A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
Ocio y entretenimientoBiografía

Ávila, Jorge (s. XX).

Matador de toros mexicano nacido en San Luis de Potosí (en el estado homónimo) a mediados del siglo XX. Aunque su arte y valor quedaron inéditos en las plazas peninsulares (pues nunca llegó a cruzar el Atlántico para confirmar en España sus triunfos ultramarinos), gozó de gran predicamento en los círculos taurinos españoles y mejicanos por su incesante actividad como empresario o gerente de algunos de los cosos más importantes del país azteca (como Monterrey, Guanajuato, Mérida, Tijuana y Ciudad Juárez).

En el curso de una entusiasta andadura novilleril plagada de dificultades, el joven Jorge Ávila se vistió de luces para hacer paseíllo en las arenas de Sabinas Hidalgo (en el estado de Nuevo León) el día 27 de febrero de 1972, fecha en la que, acompañado en los carteles por el también novel José García ("El Charro"), obtuvo un clamoroso triunfo que le valió una oreja de cada uno de los dos enemigos que conformaban su lote, pertenecientes a la ganadería de Peñuelas.

Alentada por este triunfo, su titubeante carrera taurina experimentó un progreso considerable que le permitió, después de dos años más fogueándose en el escalafón novilleril, comparecer ante sus paisanos el día 15 de diciembre de 1974, dispuesto a tomar la alternativa. Se presentó flanqueado por dos de las mayores figuras que, a la sazón, decoraban el panorama taurino azteca: el ya veterano coletudo jalisciense Manuel Capetillo Villaseñor, que hacía las veces de padrino, y el espada de Aguascalientes Manuel Espinosa Menéndez ("Armillita"), presente en calidad de testigo. En el transcurso de aquella emotiva función de toros, el toricantano se doctoró dando lidia y muerte a estoque a un astado señalado con el hierro de Cerralvo.

Al parecer, Jorge Ávila no pasó por las arenas de Ciudad de México para confirmar ante sus propios compatriotas la validez de este doctorado en tauromaquia. Sin embargo, siguió toreando durante algunas temporadas en diferentes plazas de todo el territorio mejicano, en algunas de las cuales protagonizó actuaciones que, por su pureza y calidad, permanecieron durante mucho tiempo en la memoria colectiva de la afición azteca. Así, v. gr., el día 6 de marzo de 1977, en el coliseo taurino de Puerto Vallarta (en el estado de Jalisco), ganó el trofeo puesto en liza en el festejo celebrado aquella tarde, frente a otros dos espadas mejicanos de la talla de Ernesto San Román Sandoval ("El Querétaro") y Raúl Ponce de León. Las reses que se jugaron en dicha función habían pastado en las dehesas de don Ezequiel Gutiérrez.

Autor

  • JR.