Barberán, Mariano (1895-1933).
Capitán aviador español nacido el 14 de octubre de 1895 en Guadalajara y muerto, probablemente el 20 de junio de 1933 en algún lugar del mar Caribe entre Cuba y las costas de México. Su nombre completo era el de Mariano Barberán y Tros de Ilarduya.
Realizó sus estudios en su ciudad natal y en 1910 ingresó en la Academia de Ingenieros, donde entró en contacto con el primer empuje de la aviación militar ya que el alto mando de la aeronáutica española permaneció en la Academia de Ingenieros de Guadalajara hasta 1915. En 1917 Barberán, con 21 años, inició su carrera profesional como ingeniero militar, y abandonó su ciudad natal para ingresar, al año siguiente, en la Aviación del ejército, a pesar de sus problemas de visión. En 1924 se convirtió en piloto de aeroplano y tomó parte en las campañas del Rif, donde fue condecorado. Su participación en la Guerra de Marruecos se caracterizó por su pericia técnica y el valor demostrado. Fue profesor de la Escuela de Observadores de Cuatro Vientos.
Barberán demostró un gran interés por las innovaciones aeronáuticas, así, adquirió formación en radiotelegrafía y en navegación aérea, dentro de la Academia de Oficiales del Cuerpo de Ingenieros del Ejército. Pronto destacó como introductor de novedades técnicas aplicadas a la aviación, pero sobre todo como piloto de raids.
En 1933, junto con el aviador Joaquín Collar, emprendió una peligrosa aventura que convirtió a ambos en héroes nacionales y les supuso el reconocimiento internacional, se trataba de cruzar el Atlántico, entre España y Cuba. Ya en 1925 había contemplado la posibilidad, de forma teórica, de realizar un vuelo a través del Atlántico Sur. Su estudio fue de gran utilidad para Ramón Franco, el protagonista del primer vuelo transoceánico (1926) de la aviación española y que tuvo como origen y destino España y Argentina respectivamente.
El vuelo de Barberán y Collar
El 9 de junio de 1933, a bordo de el avión Cuatro Vientos, sesquiplano Breguet XIX modificado, denominado "super bidón", de construcción española, ambos pilotos, en compañía del sargento mecánico Modesto Madariaga Almendros Uriarte y Serrano, partieron desde el aeródromo de Tablada, Sevilla, con dirección a Cuba. Al día siguiente lograron aterrizar en Camagüey (Cuba), con lo que batieron la marca de vuelo directo sobre el mar, ya que recorrieron 7400 km en 39 horas y 55 minutos. Una vez repostado el avión partieron en dirección a La Habana, donde permanecieron varios días, descansando de su aventura y preparando la siguiente fase de la misma.
Tras el éxito de la hazaña, el 20 de junio de 1933 reanudaron el vuelo con dirección a México, pero nunca llegaron a su destino, el avión se perdió y nunca más se supo de sus tripulantes. En la última etapa del vuelo, entre Camagüey y Ciudad de México, se desató una fuerte tormenta que provocó que se perdiera el rastro del Cuatro Vientos. El último punto en el que se registró el paso del avión fue el aeródromo de Villa Hermosa, a las 11:30 horas local del 20 de junio de 1933.
Muchas son las versiones que se han dado sobre la desaparición del Cuatro Vientos, algunas completamente fantasiosas y carentes de veracidad histórica. Se ha especulado con la posibilidad de que tuviesen que realizar un aterrizaje forzoso cerca de la sierra mexicana de Mazatecas, con Barberán herido, Collar intentó solicitar auxilio, pero fue retenido por gentes del lugar que quizás terminaron asesinándoles y ocultándoles en el avión, que jamás se encontró.
JACJ
