoz, se llevó por vez primera a un escenario la obra teatral titulada Entre lobos, pieza que algunos estudiosos del teatro español del siglo XX atribuyen a María Teresa Borragán (aunque también ha sido adjudicada a un desconocido Andrés Lurotot). Sea como fuere, lo cierto es que en el transcurso de aquel mismo año de 1924 la escritora volvió a la cartelera madrileña con La voz de las sombras, un tragedia escrita en prosa y compuesta de tres actos, que fue estrenada en el citado Teatro Martín el día 25 de abril, a cargo de la compañía del susodicho Miguel Muñoz. Sin abandonar su línea temática predilecta, María Teresa Borragán presenta ahora a una joven mujer que es casada a la fuerza por su padre, en un matrimonio concertado sólo por interés económico. Será el propio hermano de esta joven -y aquí aparece de nuevo una aportación original y radical de la autora a las convenciones propias de este tipo de argumentos- quien la ayude en los preparativos para abandonar a su malvado esposo y concertarse en adulterio con el hombre que realmente la quiere. Dentro de sus ataques a las tradiciones más rancias de la España profunda, la dramaturga no olvida tampoco en esta obra su alegato contra la corrupción dominante entre la clase política. La voz de la sombra también vio la luz en edición impresa (Madrid: Sociedad de Autores Españoles, 1924).

Además de estos textos dramáticos, María Teresa Borragán escribió y publicó dos obras en prosa que resultan difíciles de encuadrar en alguno de los géneros narrativos habituales, ya que participan de un acusado tono lírico y una fragmentación temática (sucesión de estampas de diverso carácter) que las acercan a la prosa poética. Se trata de las obras tituladas Los dioses futuros (Madrid: Imprenta de Antonio G. Izquierdo, 1921) y La sonata del misterio (Coca [Segovia]: Ramón García Impresor, 1923).

Bibliografía.

  • - HORMIGÓN, Juan Antonio (dir.) Autoras en la Historia del Teatro Español (1500-1994). (Madrid: Publicaciones de la Asociación de Directores de Escena de España, 1996). 2 Vols.

- NIEVA DE LA PAZ, Pilar. Autoras dramáticas españolas entre 1918 y 1936. (Madrid: Consejo Superior de Investigaciones científicas, 1993).

Autor

  • JR.