Avilés Iturbide y del Fierro, Gabriel de (1735-1810).

Administrador colonial español, nacido en Vich (Barcelona) en 1735 y fallecido el 19 de septiembre de 1810, que fue trigésimo séptimo virrey del Perú (1801-1806).

Hijo del brigadier José de Avilés e Iturbide, primer marqués de Avilés, y de Isabel del Fierro y González, ingresó joven en la carrera militar y al alcanzar el grado de capitán de caballería se sumó a la expedición organizada por Baltazar de Sammanat para realizar la reconquista de las islas Malvinas. En 1768 fue trasladado a Chile para combatir el alzamiento de los indios araucanos. Fue ascendido a teniente general de Dragones y en 1780 se le destinó al Cuzco a combatir la rebelión de Tupac Amaru II. Al morir el general José del Valle en 1782 asumió la conducción del ejército realista en la campaña contra los ejércitos indios de Diego Cristóbal Tupac Amaru y Pedro Vilca Apaza. Ese mismo año contrajo matrimonio en el Cuzco con Mercedes del Risco y Ciudad, viuda del marqués de Santa Rosa. En 1787 fue ascendido al grado de brigadier y se le nombró subinspector de las tropas del virreinato y gobernador de El Callao. Al morir en España su hermano José sin dejar descendencia, heredó el título de marqués de Avilés. En 1796 la Corona le invistió como gobernador de Chile y le promovió al grado de teniente general. Mientras ejercía este cargo el 19 de octubre de 1796 fue designado virrey del Río de la Plata, pero no pudo trasladarse a su nuevo destino hasta el 21 de enero de 1799. Entre sus obras destacan la abolición de las últimas encomiendas que subsistían en Paraguay, la reducción del contrabando y la publicación del Diario de Buenos Aires.

El 20 de junio de 1800, cuando la Corona destituyó al virrey O'Higgins, fue nombrado para este cargo. Hizo su ingreso oficial en Lima el 5 de noviembre de 1801. En el gobierno económico, su política consistió en limitar los gastos con el fin de equilibrar el presupuesto. En 1804 remitió a la Corona por la Real Hacienda 1.24.570 pesos que, en su mayor parte, procedían de los tributos de los indios, la alcabala y las minas. El comercio exterior ingresó en una coyuntura crítica según el Consulado de Lima. En defensa, la guerra entre España e Inglaterra obligó al virrey a reforzar con escasa fortuna el patrullaje de las costas del Pacífico debido al mal estado en que se hallaban las naves que integraban la Armada del sur. Las embarcaciones inglesas siguieron apresando con relativa facilidad las naves mercantes que surcaban las costas chilenas. El único éxito defensivo ocurrió en el puerto de El Callao en 1805 cuando el capitán Domingo de Ugalde a bordo de la fragata "Joaquina" capturó al buque inglés "Antilope". En cuanto a la seguridad interior, el gobierno hizo apresar y ahorcar en diciembre de 1805 en el Cuzco al minero huanuqueño Gabriel Aguilar y al abogado limeño Manuel Ubalde bajo el cargo de tramar una conspiración para destituir a las autoridades y restablecer el imperio de los incas coronando como monarca a Manuel Valverde y Ampuero. Por la Real Orden del 8 de julio de 1803, la Corona desmembró del virreinato de Nueva Granada a la provincia de Guayaquil y la reincorporó al Perú. En 1802 llegó a El Callao la expedición científica del barón Alexander von Humboldt, quien recorrió las regiones de la costa, la sierra y la selva en compañía del botánico francés Aimé Bonpland. Humboldt describió la corriente marítima fría del Perú que después adoptaría su nombre. Los resultados de sus investigaciones quedaron plasmadas en la obra en treinta volúmenes Viaje a las regiones equinocciales del nuevo Continente, publicada entre 1805 y 1835. En 1804 se realizó la primera campaña de vacunación contra la viruela en gran parte del territorio peruano, que estuvo a cargo de los médicos españoles José Salvany y Pedro Belomo. En lo que respecta al Patronato Real, se creó el 28 de mayo de 1803 el obispado de Maynas, territorio cuya gobernación se extendía desde Huamanga por el sur hasta Quijos en el norte, con el propósito de remediar el abandono en que se hallaba esta región desde que se había expulsado a los jesuitas, así como también de frenar el avance de los portugueses. La Corona nombró en octubre de 1805 como primer obispo de Maynas al sacerdote franciscano Sánchez Rangel, pero éste poco pudo avanzar en su labor misionera debido al conflicto jurisdiccional que estalló con el convento de Ocopa que, paradójicamente, estaba regentado por religiosos de la misma orden.

Al cumplir cuatro años y nueve meses de gobierno, Avilés fue relevado en el cargo por Fernando de Abascal, a quien entregó el mando el 26 de julio de 1806. Mientras duró su juicio de residencia permaneció en Lima, y al ser absuelto de todo cargo se trasladó a Arequipa. Partió hacia España en 1810, pero enfermó en Valparaíso y murió 19 de septiembre de 1810.

Bibliografía

LORENTE, Sebastián. Historia del Perú bajo los Borbones 1700-1821. (Lima: 1871).
MILLA BATRES, Carlos (ed.). Compendio Histórico del Perú. Historia del siglo XVIII. (Lima: 1993).
TAURO, Alberto (ed.). Enciclopedia ilustrada del Perú. (Lima: 1987).

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